Capítulo 14

2.3K 217 16
                                    

*REVISADO*

Querido Diario:

Sabes que es lo hermoso de cuando empieza a gustarte alguien, bien, yo lo vivo día a día, bueno, en parte supongo que todo el mundo lo vivimos alguna vez, el chiste es que cuando lo vivimos siempre tenemos diferentes maneras de interpretarlo. En mi caso... bueno, en mi caso, las cosas no siempre son muy lindas y sé que Nash me quiere, pero no me refiero a eso.

Cuando tenía quince años, viví mi primera forma de "amor" (y digo amor entre comillas porque no creo realmente que haya sido amor, aunque mis amigos me gritaran y me dijeran lo contrario) gustaba lo suficiente como para querer ir a decirle y arriesgarme a ser rechazada o no. Fue una experiencia... no fea, pero tampoco hermosa, me quede insatisfecha porque mi intuición de que yo le gustaba estaba en lo incorrecto y pues solo estaba jugando conmigo para saber si a mí me gustaba o no. Juegos como tomarme de la mano haciendo que mi corazón se acelere, salir siempre conmigo, esperarme para irnos juntos a la casa porque la dirección de nuestras casas era similar, ser atento, etc.

Cuando pasó todo eso, no podría decir que me enojé con él, o que me destrozó, la verdad es que no quería absolutamente nada (si hubiera oportunidad) era muy mujeriego, le gustaba coleccionar besos de diferentes chicas y manosearlas si era posible. Y me hace pensar que fue lo mejor que me haya rechazado.

Bueno, estoy bien conmigo misma y supongo que si no me dolió del todo es porque en realidad no lo amaba como mis amigos me decían que pasaba. Y también supongo que son cosas que todos los humanos tienen que pasar, no siempre le vas a gustar al que te gusta y al que le gustas no siempre te va a llamar la atención.

Mi preocupación ahora, no es que le guste a Nash o no; me preocupa que es lo que va a pasar después y no sé qué hacer o cómo reaccionar al amor que me transmite. No puedo negar que no me gusta porque la verdad es que amo que lo haga porque es la única persona que hasta ahora lo hace y si no puedo disfrutar el amor que mi padre no me da, supongo que mi cuerpo y mi mente me pide que busque a otra persona.

Nash, si algún día lees esto, solo espero que me perdones y entiendas porque lo hice. La verdad es que jamás en mi vida, si fuera en otra vida, lo hubiera hecho.

CAPÍTULO 14:

Dante tiene la boca llena de chocolate cuando llego a casa, está sentado en el sillón con un cucharon repleto de chocolate en manos con la mirada pegada en la pantalla grande de la pared con "Titan Teen go!" Me encojo de hombros y frunzo el ceño cuando veo su playera blanca de la escuela con una mancha enorme en ella marcado con deditos de color café.

—¡Hola, Lizzy! —saluda el niño mientras deposito la mochila en el perchero. Afuera hace un calor de perros y no llevo nada puesto. Es curioso porque ya está a punto de llover—. ¡Adivina que! —sigue diciendo este con una voz muy entusiasta y baja del sillón de un salto—. Will y yo hicimos un pastel de chocolate y galletas.

En ese momento, Will sale de la cocina y comienza a caminar hacia mí y yo tengo que morderme el interior de mi mejilla para no comenzar a reírme de la ligera capa de harina que cubre su cabello y el extraño mandil alrededor de su cintura y los guantes en las manos. No quiero ver ni imaginarme como está la cocina en este momento.

—Hoy la comida va a ser deliciosa. Y para el postre será mucho mejor —asegura mi hermano mayor guiñándome un ojo e intercambiando miradas con Dante, éste le guiña el ojo de regreso.

Hago un puchero en ese preciso momento, no quisiera desperdiciar una velada encantadora con mis hermanos, pero tampoco puedo quedarme porque le prometí a Mare que iría a la fiesta solo para fastidiar a Amber. A Will se le borra la sonrisa del rostro cuando nota algo diferente en mí. Y Dante frunce el ceño cuando ve el de su hermano mayor.

Quédate Un Poco Más© (Completo)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora