La calle por la que tenía que entrar iba en bajada, por lo que desde arriba ya se podía ver el río y escuchar la música que algunos autos dejaban fuerte, al ser vacaciones pasaba a ser otro mundo, como si la noche no se fuera nunca y la gente que seguía trabajando no tuviera una vida entresemana tan estresante sólo por ser verano. Los jóvenes eran los que llenaban el lugar, ya que era ley antes o después de salir de bailar o ir a tomar algo ir al río con el grupo de amigos. De día las familias tomaban mates y pasaban la tarde, y de noche la pendejada* salía hasta por debajo de los autos y solían tomar alcohol, fumar hierba, escuchar música y tener sexo, por lo que era normal pasar por el medio de la calle y ver en los laterales los autos moviéndose.
Luca no se quedó en la entrada principal del río, avanzó por la calle entre medio de los autos uno más bueno que el otro y cada dos moviéndose por la usurpación sexual que tenían adentro. Eso me causaba gracia y me hacía recordar cuando era un poco más joven, que con mis amigos solíamos caminar por la vereda golpeando las ventanas para después salir corriendo.
—Estamos a dos pasos del río y no hay nada de viento, odio este calor de mierda.
—Yo amo el calor, prefiero mil veces el verano que el invierno, no me da ganas de hacer nada.
—Extraterrestre. —lo acusé y se rió entrando a una playita donde no había casi nadie y podía dejar el auto. —Nunca me dijiste qué hacías de tu vida antes de entrar al concurso, ¿terminaste el colegio no?
—Hace dos años terminé y entré a hacer el CBC*, fracasé el primer año y cómo surgió la idea de entrar al concurso, preferí dejarlo para más adelante porque sólo puedo hacerlo dos veces.
— ¿Y qué ibas a estudiar?
—Si te soy sincero nunca sentí tener vocación para nada más que el baile, no me veo el día de mañana de traje y sentado detrás de una oficina, pero seguro que con algo me iba a entusiasmar ahí adentro. ¿Y vos?
—Terminé arañando las paredes el año pasado, y se supone que tengo que entrar a la universidad ahora, pero por suerte quedamos en el concurso.
— ¿Y qué querés estudiar aparte de bailar? —preguntó apagando el motor del auto, sin bajarnos nos quedamos adentro con el aire encendido.
—Sueño con tener un estudio de baile, siempre fue mi sueño con Sofi poner un estudio para todo tipo de ritmos, desde clásico hasta urbano.
—Me imagino que cuando entraron al concurso, tuvieron en cuenta la fama que eso les va a dar.
—Todavía no tengo muy claro ese tema porque necesito vivirlo para saber manejarlo, sé que en Estados unidos fue furor.
—Sí y las estrellas de allá hoy son ídolos acá también, por lo que tenés que estar consciente de que se va a abrir una puerta muy grande.
— ¿Qué tan seguro es la fama que nos va a dar el programa acá?
— ¿Me estás jodiendo? —preguntó con gracia poniéndose de costado para mirarme. —Acá hacen chocar dos moscas y los consideran ídolos que le salvaron la vida, con la trayectoria que tiene Teen Dance está totalmente asegurado que somos los próximos ídolos adolescentes.
—Eso... no me gusta mucho. —hice una mueca al recordar el furor que causaron en Estados unidos los participantes, la gente lloraba, se desmayaba, se volvía loca por unos... bailarines. — ¿Y vos estás listo para eso?
—Sí, no soy muy consciente porque no lo viví como decís vos, pero me anoté sabiendo que esto podría pasar y estoy emocionado por conocer ese mundo. —dijo levantando la mano para correrme el pelo de la cara y llevar aquel mechón detrás de mi oreja. — ¿Te puedo hacer una pregunta nada que ver con esto?
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Teen Dance.
Dla nastolatkówPROHIBIDA SU COPIA Y/O ADAPTACIÓN. OBRA REGISTRADA. El concurso de baile más famoso de adolescentes, llegó a Argentina después de triunfar en Estados Unidos sacando a las estrellas más codiciadas de aquel reality. Con propósito de no sólo sacar a co...