.005.

5.6K 390 97
                                    

El hecho de que Yoongi quiera hacer nuestra relación pública me da extra energía para correr a la par del entrenador. Por lo general él es más rápido que yo pero hoy estamos cabeza a cabeza. Después de dar 2 vueltas extras alrededor de la pista de atletismo, sigo con mi rutina y voy a darme una ducha para iniciar el día.

— Maldita sea Min Yoongi, justo ahora tenías que hacerme esto. Juro que te la haré pagar luego — pienso en voz alta mientras intento, como sea, cubrir la marca violácea que me dejó en el cuello con sus besos con maquillaje. Con un  grupo nuevo de bailarines dando vueltas por ahí, no puedo andar con esto a la vista. No logro que desaparezca por completo pero la aclaro bastante como para que pase desapercibida, si dejo mi cabello suelto y que caiga sobre mi hombro. 

— Oh, __t/n__, estaba por llamarte — apenas salgo de mi habitación, Sun Gi lanza un suspiro aliviado de verme y lo observo algo confundida. Soporta la parte superior de su cuerpo en sus brazos apoyados en sus rodillas por unos segundos mientras recupera el aliento. ¿Estuvo corriendo por todo el edificio buscándome o le está haciendo efecto su edad? Como dicen, los años no vienen solos.

— Ven conmigo — me dice finalmente y lo sigo.

— ¿Qué pasa? — le pregunto mientras caminamos pero parece que sólo puede hacer una cosa a la vez porque voltea a verme sonriendo, una sonrisa cómplice y divertida, y se queda en silencio. Cómo odio que haga eso.

Llegamos a la puerta de la oficina del CEO y me paralizo a unos metros de ésta, asustada. ¿Por qué querrá hablar a solas conmigo el CEO? Repaso en mi mente todo lo que he hecho en estos últimos meses, buscando algo que pueda haberlo molestado pero no se me viene nada.

— Tranquila que no hiciste nada malo — Sun Gi se vuelve sobre sus pasos y me da un empujoncito para que camine hacia la puerta. 

— Si no hice nada malo, ¿por qué quiere hablar conmigo? — digo nerviosa.

El CEO me infunda un poco de temor y siempre que he hablado con él, estoy con mis unnies pero ahora no están.

— Pues no sé, sólo me dijo que te trajera y eso hice — se para detrás de mi y extiende su brazo sobre mi cabeza para llamar a la puerta con tres golpes.

— Adelante — responde una voz que proviene del interior de la oficina.

— Oppa, por favor entra conmigo — tomo su brazo con desesperación para evitar que me deje sola y él empieza a reírse por mi reacción. Se deshace mi agarre, abre la puerta y, con un último empujoncito, me susurra en voz baja "buena suerte". 

Cuando la puerta se cierra por detrás de mi, contengo la respiración unos segundos mientras veo al CEO sentado frente a mi del otro lado de su escritorio. Le hago una reverencia bastante pronunciada como saludo y al ponerme derecha otra vez, me mareo un poco pero logro disimularlo. Me indica que me siente en una de las sillas frente a él y lo hago.

<<Por Dios respira o caerás muerta aquí mismo>>  me recuerdo mentalmente.

— Disculpa que te quite preciado tiempo cuando tienes muy poco preparándote para el concierto — empieza. Su tono de voz es relajado y me ayuda a descontracturarme un poco. Sonrío nerviosa, dándole a entender que no hay problema. 

— Hemos sido contactados por el reconocido productor estadounidense, Dean Brown, con intenciones de querer trabajar con nosotros — continúa. — Contigo — agrega y noto cierto brillo de orgullo en su mirada. 

Apenas dijo su nombre, se me cayó la quijada al suelo, prácticamente. Dean Brown compuso y produjo tantas canciones que fueron éxitos, trabajó y colaboró con tantos artistas que no puedo creer que haya llamado aquí por mi.

Sunbae and I || SUGA || 3ra TempDonde viven las historias. Descúbrelo ahora