Sunbae and I || SUGA || 3ra Temp

.004.

Esta mañana la alarma sonó pero la apagué sin darme cuenta y, como me levanté tarde, apenas tuve tiempo de cambiarme de ropa para ir a entrenar. El entrenador me lleva a una pista de atletismo que hay a dos calles del edificio de Big Hit y corremos varias vueltas. Luego vuelvo al dormitorio y me doy una ducha para empezar el día: ensayos para el concierto y grabaciones de programas. No me vendría nada mal que el día fuese de 30 horas o más porque no parece alcanzarme el tiempo.

De camino al estudio de ensayo, me encuentro con Chan. Camino en silencio detrás de él y salto sobre su espalda, rodeando su cuello con mis brazos.

— ¡Buen día oppa! — le grito en el oído y él aleja su cabeza.

— ¡Yah! ¿Quieres dejarme sordo? — me regaña entre risas. Él toma mis piernas con fuerza y continua caminando conmigo en su espalda. Siempre  me gustó su espalda, es bastante ancha y cómoda, parecida a la de Jin.

— ¿A dónde vas? —.

— Al estudio de baile, ¿no es hora del ensayo de G:Fire? — gira sobre su hombro y nuestros rostros casi se rozan.

— ¿Estarás en nuestras presentaciones? — pregunto con una sonrisa casi de oreja a oreja. Creí que no íbamos a tener bailarines de apoyo. 

— ¿Crees que iba a dejarte sola? Necesitan el mejor para que su presentación sea la mejor — dice refiriéndose a él mismo.

— Qué modesto eres — me río.

Apoyo mi cabeza sobre su hombro y continuamos el camino de esa manera hasta llegar al estudio.
Somos los primeros en llegar, ni siquiera el coreográfo, Dongsun, ha llegado todavía. Enciendo la computadora y me pongo a revisar los archivos mientras Chan ordena algunas sillas que estaban en el centro del estudio. Le doy click a una pista de audio nombrada con números y "Run It" de Chris Brown empieza a sonar por los parlantes.

De repente, me siento melancólica porque la primera coregrafía que bailé con Chan fue esa canción.

— Wow, hace mucho que no escucho esa canción — dice Chan acercándose a la computadora. 

— No sabía que la tenían guardada — digo.

— Ven — me toma de la mano y me hace parar. — Pónla desde el principio de nuevo — me indica y lo hago. Luego me lleva hasta el centro del estudio, frente al espejo. 

— No me acuerdo los pasos — digo  algo nerviosa.

— ¿Cómo que no? La armamos entre los dos — empieza a moverse y me parece viajar en el tiempo a aquel día. Ahora lo recuerdo: ambos estábamos muy nerviosos porque nos habían dado sólo 1 día para armar una coregrafía deslumbrante y los dos éramos inexpertos pero encontramos la manera de vencer nuestros temores e inseguridades sobre si éramos buenos o no e hicimos que nuestra coreo fuera aplaudida por todos. 

Sigo el ritmo de la canción y ahora ambos parecemos dos gotas de agua con movimientos idénticos. 

— No me acuerdo los pasos — dice burlándose, imitando mi tono de voz cuando terminamos de bailar. 

— Verte hacerlos me refrescó la memoria — le contesto.

Camina hacia mi y, sin darme tiempo a reaccionar, pone sus manos en mis mejillas y me mira directamente a los ojos. Traía puesta una gorra y no se me veía bien el rostro pero ahora que me la he quitado, y para colmo que no llevo maquillaje, debo haber dejado a la vista mi rostro de panda.

— Luces cansada — me mira detenidamente. — Te dije que te fueras a dormir apenas volvieras al dormitorio —.

— Lo hice — digo con un tono gracioso porque él aprieta mis mejillas y hace que mi boca se parezca a la de un conejo.