3ra Temporada de La Saga Dark Light
En menos de 2 años había perdido todo lo que tenía, en 2 años habia perdido a casi toda mi familia.
Esas cosas habían acabado con todo y yo no iba a permitir que me arrebataran lo poco que tenía y...
Aquellas cosas se acumulaban más y más, pasando todos los sectores impulsados por los disparos y fuertes estallidos que habían escuchado, las cercas estaban derrumbadas, el acceso era aún más fácil, aquellos que habían muerto horas antes habían despertado convertidos en esas cosas, uniéndose al grupo que pasaba por su lado, impulsado por la misma cosa.
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El hambre.
Los gruñidos de todos se acumulaban, los inocentes que habían muerto a manos de Michael y sus hombres se habían unido a la gran horda que se aproximaba al final del sector, poco a poco todos despertaban, cientos de ellos aparecían por todos los lugares, todos dirigidos al mismo lugar.
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Las manos de Max continuaban en su rostro, sus lágrimas no dejaban de salir, el sentimiento era más fuerte que él, la peor noticia de todas habia llegado ese mismo día en que habia perdido a su propio hermano, ahora estaba solo... no habia nadie con él, no tenía a quien proteger, no tenía a quien vivir.
-Tenemos que largarnos – Xavier escuchaba tan cerca a esas cosas, lo peor de todo era que el camino aún se encontraba un poco alejado
-¡Max! – Sam se colocó cerca del el, intentando hacer entrar en razón, tenían que moverse rápido, tenían que salir de ese lugar lo más pronto posible o los atraparían – tenemos que marcharnos, tenemos que salir – el chico negó con su rostro – Max...
-Vayan ustedes – trago en seco al decir esas palabras, todo habia terminado para él, no quedaba nada en el mundo que lo hiciera desear salir adelante, ni siquiera la esperanza de encontrar a Molly o su hijo, ellos estaban muertos ... tan muertos como Siria y Caytlin, Tan muertos como Rick y Liam
Los labios de Sam temblaron, su cuerpo se estremeció al escuchar tal estupidez, habían llegado demasiado lejos y no tenía pensado detenerse, mucho menos dejar a su amigo atrás.
-¿Acaso crees que voy a dejar que te quedes? – Sam sujeto su mano, jalando con fuerzas a aquel hombre que aun permanecía en el suelo, tratando de hacer que se levantara, tratando de hacerlo reaccionar, pero él era muy alto y pesado, sería difícil levantarlo por el peso y estatura de Sam.
-No tengo nada por que vivir – sus labios continuaban temblando, todos se sentían desesperados, escuchando aquellos gruñidos tan cerca de ellos
-Claro que si – Sam continuaba sujetando su brazo con fuerzas, aun con sus fallidos intentos de levantarlos
-Tenemos que largarnos Sam, esas cosas están cerca – Freddie estaba alterado, estaba perdiendo la paciencia, su hijo estaba en sus brazos, Daryl formaba pucheros en sus labios, asustado por lo que sucedía.
