Me convertí en el príncipe heredero del Imperio Mexicano - Volumen I

Capítulo 133: Guerra México-Estados Unidos VI

"¡No es la ciudad, retírense hacia el norte!"

"Ríndete. Si seguimos retrasándonos, los mexicanos vendrán."

"¡Maldita sea!"

Ya era tarde y todo estaba sumido en la oscuridad. Si seguían retrasándose, podrían ser alcanzados por el ejército mexicano en la oscuridad. El cuerpo principal ya estaba muy lejos.

El general Winfield Scott, quien comandaba las tropas en la ciudad, y el mando estadounidense habían dado la orden de retirarse hacia el norte, transmitiendo la orden de retirada a las tropas en los flancos izquierdo y derecho, pero quizás por confusión, muchas fuerzas entraron a la ciudad.

Aunque en el campo de batalla estas confusiones podían ocurrir, el ejército mexicano avanzaba rápidamente, por lo que no había tiempo para resolver el problema.

El ejército estadounidense abandonó a los soldados que quedaban en la ciudad y se retiró.

Aunque no se veía con claridad debido a la oscuridad, el ejército mexicano también comenzaba a entender la situación.

"Parece que ha habido una confusión en las órdenes."

"No sé si fue una confusión o si simplemente se sintieron más seguros y huyeron a la ciudad."

Incluso los generales se burlaron de los estadounidenses con voces altisonantes.

"Jaja, ¿es que esos tontos pensaban que íbamos a librar una batalla urbana?"

El general Antonio también se mostró complacido. Ellos debían haberse retirado hacia el norte.

El objetivo del Imperio Mexicano era el río Misisipi. La ciudad de Nueva Orleans era solo un objetivo secundario, y aunque tuvieran ventaja en fuego, no iban a arriesgarse a librar una batalla urbana, que solo podría resultar en grandes pérdidas de vidas.

"Que los ingenieros rodeen la ciudad con alambre de púas y que la artillería apunte con los cañones para rodearla. El resto se encargará de atender a los heridos y preparar el campamento."

"¡Sí, señor!"

La flota imperial había suprimido con éxito los cañones costeros y las instalaciones defensivas, y podía bombardear la ciudad en cualquier momento.

El ejército del Imperio Mexicano se estableció en un campamento mientras rodeaba la ciudad.

Pasó la noche sangrienta, y el ejército mexicano comenzó a reorganizar el campo de batalla.

Chak-

El ayudante que levantó el saludo informó sobre los resultados de la reorganización del campo de batalla.

"General, en la batalla de ayer, los muertos fueron 1,811, los heridos graves 1,500 y los heridos leves 2,100."

"...Entendido."

En un solo día, el número de bajas alcanzó las 5,400 personas.

"¿Se ha determinado el tamaño del ejército estadounidense que se retiró hacia el norte?"

"Aún no. Tan pronto como se sepa, lo informaré."

"Así lo haremos."

A pesar de las grandes pérdidas, alrededor de 75,000 tropas habían cruzado al norte del río Misisipi.

'Pronto, el II Cuerpo llegará y se encargará de la administración del territorio ocupado, además de realizar el suministro y la batalla en el sur, por lo que el primer objetivo ha sido alcanzado.'

Mientras el general Antonio trataba de calmar su corazón adolorido por la pérdida de tropas mayor de lo esperado, en Nueva Orleans la desesperación comenzaba a apoderarse de la ciudad.