Forty-seven.

5.4K 300 64
                                    

«z»

Aparque mi motocicleta en la entrada de la casa de Jill y sonreí al ver a Kathy saliendo y abriendo la gran puerta para que yo pudiera entrar, subí las escaleras a paso animado y me detuve en frente de ella mientras me arreglaba un poco el cabello.

-buenos días, Kathy- dije con una sonrisa mientras que ella me dejaba entrar y empezábamos a caminar hacia la sala de estar.

-buenas tardes, Zayn- dijo de una manera divertida mientras me sonreía.

Yo solté una risa y asentí mientras me sentaba en el sofá. Jill y yo nos habíamos quedado hasta las 4 am en mi casa mientras hacíamos bocadillos de "media noche" y escuchábamos música desde el estéreo que estaba en mi habitación. De verdad no nos habíamos dado cuenta hasta que mi alarma sonó, la cual por cierto se me había olvidado apagar, y más o menos a las 5 am cuando los bocadillos y la música se acabaron fue cuando la devolví a su casa. Y no fue hasta las 6 am que nos dormirnos, porque nos quedamos más o menos una hora más hablando por WhatsApp y también FaceTime.

Me había despertado hace unas pocas horas al igual que Jill, pero por suerte Niall también, ya que había llegado medio tarde de un fiesta o algo así, y la BBQ iba a empezar un poco más tarde de lo pensando. Eran las 3 pm ahora.

-es cierto Kathy- dije sonriendo- buenas tardes.

-¿quieres agua, limonada, te... Café?- preguntó con una sonrisa mientras arreglaba unas cuantas cosas en la mesa, habían varias personas arreglando la casa a las cuales salude con una sonrisa porque todavía no sabía cómo se llamaban.

-un poco de agua, por favor- dije amablemente.

-en un segundo.

Kathy se retiró con una sonrisa y yo empecé a mover mis dedos encima del casco de motocicleta que se me había olvidado dejar en el compartimiento de esta. Estaba un poco ansioso y por lo general cuando lo estaba prefería encender un cigarrillo mientras salía a dar una vuelta por ahí. Pero esta vez preferí no hacerlo, incluso había dejado la caja en la mesa de mi habitación. Quería ver a Jill más que nada.

-aquí tienes- dijo Kathy sacándome de mis pensamientos mientras yo tomaba el vaso.

-gracias, Kathy.

-de nada, Zayn- dijo con una sonrisa.

Kathy me recordaba a una madre... O mejor algo así como a una abuela o una tía muy cercana. Como sea me parecía adorable, y la forma de proteger a Jill me hacían querer agradecerle por miles y miles de años.

-¿hoy regresaran tarde?- preguntó con una sonrisa mientras se arreglaba un poco el vestido.

-uhm, no creo- yo solté una risa- pero tampoco creo que lleguemos a la misma hora que ayer.

-eso espero... Aunque si se están divirtiendo, tienen mi permiso.

Yo solté una risa y mire como Kathy salía de la sala de estar y ahora me quedaba completamente solo. Me termine todo el vaso de agua en unos segundos y eso calmo un poco mi ansiedad, pero de todas formas seguía ahí.

-¡Zayn!

Jill.

Me levante de inmediato y sonreí mientras mordía un poco mi labio inferior al verla, ella también lo estaba haciendo.

Agh, mierda. Me volvía loco.

-¡amor!- dije acercándome a ella y deslizando mis manos por su cintura, ella me abrazó igual.

-¡Zayn!- dijo con una sonrisa mientras me desordenaba un poco el cabello y se acercaba a mi.

Yo deslice mis labios sobre los de ella y después la mordí de una manera suave, como siempre lo hacía y había imaginado antes de besarnos, sonreí y nos alejamos solo un poco cuando escuchamos a Kathy regresar.

18 // zjm (en edición)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora