I Shall Seal the Heavens

Capítulo 160: Ninguna de las Nueve Familias se apellida Meng

El exterior era un enorme caldero cuadrado, mientras que dentro había un caldero celestial circular. Este caldero circular era verdaderamente un fenómeno celestial!

La mente de Meng Hao zumbó al ver esto. Habiendo experimentado el mundo del enorme caldero, sintió como si contuviera algo cósmico.

"Nueve figuras arrodilladas, nueve pináculos de los Cielos", murmuró el hombre vestido de gris, empezando a temblar. "Estas figuras arrodilladas no son gente, obviamente se refieren a la voluntad de los Cielos!"

"No, no. Como podía el caldero invertirse? No debería de ser así. Los cielos son circulares y la tierra es cuadrada. Esto es una verdad reconocida desde tiempos antiguos. Es una ley que se estableció hace decenas de miles de años, un principio del cielo y la tierra."

"El caldero debería de ser circular en el exterior y cuadrado por dentro. Esto sería lo correcto. En ese caso, sería como ellos dijeron, los Cielos en el exterior, encima, la tierra en el interior, abajo..." El cuerpo del hombre tembló aún más fuerte mientras continuaba murmurando para sí mismo. Parecía como si no pudiera comprender el mundo de este caldero, el cual era cuadrado en el exterior y circular en el interior.

Xu Youdao miró boquiabierto en caldero circular, sus ojos radiaban asombro. Era imposible de decir qué estaba pensando.

Los ojos de Xie Jie se entornaron. A pesar de su shock, inmediatamente sacó una hoja de jade, dentro de la cual estaba inscrito todo esto.

Han Bei parecía también estar aturdida. Miró a la fisura masiva en la espalda de la estatua, entonces apareció un brillo intenso en sus ojos, que era obviamente veneración por sus ancestros.

"Comprendo", dijo el hombre vestido de gris, con su voz temblando. "Los cielos son circulares y la tierra es cuadrada. Un caldero circular en el exterior representando los Cielos, el caldero cuadrado dentro simboliza la tierra. Esto debería de ser así, de acuerdo con la voluntad de los Cielos, pero esto... Esto encarna el mal! Esto representa la tierra cubriendo los cielos. Es lo mismo que enterrar los Cielos!!"

"De este modo, el caldero circular son los Cielos, el caldero cuadrado es la tierra. Este lugar.... Es una tumba!!" dijo con la voz agudizada debido al asombro. Lentamente dio tres pasos hacia atrás. Tosió una bocanada de sangre. Su rostro estaba pálido y sus ojos brillaban intensamente debido a la sorpresa. Sus manos se movían como si estuviera calculando algo mientras su voz empezaba a subir de tono.

"Estos nueve adoradores son definitivamente los pináculos de los cielos! Han sido representados en estas estatuas, lo cual representa, obviamente, a las Nueve Estrellas Míticas legendarias. Las Nueve Estrellas Míticas legendarias adorando el caldero. El fenómeno Celestial está aquí solidificado. Un caldero cuadrado de bronce, dentro del cual está enterrado el corazón de los Cielos!"

"Que atrevido! Que grandioso! Una tumba en la cual los Cielos están enterrados dentro de la tierra! A quién pertenecerá esta tumba? Deseando enfrentarse a la muerte para robar la buena fortuna de los Cielos! Esto es un ataúd y la Tierra Bendita que está por fuera es la tumba!"

"Pon todo junto, y este sitio no es una Tierra Bendita. Es una Tierra Maldita! Es una tumba que desafía a los Cielos!"

Sus palabras entraron en los oídos de los demás y se volvieron fríos. Las expresiones de Xie Jie y Xu Youdao cambiaron. Meng Hao tomó aire profundamente para tratar de tranquilizar sus nervios. Las palabras del hombre vestido de gris resonaban dentro de él, creando un sentimiento de familiaridad. Quizá este lugar... realmente fuera una tumba.

Recordó la visión que había experimentado fuera del caldero y la voz que había escuchado cuando el rayo golpeó.

"No quisiste permitirme sacar este caldero de este lugar. Entonces.... Yaceré aquí poro siempre, esperando el día en el que caigas."