-Está bien me dejas en casa pero por favor no llames, me parece perfecto lo que haces, dejando que una noche tan genial como la que estábamos pasando alguien la arruine con esa llamada, pues perfecto eso quieres eso tendrás – digo sin arrepentirme de cada palabra y veo que ha meditado Cesar sabe que cada palabra que dije es cierta.
Cesar queda callado y un silencio de dos minutos hace que yo termine suspirando por la ventana tratando de entender lo que ha pasado, de repente cae una fuerte lluvia y hace que baje un poco la velocidad el maldice una y otra ves, no le entiendo ahora le afecta que este lloviendo parece que quiere dejarme lo mas pronto en casa. Para cuando ya hemos llegado le pido las llaves y el no me mira me las da estirando su mano pero ni si quiera se a percatado de que estoy con lagrimas en mis ojos.
-Gracias – es todo lo que alcanzo a decir – y el de inmediato me ve a los ojos y ve mis lagrimas, pero ya es tarde le he cerrado la puerta del coche en su cara he asotado tan fuerte esa puerta que no sabría si la he dañado, camino sin mirar atrás.
-¡Emma! ¡Emma! regresa – escucho que grita y para entonces regreso mi mirada y veo su rostro de preocupación, pero no hago caso, abro el porton, ya dentro de casa me asomo por el ventanal, veo que Cesar se baja del coche dejando que la fuerte lluvia moje todo su cuerpo, pero de repente me vuelve a gritar.-Lo siento nena – me grita nuevamente.
No le pongo atencion y corro a mi dormitorio a quitarme el vestido que aun no terminaba de estrenar, doy una pequeña ducha caliente y me tumbo en la cama de mamá, de repente por mi mente se pasan pensamientos de si Cesar será así siempre, pero mejor ponga una película, así dejare de pensar tanto en él. Poco a poco mis ojos se cierran.
Para cuando el ruido de la tv me ha levantado, veo la hora y son las tres de las mañana, Cesar no ha llamado a casa no sé nada de él, me preocupa pero recuerdo que prefirió irse con alguien más, ahora mismo un móvil no me caería mal, debo buscar un trabajo de tiempo medio.
-Emma – escucho que alguien me llama de lejos, me pongo un abrigo y salgo.
-Cesar, que te ha pasado- corro abrile la puerta mientras aseguro que su coche quede cerrado lo hago entrar esta todo pasado de alcohol, lo llevo hasta mi cama.
-Nena, soy un tonto como te he dejado sola- empieza a decir pero de inmediato le digo que no hable que después me explicara que paso-ven dúchate y te are un café – le digo.
-Lo siento, lo siento – me lo repite como si hubiera hecho algo malo.
-No te preocupes estoy bien y tú ya estás aquí conmigo.Para cuando me dirijo a la cocina a preparar el café el ya esta en el baño le espero en mi cama con el café en mano, sale de la ducha lleva puesto su bóxer, pero de inmediato bajo la mirada y le doy el café.
-Tómalo, te ara bien – digo con mi enojo, se lo ha tomado todo, la ducha y el café han quitado un poco la borrachera que llevaba, Cesar.
-¿Quieres dejarme quedar aquí junto a ti nena?
-Ya estas aquí puedes dormir en mi cama - le aseguro cruzando mis brazos.
-No tu te vienes aquí a mi lado – y me tumba a la cama.Cuando me he dado cuenta ya son las tres y cuarenta de la madrugada. Me quedado tumbada en la cama Cesar, empieza quitándome el pijama que llevaba puesta, besa cada parte externa de mi cuerpo se estaciona en mi pies besandome con una delicadeza y pasión, sus labios suben por mis piernas beso a beso me eriza la piel, cuando ha llegado a mi parte intima, arranca mi interior ¡que hombre para dañar toda mi ropa! le hago saber que esta vez será ya dos piezas de que me va dañando y él sonríe.
Llega hasta mi boca y el interior que esta todo roto de la fuerza que ha hecho por arrancármelo queda en el suelo, baja y sin decirle nada dejo que haga de mí una sumisa más de este mundo al momento sexual, siento su lengua suave y áspera que recorre todo mi parte intima de arriba, abajo ahora mismo tengo una sensación mas fuerte al sentir su legua en vez de sus dedos, ¿que esta pasandome? Cesar me pide que le toque su mienbro, esta tan duro y a la vez mojado, entre los dos salen barios gemidos, el me susurra que le diga que soy suya, no se porque le interesa tanto que le diga que soy de él, pero se lo digo mientras sigue besando mis labios vaginales, de repente siento que subciona una y otra vez para entonces una corriente inigualable llega a mi y estreseme todo mi cuerpo, sin pensarlo he gritado.-Cesar, soy tuya – y un fuerte alivio recorre mi cuerpo como si el estrés de años llevado dentro de mi saliera con ese gemido y esa corriente tan extraña que salio de mi.
- ¿Emma nena, has terminado? – pregunta Cesar, sonriendo y muy satisfecho de lo que ha hecho.
- He sentido una corriente dentro de mi con ganas de gritar – le digo
- Nena has gritado mi nombre no solo as tenido ganas de gritar lo has hecho, ese fue un orgasmo ¿me vas a decir que nunca tuviste uno? – pregunta.
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El me atrapó
RomanceSu Nombre es Emma una loca apasionada por el romance, las experiencias de la vida le enseñaron a Emma el dolor que causa Amar, pero así como hay dolor hay satisfacción; César el encargado de mostrarle las estrellas en la intimidad hizo que la tímida...