Mi corazon en mil pedazos

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Mi corazón roto en mil pedazos, todo este tiempo fui engañada, mis lágrimas caen sin parar. Giró mi cabeza recordando que estoy con personas a las cuales acabo de conocer, no se porque pero he decidido quedarme, me ofrecen otro vaso, esta vez no me lo pienso, cada vaso qué pasa por mi estomago congela mis sentimientos. El grupo de tatuados proponen salir de este lugar accedo y montó una de sus motonetas, para suerte mía uno de los lugares que an escogido esta a pasos de la casa de César ¡que más da!

A estas alturas no siento mucho el dolor en el pecho es como si estuviese sedada.

Mamá debe estar preocupada ¡si me ve así! no, no, no.
Les hago saber a los chicos que es hora de irme todos están de acuerdo proponen llamar un taxi, pasan minutos para cuando ya están pitando. Me despido de todos y no puedo quejarme nadie se a propasado conmigo se an portado de maravilla o será ¿el alcohol que me hace ver todo lindo?

Al llegar a casa, mis lágrimas y la lluvia caen juntas sobre mi rostro, mamá asustada me hace ingresar y después del sermón me abraza sus lagrimas empiezan a caer ¡Dios! Esto no quiero mi mamá está sufriendo por verme así y no puedo llorar más por César
Le abrazo más fuerte y sonrió haciéndole saber que todo estará bien.

-El teléfono no a parado de sonar Emma, ya sabes quién llama siempre César -dice mamá
-Cada vez que llame niégame mamá ¡te lo pido ma!
-Así será mi pequeña...

Al paso de las horas ingreso a darme una ducha, recuerdo sobre el trabajo que me propuso el papá de Hugo hace días atrás, pero en estos momentos Hugo no querrá verme.
Ya con pijama en mano corro a comer algo ayudo a mamá en casa, ya para la noche estoy en mi habitación escuchando música y empieza a sonar el teléfono una y otra vez...

Porque me enamorado tan ciegamente de alguien que solo se a burlado de mis sentimientos ¿acaso le hice daño? O tal vez se lo hicieron a él y lo tuve que pagar yo.

Sábado por la mañana mis ojos no quieren abrir solo quiero oscuridad en mi habitación pero el sol insiste en ingresar por el ventanal.

Con mamá decidimos pasar donde la abuela así que decidimos quedarnos hasta el domingo. Al transcurrir los días llega el domingo por la noche al regresar a casa, un sobre está en el portal, al bajar del taxi cojo el sobre donde pone
Para; Emma la mujer de mis ojos
Le miro a mamá y ella me hace señas con sus ojos de que la lea, corremos de inmediato a la sala nos tumbamos, pero antes mamá se levanta y prepara café entonces con cada sorbo de café voy leyéndolo a mamá la carta de tres hojas le a sacado lagrimas por tan profundas palabras.

Al día siguiente lunes por la mañana con mochila lista, llega mi recorrido me despido de mamá. Me encanta el olor de la mañana es tan limpio y fresco al subir al carro bajo el cristal dejando que el viento menee mi cabello...
ya en la aula mis ojos sin pensarlo ya están en dirección de César está recortando papel fomix, de seguro debe estar esperando que le de las gracias o diga algo por su carta de ayer, pero no diré nada, voy hacia la banca de Nata.. para poder observar más de cerca que es lo que lo mantiene tan ocupado que no a alzado su cabeza. Ahora está con regla en mano y dibujando letras del tamaño de su mano para ser exacta, me quedo viéndole por segundos y sus ojos castaños ya están intimidándome, pero no puedo bajar la guardia ¡él! se beso en mi cara con otra mujer y eso no se quedará así. Saco mi dedo de en medio sin pensarlo, César sonríe como si bromeara. Minutos después ya estoy en mi banca esperando el receso muero de hambre y no quiero verle o tan si quiera sentirle cerca.

El me atrapó Donde viven las historias. Descúbrelo ahora