Al ver la transmisión en la que un extraño detective conocido como "L" enfrenta a Kira, Sayuki Mei no dudó en quedarse completamente enamorada de alguien a quien no se le ha visto en persona. Esto hace que la joven, de 18 años de edad, empiece a inv...
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Llegué a casa y decidí sentarme a escribir sobre un par de cosas. Sobretodo pensaba en Kira, en quién sería y el porqué de sus acciones. Dudé por un momento en si L lograría descubrirlo, y aunque tenga muy claro que es el mejor detective del mundo, Kira es una mente maestra y es obvio que no es fácil de vencer.
Si L y yo nos conociéramos, para él todo sería más fácil: acabaríamos de una vez con Kira y, ¿Por qué no? Que tenga unos cuantos hijos conmigo no es una mala opción...
—Qué cansancio...—resoplé echada en la cama.
El sábado era mi día laboral; hacía lo de siempre, nada nuevo. Mi madre nunca se preocupaba por mí, así que no subía a mi habitación a verme —también porque se lo prohibí—Light llamaba a veces...Pero nuestras conversaciones se tornaban aburridas ya que no le prestaba mucha atención por estar haciendo mis cosas. De todas formas, nuestras pláticas serían más divertidas si las tuviéramos en persona, pero... ¡Sí, Kiyomi Takada es el problema!
***
—Puede que esté exagerando.
La mayor vergüenza que puede pasar una chica de diecinueve años es salir a la calle con trenzas, y es mucho más vergonzoso si aparentas menos edad de la que tienes. Las personas no entienden que es realmente tedioso que piensen que tienes catorce cuando vas a hacer la compra...
Atiendo el teléfono al ver que mi madre es la que llama.
— ¿Necesitas algo?
— ¿Mei? —Preguntó después de pegar un grito—Necesito que vayas al centro, es bastante... ¡No hagas eso! —De fondo se escucha un plato romperse— ¡Apúrate, vamos! —cuelga la llamada sin decir nada más.
En la llamada, aparte de escucharse cosas romperse, se escuchaban gritos de mi padre diciendo cosas como: "¡Eres un maldito!", "¡Muérete!" Así que empecé a caminar mucho más rápido al darme cuenta que las personas a mi alrededor, también lo hacían. — ¿Todas van hacia el centro? —Pienso siguiéndole en paso a muchas de ellas. Están tan alarmadas, que no se entiende lo que dicen.
Y recuerdo...Que esto solo había pasado una vez...
— ¡Sabía que tarde o temprano ibas a llegar! Si te perdías esto, no sé qué harías.
E s t á s a q u í Takeshi.
Me encontré a Takeshi entre la multitud que parecía contento de verme. Su linda cara de niño pequeño no daría tanto miedo si no fuese por su diminuta boca y enormes ojos...
—Ni si quiera sé que está pasando—exclamé para que pudiese escucharme. Soltó una carcajada.
—Mira hacia arriba.
Al hacer lo que él me pidió, me encuentro con el gran televisor de Kanto delante de mí. En la pantalla, se podía leer la palabra "Kira", escrita con el mismo tipo de letra que L usó aquel día en el que hizo su transmisión en vivo. Hago una mueca con mi boca, —Aparte de asesino, es un copión...—
— ¿Qué pasa? —pregunté.
—Kira dará un mensaje. Comenzó a hablar antes de que llegaras—sonrió—Mató a varias personas de diferentes programas de televisión. Da pena...Pero es asombroso.
— ¿Asombroso? —Repetí. Esto verdaderamente es más perturbador que otra cosa. Kira sólo mata criminales, ¿Por qué mataría a la gente no le ha hecho nada?
—Al parecer quería probar que era Kira. Para probarlo...mató a gente—agregó Takeshi.
—Está loco.
Camino entre los demás para acercarme a las primeras filas. Takeshi me sigue, diciendo mi nombre repetidas veces pero yo lo ignoro.
Al llegar lo más adelante que puedo, escucho con atención lo que Kira quiere decir: "Odio la maldad y amo la justicia. Pretendo crear un nuevo mundo; un mundo perfecto" Abro los ojos como platos pensando: — ¿Es una farsa, cómo puede matar de la misma forma que Kira? —El que Kira mate a oras personas que no tienen nada que ver con sus planes me hace pensar que...Imitar a Kira es bastante fácil.
—Entonces...Tengo hambre, ¿Te parece compartir? —Takeshi se agacha agarrando mi bolsa de compras. Lo aparto. — ¡Eh, no seas cruel! Gracias a mí sabes todo lo que está pasando.
C r u e l
Le lanzo una risa sarcástica.
—Es la primera vez que te voy a agradecer por algo. Pero no gracias, esta comida hoy no va a ser para ti.
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Llego a mi casa poniendo una cara de asco. Entiendo que mi madre esté agradecida por irle a hacer las compras y ayudarla a tranquilizar a mi padre, pero una revista de Amane Misa no era exactamente el regalo que esperaba.
—La transmisión de Kira fue una mierda...Y odio a Misa-Misa—digo con un hilo de voz exagerando lo último.
Amane Misa es una de las modelos más guapas de estos tiempos. Siempre sonríe, más delgada no puede estar, y oculta sus ojos cafés poniéndose unas lentillas para verse más interesante; es una estúpida en pocas palabras, y ni si quiera sabe actuar.
La odio tanto...Que prefiero tener en navidad un pedazo de carbón a una revista suya.
***
— ¡No fue agradable lo que hizo! —le refunfuño a Light en la hora del almuerzo.
— ¿Acaso viste la transmisión completa? —pregunta masticando lentamente con los ojos cerrados.
Niego con la cabeza. Escucho su risa luego de verlo levantarse de la mesa.
— ¿A dónde vas? —lo interrumpo levantándome al igual que él.
—Kiyomi de seguro me está esperando—contesta agarrando su mochila—Vamos glotona.
Me da la espalda caminando hacia la puerta de la universidad.
Me quedo parada sin seguirlo, mirando al suelo. Acomodo mi mochila al hombro para que no se me caiga y sueno mi nariz, —Ya veo— pienso —Se aleja...—Tapo mi cara enrojecida para que nadie me vea.
Puede que no esté celosa de Kiyomi Takada...Sino de Yagami Light, el chico perfecto que tiene una vida sin necesidad de preocuparse por la de otra persona.
—Hey, no te sientas mal—dice Light volteándose—Te veía desde lejos, ¿Por qué te pones así?
Me encojo de hombros. Light se acerca un poco más poniendo su mano en mi espalda; da círculos alrededor de ella.
