No siempre fue Amor

Capitulo 5: Contradicciones

Estaba en mi penúltima clase y sentía que el Nestea de la comida me estaba haciendo efecto, pedí permiso al profesor que estaba sentado en su escritorio mirando unos papeles, para poder ir al baño, entonces salí y me fui caminando por el pasillo con ganas de llegar lo antes posible al servicio de las chicas. 

Cuando justo iba llegando una puerta de al frente se abrió y salió David viéndome enseguida, así que, me di media vuelta y me metí al servicio. Una vez hice pis, me miré al espejo intentando poner un poco en orden mi pelo rojizo y me fui. En cuanto salí del servicio me alivie de no ver a nadie, pero entonces sentí un brazo sobre mi codo que me detenía y me hizo girar para ver quien era, aunque muy en el fondo creí saber quién era y mi intuición no falló.

-Espera Elizabeth- me dice David.

Le miro un poco sorprendida pero más con cara seria y le digo:

-¿Qué pasa?-

-Perdona por lo de ayer, no fue mi intención parecer un poco borde-

-Ya claro, si me sueltas como que mejor sabes- le digo, haciéndole una mueca al final, señalándole mi codo.

-Si..si, perdona-me suelta y se queda apoyado contra la pared y yo enfrente de él con mis brazos cruzados, mirándole todavía un tanto seria.

-Veras quería hablar contigo para que nos pusiéramos de acuerdo para quedar...por lo del trabajo- aclara un poco al final, mirándome un poco como incómodo.

<Pero bueno este chico es de lo más bipolar, a veces es amable, otras un borde y ahora parece incómodo y hasta nervioso diría, hablando conmigo >, pienso.

-Si claro, pues no sé... podemos quedar después de las clases, a las cuatro ¿te viene bien?-

-Si..si- dice un tanto nervioso -podemos ir a mi casa que no hay nadie-

Le miro un poco desconcertada porque parece que lo dijera con doble sentido su proposición, aunque no parece divertido como otras veces sino mas bien incomodo, como si le diera vergüenza mirarme a los ojos ahora.

Como ve que no digo nada se aclara un poco la garganta, y me dice: -Lo digo para que trabajemos mas a gusto y además tengo impresora por si lo necesitáramos para el trabajo, aunque si quieres podemos ir a la...-

-No, no, esta bien, nos vemos entonces luego en tu casa- le interrumpo, pensando que prefiero ir yo a su casa que estar en mi casa con mi madre o mi hermano merodeando por ahí.

-Vale, pues luego nos vemos-

-Ok-

Voy caminando por el pasillo de camino a clase, pensando que ya he tardado demasiado y puede que luego el profe me regañe.

-¡Espera!- me grita David.

Me doy la vuelta y le veo que viene corriendo hacia a mi.

-Dame tu número para pasarte luego la dirección de casa-

-Ah claro, es...- se lo digo viendo como guarda mi número en su móvil y me fijo que tiene de fondo una foto de un coche, suerte que para mí no tiene ninguna foto de una chica, aunque eso a mi no debe de importarme,<¡¡joder olvídalo ya Eli!!> , me digo a mi misma.

Efectivamente, cuando entro a clase miro al profe con cara de un "lo siento" y él me mira un poco mal con cara de "joder, nos hemos dado un buen paseo, ¿no?", así que me hace un gesto con la cabeza para que me vaya a mi sitio, mientras todos los demás están escribiendo y haciendo sus cosas en silencio.