I Shall Seal the Heavens

Capítulo 100: Espada contra Sin Defectos

Cuando Meng Hao envió fuera su Sentido Espiritual, empezó a tener el sentimiento de que estaba separado del cielo y la tierra. Estaba familiarizado con esta sensación; era el mismo tipo de sentimiento que había tenido cuando estuvo en el décimo nivel de Condensación Qi, o en el treceavo. Aunque ahora, el sentimiento era aún más fuerte, como si los Cielos no toleraran su Cultivo después de todo. Y aún, junto con la desaprobación, sintió la fuerza de un estado diferente. Parecía como si a pesar del hecho de que los Cielos no lo toleraran y de que este estado fuera rechazado por toda la creación... se defendiera, y debido a ello, fuera aún más poderoso.

Esta resistencia no venía de Meng Hao, sino del Pilar Dao y de la energía espiritual dentro de él!

Después de sentir la resistencia de los Cielos, Meng Hao determinó rápidamente su fuerza... ni un poco de la energía espiritual del cielo y la tierra que había absorbido en su cuerpo se filtraba por ningún lado. Aún más, no podía absorberla. Ningún ciclo podía crearse con el cielo y la tierra, no estaba permitido!

Al mismo tiempo, debido a que no se emitía energía espiritual desde él, era capaz de divisar algunas cosas extrañas, vestigios inmateriales. Si fuera capaz de lograr alcanzarlos, se volvería instantáneamente aún más poderoso.

Estos vestigios no estaban permitidos por los Cielos, por lo que sólo Cultivadores que eran rechazados podían verlos y ganar iluminación gracias a ellos.

Aunque Meng Hao no se daba cuenta de ello, en el mundo del Cultivo, estos vestigios eran denominados Tabúes Dao! Todo cultivador que alcanzara la etapa de Fundación Establecida podía sentirlos.

En el mismo momento en que Meng Hao empezó a sentir los Tabúes Dao, algo agitó su cuerpo. Un crujido sonó mientras aparecía una fisura en su Pilar Dao. Cuando pasó esto, Meng Hao tosió una bocanada de sangre mientras que era arrancado de este estado especial.

Vastas cantidades de energía espiritual salieron de la grieta del Pilar Dao. Meng Hao no tenía poder para parar lo que estaba sucediendo: su cuerpo estaba de nuevo conectado al cielo y la tierra.

Aunque la energía espiritual saliera de él, no se podía realmente comparar con la cantidad que había absorbido, estaba de regreso en un ciclo con el cielo y la tierra. Los extraños vestigios que había sido capaz de sentir ya no estaban más ahí. Ya no era rechazado por el cielo y la tierra por más tiempo, sino que había sido aceptado y era ahora parte de ellos.

Un sentimiento de debilidad apareció en su corazón. Meng Hao levantó su cabeza, su visión atravesó hacia el exterior de la Cueva Inmortal. Mientras miraba al cielo en el exterior, sus ojos brillaban con una intensidad sin precedentes.

Esto era una Fundación Sin Defectos con una grieta. En este aspecto, Meng Hao era mejor realmente que la mayoría. Con una Fundación Agrietada, sería mucho más débil, y con una Fundación Fracturada, habría aún muchas más grietas, y sería significativamente menos poderoso.

"Mientras que haya una grieta," murmuró Meng Hoa, "no es perfecta, y por tanto, los Cielos pueden aceptarlo..." Sus ojos brillaron intensamente.

"Debido a que los Pilares Dao tienen grietas, sin importar qué nivel alcance en mi Cultivo, siempre habrá absorción y difusión. Realizaré el cultivo de esta forma por mí mismo... o por los Cielos?" Meng Hao se quedó en silencio por un tiempo. La cuestión era realmente demasiado profunda para que un Cultivador en Fundación Establecida fuera capaz de considerarla.

Aún así, mientras que Meng Hao había estudiado el Manual de Condensación Qi de la Escritura Sublime de Espíritu, y debido a que sabía el método para conseguir una Fundación Perfecta, reflexionaba sobre cosas que normalmente solo alguien en la etapa de Separación de Espíritu podría comprender.