Dark Light: La Isla Sorte (T3)

Capitulo 130 - Bienvenidos a la Isla Sorte

Abrir los ojos a un mundo nuevo donde todo sea posible.

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Pvo Melannie

El tiempo se agota, todo está a punto de acabar, solo quedan 3 personas con vida y ni siquiera han conseguido llegar al sector 3, muerdo mis uñas con desespero, Mara se mantiene a mi lado, sujeta mi mano con cuidado, Robert esta recostado en mis piernas, lo han golpeado tanto que ha quedado desmayado, acaricio su rostro con cuidado, no quiero que muera, no quiero que nadie muera, su rostro tiene mucha sangre, uno de sus ojos esta hinchado.

Uno de esos imbéciles lo ha golpeado hasta el cansancio, Robert habia golpeado a uno de ellos por escupir a Jennette.

-Ya seguimos nosotros – Jennette está frente a mí, abraza sus piernas con sus brazos, es tan blanca que lo moretones se notan por toda su piel, casi están de color negro.

-Aún quedan tres con vida – murmuro, coloco mi mano sobre el hombro de Robert y recargo mi espalda en la fría reja.

-Nos falta poco para morir – suelta una risa irónica – al menos sé que no moriré sola – me sonríe y yo le regreso la sonrisa.

No tenemos que resignar, nuestra muerte era segura.

-Pensar que regresaría a este horrible lugar de nuevo – Mara suelta un suspiro – habia huido con la esperanza de jamas regresar, pero veo que el destino ya me tenía deparado esto.

-¿Cómo comenzó? ¿Porque todos pensaron en este Isla para sobrevivir? – Jennette cruzaba sus dedos con nerviosismo

-Yo jamas escuche de este Isla - murmuro

-Yo vivía con mi esposo y mis dos hijos, Murray y Chace en Australia, la infección llego a la semana a ese lugar ya que es una Isla demasiado alejada de todos, los turistas y los demas pensaron que Australia sería un lugar seguro por estar alejado, pero resulto peor, un comunicado se comenzó a escuchar por la radio, hablaba de una Isla llamada Sorte cerca de Francia, intentamos escapar pero esas cosas eran demasiadas, atraparon a uno de mis hijos , el más pequeño de solo 11 años – la veo soltar un suspiro – tomamos un barco en dirección a la Isla Sorte, todo habia resultado bien, no habia ninguna persona infectada, llegamos a la Isla Sorte a los dias, habia muchas entradas de barcos por todas partes, la isla no es tan grande pero aun asi trataban de mantenerlos a todos con vida, el día que llegamos fue el último que aceptaron sobrevivientes, la isla tenia sobrecupo, no se podía mantener a más personas dentro, el lugar tenia los 5 sectores, yo y mi familia nos encontrábamos en el sector 3, junto con 1000 familias más, no sé de donde sacaron tantas casas de campaña para todo, pero nos mantenían con vida, el lugar estaba lleno de militares, muchos hombres armados, habia un camino, atravesaba por la mitad de la isla, por ese lugar solo ingresaban las personas importantes del mundo, los que tenían dinero, senadores, gobernadores, presidentes, me entere que el gobernador de Australia se encontraba aquí, junto con el presidente de Holanda, algunos canciller de Rusia, también el presidente de México, de Croacia, Ecuador, Republica dominicana, Polonia, Alemania y Filipinas, a todos ellos los mantenían en este lugar en el sector 5 , rodeados con demasiados militares, la primera semana fue un caos, tratando de evitar que los barcos ingresaran, la segunda semana fue tranquilidad, pero en la tercer semana las cosas se complicaron, un barco se impactó contra el muelle, muchos infectados salieron de ese lugar, atacando a los demas, la Isla se volvió un caos en menos de 2 horas, los helicópteros comenzaron a partir junto con los presidentes y gobernadores, no se preocuparon por nosotros, los disparos se escuchaban por todos lados, a mi esposo lo atraparon esas cosas, corrimos en dirección de los barcos, pero solo ingresaban las personas millonarias o importantes, a los demas nos dejaran sin protección – la veo sonreír irónicamente – Un militar se apiado de nosotros, nos dio la oportunidad de ingresar al barco, al menos unas 20 personas más, veía a muchas personas tratando de ingresar, todos estaban desesperados, pero los militares comenzaron a disparar – un nudo se forma en mi garganta – disparaban a quema ropa, sin importar si habia niños, sin impórtales la vida de nadie, dejando morir a esas personas inocentes, yo no podía hacer nada, no podía bajar del barco, tenía que proteger a mi hijo, el barco partió, las personas comenzaban a correr al mar, tratando de evitar ser atrapados por esas cosas – su vista se dirige a Jennette – Esos hombres fueron cueles, tanto como los que nos tienen aquí atrapados – aprieto su mano con cuidado - Cuando partimos el lugar ya estaba tomado por esas cosas, los disparos se continuaban escuchando pero sabía que ya no habría alguna esperanza para esta Isla, muchos barcos salieron, pero no sé en qué dirección de dirigieron, al pasar los minutos los disparos cesaban , eso nos dio a entender que ya no se podía hacer nada, La Isla en la cual habíamos confiado se habia convertido en la perdición – Mara muerde sus labios