Dark Light: La Isla Sorte (T3)

Capitulo 119 - Jamas Olvido una cara bonita

Pvo Melannie

Mi mano siempre estaba sujeta de Jennette, me habia acostumbrado tanto a sujetarla a no separarnos nunca, que me parecía horrible esta sin ella, éramos amigas desde que habia llegado a vivir a Paris, ella era dos años mayor que yo, pero se encontraba en el mismo curso ya que habia perdido dos años de escuela.

Jennette habia estado conmigo por estos largos años, habia sufrido el mismo tipo de abuso que yo, ella era quien me habia hecho ser fuerte, era ella quien me decía que no llorara.

Estaba agradecida que las dos aun continuáramos con vida.

-Llegaremos a Pozzallo – la voz fuerte de Austin se escuchó – tomaremos el primer barco que encontremos, Ralph sabe conducir barco – todos escuchábamos a ese hombre con atención

-Creo que alguien se tomó el papel de líder muy enserio – Robert se habia colocado a mi lado, mostrando una sonrisa, cruzando sus brazos mientras observaba a su hermano hablar

-¿Entonces iremos a la Isla Durnia? – Robert giro a mí, mordiendo su pica dientes

-Creo que estaremos bien en ese lugar - su mano se colocó en mi hombro y despues se alejó de nosotras, tomando lugar justo al lado de su hermano.

-Es guapo – Jennette sonrió, tenía mucho que no la veía sonreír – te gana con 10 años pero continua siendo atractivo – me dio un leve golpecito con el codo, logrando hacer que sonriera.

Pero la verdad yo no tenía tiempo para enamorarme, ni siquiera sabía si podía hacerlo despues de lo que me habia sucedido.

Los autos pasaban sobre esa carretera a toda velocidad, últimamente esas cosas comenzaban a aparecer muy seguido y cuando se encontraba una horda grande era muy difícil salir.

El letrero de Pozzallo se mostró frente a nosotros, teníamos que rodear la cuidad ya que se decía que la mayor cantidad de esas cosas se concentraban en el centro de las ciudades.

Al menos habíamos tardado dos horas en rodear el lugar, el lugar estaba infestado de esas cosas y sobre todo los autos atravesados por el camino evitaban el pase.

El mar apareció frente a nuestros ojos, todas esas casas frente al mar, todos esos puestos de alimentos, todas esas lanchas encalladas a la orilla.

Eso podía ser nuestra salvación, tal vez alguno de esas lanchas o barcos podían ayudarnos.

Los autos quedaron a la orillas, todos bajaron portando sus armas en las manos, apuntando a todas direcciones, esperando que el lugar fuera seguro.

Austin apunto en dirección del barco mar grande que habían encontrado, era tan perfecto que parecía mentira, por fin podíamos salir de esto.

Por fin tendríamos esa esperanza que tanto anhelábamos.

No se escuchaba nada a nuestro alrededor, se veía tan solitario, como si ninguna persona hubiera tocado ese lugar en mucho tiempo, el sonido de las olas se escuchaba, las gaviotas paseaban por el cielo libremente, el frio se sentia un poco fuerte pero aun asi podíamos soportarlo.

Mi mano jamas soltó la de Jennette, mi vista estaba dirigida a ese gran barco frente a nosotros, todos caminamos despacio mientras los hombres que tenían armas se mantenían delante, tratando de cubrirnos

-¿Crees que podamos estar tranquilos por fin? – susurro Jennette en mi oído, yo solo afirme, observando lo que podía ser nuestra última esperanza para sobrevivir.

Todo parecía tan irreal, todo se veía tan maravilloso, queria esto... queria por fin tener esa tranquilidad que habia anhelado por tanto tiempo