✓ ❝sé que vas a quererme sin respuestas...❞
Cuando se conoce al primer amor, tan dulce y peligroso, ¿se puede escapar de aquella aventura? Catherine Perret y Sebastián Fassbender tienen la respuesta. Ella una bella joven americana y él un cautivado...
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Su historia de amor había comenzado de forma extraña. Con cariños y preocupaciones fuera de las habituales. Nunca antes había visto en mi hermana una mirada como la que él le generaba. Acunaba en ella una emoción desbordante que cada día, a cada minuto crecía y crecía con el solo hecho de saber que él estaría a su lado.
Un amor así nunca había sido real para mi. Nunca con aquel grado de fascinación y encanto de una persona por otra. Tanto que asusta. Te hace sentir miedo por lo que sucederá y te hace preguntarte como las cosas terminarán y sinceramente, jamás imaginé que las cosas terminarían así. Ni en los más devastadores y aterradores momentos lo pensé. Nunca hubiera querido tal daño para ella y ahora, con el paso de tiempo, entiendo que tampoco lo quería para él. Jamás desee que ninguno de los dos sufriera de la forma en que terminaron haciéndolo porque, para mí, ellos no se habían equivocado en nada. No habían cometido errores. Ellos habían únicamente florecido y caído en tan puro y desconocido amor.
Era inevitable pensar en la verdadera razón que gatillo el final. A veces, cuando capturaba a mi hermana vagando en sus propios pensamientos y temía que estuviera pensando en él, me lo preguntaba. Que fue lo que falló entre ellos o que fue lo que falto quizás. Que hubiera sido de ellos si nada de esto hubiera pasado. En esos momentos, buscaba incesantemente por razones. Era mi deber. No encontraba otra manera de ayudar a mi hermana durante el doloroso e insoportable, desgarrador momento por el cual su alma atravesaba.
Quizás si encontraba algo para poder ayudarla ella volvería a vivir. Necesitaba encontrar una razón. Una pequeña importancia en esta vida que fuera tan suficiente y necesaria para que viera el sentido nuevamente. No quería perderla. Me aterraba pensar en que ella pudiera dejarse caer en su gran y oscuro mar, sin ser capaz de salir jamás de él.
