✔Capítulo 9: Soltera y despreocupada.
Char.
—Entonces, en resumen, estabas pasando un grandioso momento con Matt —dijo Dani en un tono algo molesto—, y esa chica te lo arruinó, ¿cierto?
Le había contado la historia sin omitir detalles, pero tuve que cambiar algunas cosas para no levantar sospechas. No podía decirle “¡Hey, Dani, Matt me llevó con un libro mágico a Inglaterra y visité un museo de chocolate!” como si fuese una conversación normal de todos los días. En realidad le dije que Matt y una amiga me habían invitado a un centro de relajación donde la especialidad eran baños de chocolate. Sorprendentemente, conseguí que me creyese.
—No importa —aseguré, encogiéndome de hombros porque en realidad no me interesaba mucho. Matt y yo solo nos divertíamos, y a mí me gustaba verlo reírse y relajarse. Era un gran cambio considerando que siempre era algo aburrido y monótono.
—Seguro —acotó con sarcasmo—. ¿Me estás diciendo que no te molestó ni en lo mínimo la interrupción? ¿Ni siquiera un poco? Por lo que cuentas, estabas disfrutando ese abrazo.
—No importa —repetí, desviando la vista. Sí lo estaba disfrutando, y me sentí algo enojada cuando Roxanne nos interrumpió, pero ¿qué podía hacer?—. Está bien, ¿ya?
Dani me observó entrecerrando los ojos sin creerme, como buscando rastros de alguna mentira en mi voz o actitud. Entonces se escuchó el sonido de un globo reventarse, y ella se sobresaltó y lanzó un pequeño grito de susto. Volvió la cabeza hacia Gin, sentada a su lado, al tiempo que la niña ponía un mohín triste en su rostro. Vi a alguien muy familiar en la mesa detrás de mi amiga observando por sobre su hombro, pero apenas notó que yo lo miraba regresó apresuradamente la vista al frente, metiendo la cabeza en la carta de los precios como si esta pudiese esconderlo. Solo podía ver su cabello negro. Fruncí el ceño con sospecha.
—¡Gin! —exclamó Dani, enfadada. Los demás clientes en la cafetería poco parecían interesarse en una chica jugando con globos de colores, y seguían concentrados tomando café o hablando del trabajo—. No vuelvas a hacer eso.
—Lo siento —respondió Gin. Se arrodilló en el asiento para poder estirarse hacia la ventana y retirar de allí un globo amarillo que estaba adherido con cinta adhesiva. Comenzó a jugar con él a arrojarlo hacia arriba y golpearlo con la mano para evitar que se cayese.
Observé los globos decorando nuestra mesa y el batido especial frente a Gin. Cuando Dani me dijo que nos viésemos aquí porque tenía algo importante que decirme y me encontré también con Gin, no me detuve a pensar la razón de esta aparente celebración, principalmente porque Dani me hizo contarle toda la historia antes de que tuviese la oportunidad de hablar con su hermana menor.
—¿Qué estamos celebrando?
—Oh, no mucho. Solo que al fin conseguí vencer al estúpido de Alan —respondió Gin mientras jugaba con su globo amarillo—. Él siempre conseguía ser el mejor de mi clase y yo me quedaba en el segundo lugar por no más que uno o dos puntos. Era frustrante. Pero hoy... Hoy fue diferente.
Dejó un segundo el globo y me mostró con orgullo una calcomanía de una estrella dorada pegada en su suéter azul, como si fuese el mayor premio jamás obtenido por alguien. Era interesante saber que Dani y yo éramos muy malas en la escuela mientras que Gin se ganaba calcomanías y felicitaciones todo el tiempo. Una niña de siete años nos superaba.
—¡Hoy he vencido! —exclamó en una especie de grito triunfante de batalla, colocándose de pie en el asiento y levantando los brazos en señal de victoria—. ¡Tómala, Montgomery!
ESTÁS LEYENDO
Gracias a un libro
Genç KurguEl libro, según el diccionario, es un conjunto de hojas impresas que forman un volumen ordenado para la lectura. El libro, según Char y Matt, es alguna clase de portal mágico gracias al cual chocaron con la vida del otro, y con el cual acceden a otr...