Unholy Trinity

→ f o r t y t w o

→ Faith
Me quedé estirada en el sofá, moviendo mi pierna como si de un tic se tratara; sin poder evitar pensar en que, quizás, Michael tenía razón, y lo mejor que podía hacer era alejarme de Sandy y Harry. Luego me refuté a mí misma, pensando en que yo sin ellos no tenía sentido. Pero luego volví a pensar en ello, diciéndome que ni siquiera se preocupaban por mí, mis sentimientos, o cualquier cosa que me relacionara. Ambos querían una sola cosa: cariño. Daba igual si era a través del sexo, o no. Ambos solo querían que yo les diera todo, pero que no esperara recibir nada a cambio. Porque no obtendría ni un "Gracias, Faith, por estar a mi lado". Ni un jodido gracias.

- Chicas no deberíais estar viendo la tele tan tar-... - irrumpió mamá, apareciendo en el salón de golpe - ¿Faith? ¿Qué haces aquí sola?

- Ver la tele, no tengo sueño.

- ¿Por qué no la ves en tu cuarto?

- Porque no quiero.

- ¿Te has peleado con Sandy?

- Déjame, mamá. No quiero hablar ahora, ¿sí?

- Faith...

- ¡Déjame! - bufé - Ha sido, oficialmente, el peor cumpleaños de la historia.

- Siento no haber podido cambiar las reuniones para haber estado contigo, Faith... - susurró mamá, sentándose a mi lado y acariciándome el pelo.

- Da igual, para lo que he hecho... mejor estar sola.

- Deberías ir a la cama, aquí podrías hacerte daño en el brazo.

- Mañana ya me ha dicho el médico que puedo quitarme la venda, ya estoy bien mamá. No te preocupes por mi brazo.

- Hey, tanto Sandy, como Harry, como yo, te queremos muchísimo, ¿está bien Faith? Cada uno tiene su propia forma de querer, y su propia forma de demostrarlo, y quizás lo que para ti sea un acto en que te demuestren cuanto te quieren, para ellos sea algo insignificante; mientras que otras cosas que a ti te parecen tontas, quizás para ellos representen cuánto te quieren. No deberías dudar de ello nunca. Sandy y Harry te adoran, a pesar de todo lo que paséis, ellos te quieren con todo su corazón, y estoy cien por cien segura de ello.

- Ya lo sé, mamá... - murmuré, con un nudo en la garganta - Simplemente me gustaría a veces que demostraran su amor como las personas normales, y no como ellos lo hacen. O un simple gracias, no pido más... Que tengan un pequeño detalle conmigo. Pero no son capaces de ello.

- Házselo ver... no son adivinos, cielo. Necesitan saber qué hacen mal para poder pensar en ello e intentar arreglarlo.

- Sandy y Harry no escarmentarán, mamá. Pueden cambiar durante una semana, y hacerlo todo bien... pero luego vuelven a lo de siempre. Le he reprochado mil veces a Sandy lo mismo, y sin embargo vuelve pasos atrás después de haberlo corregido.

- No puedes estar eternamente enfadada con ellos... les necesitas, al fin y al cabo.

- Lo sé, pero sí puedo estarlo durante un tiempo.

- Prométeme que no harás ninguna tontería que suponga perderles a los dos.

- Lo intentaré... - murmuré, sintiendo como mi madre me arropaba con la fina manta que solía haber en el sofá.

- Buenas noches, cielo. No tardes mucho en dormir.

- Buenas noches, mamá.

→ Sandy
Cuando me levanté, porque tocaba otra jornada de recaudación de dinero en el instituto, no supe si salir de la habitación, arriesgándome a que Faith me ladrara, o algo por el estilo; o quedarme encerrada en la habitación hasta que se calmara. Cuando estaba debatiéndome interiormente, para decidir qué hacer, ella misma entró en la habitación, se veía mucho más calmada que la noche anterior, aunque no tenía muy buena cara, seguramente no habría dormido mucho.