Collette Le Blanc

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  Querido diario: Hoy regreso a Hogwarts nuevamente y espero que Mary pueda hacer el viaje con nosotros. Por suerte, su papá no la castigó por huir de su hogar, pero rechazó el pedido de la señora Nott para que Feldom la deje en paz.

Tengo muchas ganas de regresar al colegio y ver al profesor Snape. Tal vez en esta oportunidad me anime a pedirle que me enseñe a preparar la poción regeneradora.

Escribiré nuevamente esta noche cuando me encuentre en la sala común para contarte qué tal estuvo el viaje.

Thomas Feldom dejó de tener autoridad sobre Marie Anne, una vez que traspasaron la entrada al castillo. De modo que, ni bien descendió del carruaje, donde el rubio chiquillo la había obligado a viajar junto a algunos de sus compañeros, se alejó de prisa para alcanzar a Aliccie y los otros que ingresaban en ese momento al gran comedor. Y más tarde, en la sala común, los seis amigos permanecieron inmersos en una animada charla hasta muy entrada la noche.

Aceptando la sugerencia de Aliccie y Valery,  Marie Anne repitió punto por punto todo lo revelado durante su visita a la casona, acotando un poco más de información, obtenida de su prometido, a quien debió soportar estoicamente hasta culminar las vacaciones navideñas.

-¿Entonces el padre de Feldom no es mortífago?-quiso confirmar Valery-¿Aunque participe de las reuniones de éstos?

-Es lo que Thomas asevera-respondió Marie Anne- Y según él, tampoco lleva la marca-

-De todas maneras, aunque Feldom sea un idiota, hay que admitir que su padre fue muy valiente al haber rechazado una imposición así-dijo Chuck- Mis abuelos lo hicieron también y pagaron las consecuencias.

-Los míos igual- repuso Valery-Porque aunque mi abuela sobrevivió, es como si estuviera muerta en vida. Ni siquiera la magia de los sanadores pudo curarla. Nadie se cura de un trauma de esos, según mi madre.

Los muchachos guardaron silencio. Valery no había llegado al mundo aun cuando los mortífagos irrumpieron en la mansión de los Salk, provocando toda aquella tragedia. Pero su madre le había relatado a grandes rasgos, lo sucedido a sus abuelos paternos, puesto que Benjamin evitaba tocar el asunto, muy a pesar de que visitaba continuamente a su progenitora, recluida en San Mungo.

Chuck en cambio, recordaba levemente a su abuela materna quien había muerto en Hamburgo cuando él contaba solo casi tres años de vida

Sus restos reposaban en el cementerio familiar junto a los de su abuelo, muerto por la maldición asesina, lo mismos que sus tíos abuelos.

Un grupo de mortífagos habían perpetrado en la residencia de las colinas en el mismo momento en que Rosaly, la madre de Chuck, y su flamante esposo, retornaban junto a los bisabuelos, del ayuntamiento muggle donde se habían casado.  El señor Bones, junto a su hermano y la esposa de este, sirvieron de escudo para que los esbirros de Voldemort no atacaran a los recién casados y estos junto a la abuela de Chuck, lograron huir por la chimenea, yendo a dar a la tienda de Madame Malkin, amiga de la familia y madrina de Rosaly, Desde allí habían escapado hacia el hogar de los Staunton, padres de Edward y luego a Alemania país de origen de sus abuelos muggles, donde residieron hasta que el señor oscuro dejó de representar una amenaza para el mundo mágico.

-¿De modo que, tu tío Nott, ese señor Malfoy, y todos los magos que fueron atrapados por los aurores, declararon haber sido manipulados por la maldición Imperuis?-preguntó Harry, a quién no le importaba que su amiga estuviera emparentada con mortífagos. Solo tenía trece años, pero entendía claramente que en una misma familia podía haber diferentes posiciones respecto a algún tema.

-Exacto -respondió Marie Anne-Por eso están en libertad. Los pocos que se atrevieron a defender sus ideas están en Azkabán y los que no, lucharon hasta ser asesinados por los aurores.

Siete Años en Hogwarts.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora