No Es Como En Las Peliculas (Stony)

Cap. 39

Jake.

–¿Que ustedes dos qué? –Hablaba yo sorprendido. Sí, Will y yo habíamos hablado que ellos posiblemente eran pareja, pero recibir la noticia tan de golpe era como un balde de agua tibia, no era fría porque de alguna manera indirectamente me lo esperaba. Eran nuestros amigos y estaríamos con ellos siempre sin importar que.

–Eso. –Decía Steve mientras hacía movimientos con las manos y le lanzaba unas leves miraditas a Tony. El menor sólo miraba hacia cualquier otro lugar que no fueran nuestras caras.

–Bueno. –Miré a Will, tenía una cara sorprendidamente feliz, continúe –Saben que estaremos con ustedes siempre, y nos alegra que por fin se declararán el uno al otro.

–Gracias chicos. –Dijeron los dos, Tony un poco tartamudo pero al fin mirándonos.

–Pero espera. –Comenzó a hablar Steve después del suspiro de alivio que había dado. –¿Cómo que "al fin se declararon"? –Tony nos miró esperando una respuesta también.

–Oh, bueno, verán. –Explicaba Will riendo. –Digamos que de alguna forma, una forma muy rara, nosotros ya sospechábamos algo de ustedes dos.

–¿Cómo? –Steve decía sentándose en el sofá vacío con los brazos cruzados.

–No sé, ¿instinto gay tal vez? –Respondí riendo por lo dicho. –Además, digamos que si se besan en un hospital de día mientras hay personas esperando, no sé, quizás puedan verlos o algo así. –Respondí tratando de contener una risa lanzándole una mirada a Will.

–¿N-Nos vieron? –Exaltó Tony trabándose al empezar la frase.

–Mejor hay que dejar esta plática hasta aquí, ¿Qué les parece? –Sugirió Steve y al escuchar un "Okay" de todos se relajó.

–¿Y qué quieren hacer entonces? –Preguntaba Will.

–Tiene que ser algo que Tony pueda hacer también. –Habló Steve, el anterior mencionado sonrió.

–Podemos, ¿Ir al cine? –Sugerí.

–Hmmm, me parece buena idea, nunca hemos salido entre los cuatro. –Asintió Will.

–Sí, ¿Por qué no? –Dijo Steve. –¿Puedes Tony?

–Sí, obvio, lo que sea por salir de este lugar un momento. –Rió.

–Okay, vamos.

Steve.

Nos encontrábamos ya en la plaza, después de haber bajado a Tony del auto, lo había tenido que cargar para que los otros dos bajaran la silla de ruedas, lo cual fue un momento de no mucho de su agrado para él, aunque admitiéndolo había sido bastante gracioso.

Entramos, Will y Jake iban tomados de la mano al lado nuestro, yo iba detrás de la silla de ruedas, manejandola, aunque Tony me había dicho que era automática pero yo sentía que era mi deber hacerlo.

–¿Y bien? –Habló Will al entrar al cine, mirándonos.

–¿Qué película veremos? –Preguntó Tony.

–¿Qué tal una de terror? –Sugirió Jake.

–No. –Habló Will de inmediato y yo me puse del lado de él, votando para que no.

–Aburridos. –Hablaron los dos azabaches al mismo tiempo.

–¿Qué les parece una de acción? -sugirió Will, y al escuchar un "sí" de todos, comenzamos a repartirnos turnos.

–Bien, yo iré con Jake a pedir los boletos. –Me paré a su lado después de decirlo –Ustedes dos compren las palomitas y refrescos. -Señalé a Will y a Tony.

Nos acercamos a la caja y hablamos.

–Buenas tardes, Sr. ¿Qué desea? –Nos gustaría cuatro entradas para la película de las 3:20. –Le dije a la señorita. Faltaban 10 minutos para que empezara. Ella comenzó a teclear en la computadora y segundos después nos dio los boletos.

–Que disfruten su película. –Despidió, pero segundos después habló Jake.

–Una pregunta, tenemos un compañero en silla de ruedas. –Cierto casi lo olvidaba. –No hay ningún problema en eso, ¿Verdad? –Preguntó Jake.

–No, señores, tranquilos, su compañero al igual que ustedes puede disfrutar de la película y de las experiencias que les brinda este cine.

–Muchas gracias. –Agradecí. –Bien, parece que ya está todo listo. –Le dije a Jake.

–Sí, ahora vamos a ver si esos chicos no compraron toda la comida del cine. –Decía Jake felizmente, solté una carcajada baja. –Con Tony con dinero y Will fascinado con los dulces y chucherías, posiblemente podrían hacerlo fácilmente. –Rió él.

Cuando llegamos con ellos, les acababan de entregar lo último que les faltaba, Tony llevaba una caja de palomitas grandes con una soda del mismo tamaño. Will llevaba lo mismo y en la mano donde tenía la soda llevaba una bolsa de caramelos, se le veía feliz.

Jake tomó la soda ayudando a Will y yo tomé las palomitas ayudando a Tony.

Ya en la sala nos percatamos que no había nadie aún. Will y Jake subieron primero hasta sus butacas, habíamos elegido unas un poco más arriba del medio, bajó Jake y tomó nuestras cosas para subirlas también y después Will para doblar y subir la silla de ruedas. Cargué a Tony estilo princesa lo cual a pesar de la poca luz se le veía que estaba sonrojado. Lo senté en la silla al lado de donde se supone que iría yo y después de tiempo los cuatro ya estábamos listos y sentados esperando la película.

Will.

Ya habían pasado varios minutos después de sentarnos, mire mi reloj de mano y me di cuenta que eran las 3:30.

–Chicos, ¿Están seguros que es aquí? –Pregunté. La sala estaba aún vacía y la pantalla aún no estaba encendida, la única luz que teníamos provenía de unas lámparas a los lados de la pared con la luz a su más baja tonalidad.

–Sí, esta es la sala 4. –Habló Tony. Jake y Steve se inclinaron hacia el frente un poco y miraron a Tony en silencio. –¿Qué pasa? –Preguntó Tony serenamente.

–Tony. -Comenzó a hablar Jake y después hizo una leve pausa. –Teníamos que ir a la sala 7.

Todos nos miramos entre todos, y de un brinco nos paramos todos, menos Tony. Tomamos rápido las cosas de todos, Steve cargo a Tony y Jake se llevó la silla de ruedas, al bajar decidimos no perder más el tiempo e ir cargando a Tony a la otra sala. Salimos de la sala y buscamos rápidamente entre miradas la sala 7, el pasillo de alfombra rojiza obscura lleno con algunas palomitas tiradas. estaba completamente solo.

–¡Allá está! –Señaló Jake hacia la dicha sala. Todos corrimos y empujamos la puerta para entrar, Jake se quedó sosteniéndola para que Steve pasará cargando a Tony. Sólo estaba a la mitad de llena la sala, al menos no sabían el porque habíamos llegado tarde.

Subimos los pocos escalones que había y sentía que los de los lugares de arriba sólo nos miraban, me imaginaba cómo se sentía Tony al ser cargado por Steve y que medio cine lo viera, fue algo incomodo pero llegamos a nuestros lugares; Jake también subió la silla de ruedas, la dobló y la dejó en el suelo al lado de él ya que no había nadie.

Nos habíamos sentado en el orden de Tony en la orilla, Steve, Yo y Jake, el resto de la fila estaba casi vacío y por suerte la película no había iniciado aún porque seguían los cortos de otras películas y comerciales.

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Menuda ida al cine más fail xD
No crean que eso me ha pasado :'v

Bueno, en fin, espero les haya gustado y divertido este capítulo, no olviden dejar su sensual voto y su comentario.

Nos leemos después, los amo ♥