Capítulo 187: El bueno del viejo Gordito

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"Meng Hao!" pensó Wang Tengfei, sus ojos brillaron instantáneamente con un misterioso brillo. Sintió un repentino dolor desde el dedo índice de su mano derecha. El dedo estaba negro y, por dentro, se podía ver un aura pulsante negra.

Ver a Meng Hao aquí no era algo que Wang Tengfei hubiera imaginado nunca que pudiera ocurrir. Habían pasado muchos años, pero le reconoció inmediatamente. Este era el condenado Cultivador del Estado de Zhao que le había arrebatado su legado y había arruinado todos sus meticulosos planes!

Tan pronto como vio a Meng Hao, la respiración de Wang Tengfei se acelero. Había asumido que Meng Hao había desaparecido junto con el Estado de Zhao. Cómo podría haber predicho que aparecería repentinamente allí? Además, estaba en un grupo que venía desde la Secta Espada Solitaria. Muchos pensamientos pasaron por su cabeza durante el espacio de unas cuantas respiraciones. Entonces recuperó su compostura y apartó su mirada.

"Ya que está aquí", pensó Wang Tengfei, "tendré que encontrar una oportunidad para sacrificarle con mi dedo venenoso". Su expresión estaba tranquila, lentamente empezó a exhibir el mismo desdén por Meng Hao que había tenido hacía años. Era como si él fuera a estar eternamente por encima de Meng Hao. Sin importar si estaban en el Estado de Zhao o en el Dominio Sur.. No le importaba nada de Meng Hao. Él era un miembro del Clan Wang. Era un Elegido. Era superior, en cuanto a Meng Hao, no importaba qué relación tuviera con la Secta Espada Solitaria. Para él, Meng Hao era mucho menos que un insecto.

El tenía una apariencia perfecta y un temperamento sin defectos. Estaba allí plantado, lentamente convirtiéndose en el centro de atención. Sonrió ligeramente, con una expresión indiferente. El desdén hacia Meng Hao, que existía en su corazón, lentamente se transformó en desprecio y arrogancia. Levantó su cabeza, dando la apariencia de que Meng Hao no era nada para él y que podía aplastarle a su capricho.

Al mismo tiempo, Wang Xifan frunció el ceño ligeramente. Miró a Meng Hao de nuevo, apareciendo una misteriosa expresión en sus ojos. Una sonrisa se estiró desde las comisuras de su boca. Era una sonrisa similar a la de Wang Tengfei, llena de arrogancia y desdén.

Ahora recordaba la escena de hace años. Recordaba a esa hormiga que él casi había aplastado en la cima de la Montaña Este de la Secta Confianza, únicamente siendo detenido por He Luohua.

"Interesante", dijo con una sonrisa. Sus palabras no resonaron, y solo pudieron ser escuchadas por Wang Tengfei. "Por tanto, nos encontramos otra vez con este chico insolente. Tengfei, ahora es tu oportunidad de concluir tus asuntos después de todos estos años. Mátale y prueba que todo lo que te dije es cierto. Eres un Elegido, él no es nada más que un insecto".

Wang Tengfei sonrió. "Hace tiempo que paré de pensar sobre las cosas que ocurrieron aquel año", dijo serenamente. "Sin embargo, realmente debería tomar su cabeza". Miró a Meng Hao una vez más, y sus ojos brillaron con confianza en su habilidad para matarle. Sería tan fácil como girar su mano. Apartó la mirada, ignorando a Meng Hao y mirando hacia la distancia. Parecía haberse quedado pensativo de nuevo, como si estuviera luchando con algún tema dentro de su corazón.

"No pienses demasiado las cosas", dijo Wang Xifan, con su voz baja. "Necesitas confiar en Chu Yuyan".

Wang Tengfei se quedó tranquilo por un rato, después gruñó, "si alguna vez encuentro quién fue, le destrozaré en mil piezas!!" Sus ojos estaban llenos de un odio desalmado y frío, así como de humillación. La intención asesina se agitaba desde él, mucho más intensa que cuando había visto a Meng Hao. Este hecho era algo que no podía ignorar, algo que no podía calmar.

La expresión de Meng Hao era la misma de siempre. Ver a Wang Tengfei aquí no era algo completamente inesperado. Sin embargo, naturalmente causó que diversas emociones afloraran dentro de él.

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