Capítulo 45

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Vi como Hope entraba al salón dispuesta a que Peter la invitara a su casa, pasaron cinco minutos, nada, diez minutos, ya me estaba empezando a asustar, cuando a los quince minutos me iba a asomar salía ella con una sonrisa en el rostro, y para mi mayor sorpresa una llaves.

Ella se me acerco con una cara de victoria, la cosa es que nos íbamos a escapar a la casa de Peter el violador, y entraríamos por la ventana, pero como teníamos llaves iba a ser mil veces más fácil, yo no recordaba la dirección por eso fue que Hope se ofreció a seducirlo, nada mejor que eso.

—Me dijo que subiera a su cuarto mientras él llegaba –me sonrió

—Dios mío eres lo mejor –la abrace

Salimos corriendo sin que nadie nos viera al auto que nos esperaba afuera, estaban Christian y Elijah sentados uno al lado del otro, cuando vieron las llaves sonrieron, por supuesto quien no, todo el plan se volvió más fácil, solo esperemos que no haya nadie en esa casa.

Muchas personas decían que Peter el violador, grababa cada acto que hacía, según lo dijo una vez que se emborracho en alguna fiesta del año pasado pero nadie entendía el punto de lo que hablaba, para nuestra suerte, nosotros sí, la policía había revisado una sola vez su casa y no habían encontrado nada.

La noche anterior me asegure de ver todos los capítulos de Criminal Minds donde muestran escondites, lugares donde probablemente estén las cosas, la casa era lo que me esperaba, una mansión tan inmensa como la mía, no se encontraba ningún auto afuera y mucho menos en el garaje, por lo tantos suspiramos felices.

El plan principal se basaba en solo entrar Hope, Elijah y yo, y aunque Christian lo haya odiado fuimos mayoría, así que no tuvo de otra, entramos con cuidado, Hope nos dijo que su habitación era la tercera puerta a la derecha en el piso de arriba, así que por seguro Elijah se quedaba abajo buscando y nosotras subimos.

Su cuarto se veía normal, como si no pudiera romper ni una ventaja, maldito bastardo, Hope se quedó en la habitación de Peter, mientras yo buscaba en todas las demás, entre al cuarto de supongo su padre y empecé tocando todas las paredes, el armario, el baño, la cama, los cuadros, las gavetas, incluso la televisión, hice los mismo con las otras dos, y nada, Hope estaba revisando a profundización el cuarto de la rata asquerosa.

La última puerta de la parte de arriba era un cuarto de aseo, había escobas, coletos, paños, cubetas, todo lo que se necesitara, pero el punto es que en este tipo de casas estos cuartos están abajo, lejos del contacto con los propietarios, no en la puerta principal de la casa donde cualquiera pudiera abrir.

Estaba segura que estaba aquí algo me lo decía, Hope llego a mi espalda, y quedo tan sorprendida como yo, le tomo cinco segundos entender mi teoría, empezamos a tocar todos los objetos, pero nada, no había absolutamente nada, tanto para no conseguir nada, a lo mejor solo fue una estupidez lo que nos dijeron.

Con desespero subí mi cabeza para tratar de mantener la cabeza fría antes de destruir esta casa, y para mi sorpresa había una rejilla de aire, ninguno de los cuartos tienen aire integral ¿y este sí?, por supuesto que no, le señale el lugar a Hope y su cara se ilumino como si hubiera visto oro.

La cosa era, ¿Cómo llegábamos hasta ahí?, decidimos que yo me montaría en los hombros de Hope y subiría, empujaba la rejilla y nada, una segunda vez y ya se empieza a mover, a la tercera fue la vencida, por un momento pensé conseguirme los vídeos a un lado pero no, un pasadizo llamo mi atención, termine de subir todo mi cuerpo y fue arrastrándome hasta ahí.

Era un cuarto, un cuarto secreto, saque mi teléfono y le mande un mensaje a Christian, Elijah y Hope, "los encontré", no había solo uno, o tal vez cinco, había mínimo cincuenta, todos tenían un cabello, habían rubias, morenas, incluso de colores, la piel se me puso de gallina, decidí agárralos todos pero la única manera era quitándomela camisa y hacer como si hubiera una bolsa, vacié todas las repisas y metí los discos en mi bolsa recién hecha.

—Ya viene –grito Hope, se suponía que él le mandaría un mensaje cuando estuviera llegando

Me apresure a bajar, y Hope se sorprendió al verme sin camisa, pero cuando vio por qué se paralizo, le asentí haciendo referencia que todos estos eran vídeos, lance mi camisa que ahora era una bolsa y ella la atrapo, ahora me tocaba lanzarme a mí, no era tan alto pero el miedo y la adrenalina me estaban consumiendo.

Salimos corriendo piso abajo, Elijah me veía con los ojos abiertos, yo no entendí, luego me vi, me tape con las manos, el suspiro y se quitó la camisa, yo sonreí, no sabía que era tan caballero, me la puse sin pensar, estábamos a punto de salir cuando la puerta empezó a sonar, salimos disparados a escondernos en una puerta que estaba al lado de las escaleras.

Los pasos resonaban por toda la casa, nuestra respiración se escucha acelerada, algo vibro cerca de mí, Hope estaba tomando su teléfono, tenía un mensaje del bastardo.

—Ya llegue, ¿Dónde estás? 14:59

Ella me veía sin saber qué hacer, le arrebate el teléfono y conteste

—Estoy en el baño de tu cuarto, sube 13:02

Junto a nosotros se escucharon los pasos apresurados esta vez, y una puerta siendo cerrada con fuerza, nos apresuramos a correr hasta la puerta principal, Elijah cerró la puerta con cuidado y salimos corriendo hasta la camioneta de Christian que ya había estacionado en frente de la inmensa casa.

Había olvidado lo que era respirar hasta que me monte en el auto y pude sentir como poco a poco la adrenalina bajaba, Hope en el camino saco su laptop lista para reproducir los videos, elegimos uno al azar, sabía que sería perturbador, Christian decía que no los viéramos todavía.

La curiosidad mato al gato.

Una rubia estaba tirada en la cama que hace pocos minutos Hope reviso, estaba desnuda, luego se veía como una sombra se acerba a ella, mi corazón latía a mil por minuto, esta vez la sombra la empezó a tocar, la lamia, la acariciaba, jalaba su cabello, cuando se acercó más me asuste, era como si creyera que era yo la chica, se bajó los pantalones, luego el bóxer, no pude ver más, Hope cerro con fuerza la pantalla, ambas nos mirábamos, sin saber que decir.

—Lo tenemos –fue lo único que pude decir

Fuimos directo a la policía, el jefe era amigo de Christian, no tardaron nada en atendernos, los cuatro estábamos sentados en la oficina del capitán Johnson, su cara expresaba asco, veía el mismo video que nosotras, tras él estaba Christian con el ceño fruncido, y Elijah tan asqueado como el capitán.

—¿Cómo encontraron esto? Una de nuestras unidades busco por toda la casa y no había nada –pregunto luego de terminar el video

—Él le dio las llaves a Hope para que fuera a su casa, pero nos escapamos de la escuela para poder tener tiempo, estaban todos en un cuarto de aseo en el segundo piso –explique

—Pero ¿Cómo sabían que estaba allí? Es solo un cuarto de aseo –pregunto de nuevo con más intriga

—La cosa es que ningún rico quiere tener un cuarto de aseo cerca de sus cuartos personales, eso era lo más sospechoso para nosotras, luego vimos la rejilla, ninguno de los cuartos tenia aire integral, subí y era más bien un cuarto, y estaban todos estos vídeos, tuve que quitarme la camisa para poder tomarlos todos –asentía el capitán

—Eso explica porque este no tiene camisa –veía a Elijah

El capitán Johnson llamo por audio a todas las patrullas de la zona para que fueran a esa dirección, junto a ellos fuimos nosotros también, no me perdería por nada del mundo ver a ese bastardo violador esposado y dentro de una patrulla policial, yo sería la primera en declarar el día del juicio de eso no tenía dudas.

Cuando llegamos ya lo estaban esposando, él se veía sorprendido, también había un hombre mayor muy parecido a él hablando con los oficiales, Peter gritaba que no hizo nada, todavía no nos había visto, me acerque a él con Christian detrás de mí, sentía sus firmes pisadas únicas de él.

—No tienen nada de mi –Peter me dijo esta vez a mi

—¿Qué hay del cuarto de aseo con una rejilla que llevaba a un cuarto secreto? –su cara no tenía color –sin mencionar los vídeos que encontré en las repisas –esta vez me acerque más a él aunque Christian lo trataba de evitar –te lo juro por mi vida que más nunca conocerás lo que vida significa, te vas a pudrir en la cárcel y créeme que disfrutare cuando sepa que te violaron todos los presos

¿Soy un monstruo por querer la destrucción de alguien que solo es capaz de destruir?, No.

Ciega de amorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora