La saga de los Guerreros de Fuego.

Capítulo 27: Los nueve círculos del infierno.

Primer Círculo: Traición.

—Esa voz... No puede ser...

Y salió de la oscuridad. Con su pelo blanco, sus ojos rojos y con una gran sonrisa se puso delante de Ryu.

—Dante. Hacía mucho tiempo que no nos veíamos— Dijo el peliblanco.

—¿Ryu?— Dijo el Trazacaminos. mientras comenzaba a llorar.

—Hacía tiempo que no nos veíamos. Desde que me mataste y me suplantaste— Comenzó a sonreír.

—Lo siento— Dijo mientras se ponía de rodillas en el suelo— Siento haberte robado tu vida.

Arslan lo abrazó mientras lo tranquilizaba.

—Lo hiciste bien, amigo— Sonrió— Al final si me hubieses dejado vivo nunca hubiese encontrado la paz pero tú sin embargo hiciste algo que nunca hubiese podido hacer: Ser feliz.

El Trazacaminos se recompuso tras ver esto. No podía creer que su amigo a quien traicionó.

—Normalmente este círculo es el último PERO— Sonrió— Le pedí a Arion que lo cambiará para ser el primero porque sabía que vendrías.

—Entonces ¿Ya sabes porque estoy aquí?

—Por la chica. Tranquilo has de superar los nueve círculos pero Arion ya ha pensado en todo— Dijo mientras invocaba la Stinger— Ahora tengo que detenerte.. O intentarlo al menos— Dijo mientras emitia un Aura que al Trazacaminos en este punto de la historia no impresionaba.

Ryu puso sus puños en posición de combate ante la extrañeza de Arslan de que no invocara ningún arma.

Arslan se lanzó al ataque con la espada, lanzó un tajo que Ryu paro de un puñetazo con la mano derecha y con la izquierda le golpeó la cara con lo que él pensó que era un poco de fuerza. Pero le lanzó al otro lado de la sala haciendo que el combate no durase nada. No fue ni un desafío realmente.

—Realmente te has vuelto fuerte amigo— Dijo Arslan mientras se recomponia y tenía todo el cuerpo lleno de heridas— Sin lugar a dudas ahora eres más fuerte que Lilith.

—No creo eso.

—Solo recuerda lo que Lilith me hizo cuando me lanzó. No acabe tan mal herido de aquello.

—No lo recuerdo bien. En aquel momento tenía miedo— Ambos comenzaron a reírse.

—Ahora ve. Ve a salvar a la chica. Se feliz porque te lo has ganado.

Ryu comenzó a correr pero Arslan lo agarró del brazo y lo besó.

—Lo siento. Me quise dar el gustazo— Dijo sonriendo— Ahora si. Puedes irte. Ryu.

—Gracias.

Y Ryu subió al segundo anillo del infierno.

Segundo Círculo: Limbo.

Ryu comenzó a caminar por el segundo círculo sin entender bien lo que estaba viendo. Gente que no había aceptado su muerte. Seres que no eran indeterminados. Niños y monstruos. No había nada en este círculo que le incitase a quedarse.

Busco la salida rápidamente pues el guardián de este círculo no lo esperaba a él si no que tenía otro invitado reservado.

Y Ryu se aventuró al tercer círculo del infierno.

Tercer Círculo: Lujuria.

El Trazacaminos no era alguien que hubiese pensado en los deseos terrenales pero allí estaban todos. mujeres con grandes pechos que intentaban seducirlo que movían las caderas para que se quedasen allí. Comenzaron a levantar el interés del trazacaminos pero había algo que era más importante que estar allí: Atriane.