ANNA POV
- Y éste es el planning general del curso. Estudien mucho y pórtense bien. Recuerden que este viernes hay el baile de bienvenida. Pueden irse - finalizó el profesor Levinson. Todos los alumnos se levantaron de un salto y echaron a correr como si les diera miedo quedarse dos segundos más allí dentro y que no les dejaran salir nunca más. Me levanté de mi silla y Jake me cogió del brazo antes de que pudiera irme.
- Eh rubita, algunos del equipo y yo vamos a ir a tomar algo esta tarde, también vienen algunas chicas. Ven - ya ni preguntaba, para qué, ¿no? Supuse que estaba acostumbrado a que nadie le diera negativas.
- Entiendo que eres un poco estúpido y te cuesta entender algunos conceptos, así que te lo voy a repetir: ni me mires - odiaba ser tan hostil con la gente, pero había quien se lo merecía.
- Eres muy graciosa, ¿sabías? Queda todo un año por delante, bailes, muchas clases a mí lado, y lo que más me gusta: partidos de fútbol. Va a ser muy divertido - y guiñándome un ojo se fue. Le saqué mi dedo corazón a su espalda.
- Pero mira a quién tenemos aquí, la pequeña desgraciada. No creía que tuvieras agallas de volver. Pero bueno, siempre fuiste nuestro juguete favorito. Bienvenida de nuevo - dijo Angie sonriendo con maldad.
- Hola Angie, no sabes cuánto me alegro de verte. Me han dicho que hay una exposición de arte abstracto por aquí, pero no sabía que tu cara estaría incluída. Felicidades, bonito cuadro - le lancé un beso y me fui donde me esperaban Claire y Sharon con la boca abierta.
- ¡Conseguí que te fueras de aquí una vez, y lo volveré a hacer! - gritó mientras me iba.
- Anna, ¡acabas de contestar a la cornuda mayor! Definitivamente, serás una leyenda - dijo emocionada Sharon.
- No creo que sea para tanto Sharon, en serio - de verdad que no lo creía pero tenía un sentimiento en mi interior que crecía. Orgullo, satisfacción. Anna 1 - 0 Angie. Dulce venganza.
- Oh por cierto, hemos quedado esta tarde con mi novio y algunos amigos suyos, ¿quieres venir? Tienes que conocer a Liam, te caerá genial - le brillaban los ojos a Claire cuando hablaba de su novio.
- Claro, me parece bien. Éste es mi número, ¿hablamos más tarde y me decís la hora y el sitio? - me apetecía mucho salir con gente de clase y pasar un buen rato.
- Perfecto, pues nos vemos más tarde, adiós - y se fue hacia su casa.
- Anna, ¿por dónde vives? - preguntó Sharon. Le indiqué por dónde iba a ir - pues vamos, yo vivo por ahí también.
Fuimos todo el camino hablando y conociéndonos un poco más. Mi casa estaba antes que la suya.
- Bueno Sharon, nos vemos más tarde.
- ¡Está claro! Ahora de camino hago un grupo de whatsapp de las tres y hablamos. Adiós - me despedí con la mano y entré en casa. No había nadie ya que era pronto. Dejé el móvil en el escritorio de mi habitación y me puse a dormir un rato. Me desperté a la hora de la comida cuando mi hermano llegó. Hice algo para los dos y comimos mientras hablábamos de manera amena. Acabé y lo limpié todo. Cuando subí a la habitación escuché el móvil vibrar.
Anna, ¿estás viva?
¿Hay alguien ahí?
Anna, dime que vendrás
Y así unos veinte mensajes más de Claire y Sharon.
Hola, estoy aquí, Lo siento me he quedado dormida. Respondí antes de que me fundieran el móvil.
Vaya, menos mal. Ya pensábamos que no querías venir con nosotras. Hemos quedado a las 6 en el sitio, me explicó Claire.
Sí, y como vivo cerca de tu casa me paso a picarte a menos cuarto para ir juntas, ¿te parece bien?, dijo Sharon.
Sí, ¡genial! Pues voy a ducharme y a cambiarme de ropa. Nos vemos luego.
Eran las dos y media, aún me quedaban más de tres horas para que viniera Sharon así que decidí abrir facebook y pasarle a April fotos de mi ropa de hoy y contarle cómo había ido. No estaba conectada pero lo leería más tarde. También volví a mirar en Ikea lo que me haría falta para cambiar mi habitación y lo fui guardando todo para enseñárselo más tarde a mis padres. Entre una cosa y la otra llegaron las cuatro y decidí que ya era hora de darme un baño si no quería llegar tarde. Llené la bañera de agua con espuma y me metí dentro. Estuve alrededor de media hora pensando en el abismo y todas esas cosas que se piensan mientras una se baña. Me lavé el pelo y el cuerpo con mi champú y gel de vainilla. Salí mientras se vaciaba el agua y me enrosqué una toalla alrededor del cuerpo y otra en la cabeza. Me puse la ropa interior y la crema corporal de vainilla, adoraba ese olor. Salí del baño y fui a mi habitación a por la ropa. Por la tarde hacía mucha más calor que por la mañana así que decidí ponerme una falda con vuelo de flores que me llegaba cinco centímetros por encima de la rodilla, una camiseta básica corta blanca, una chaqueta del mismo color que la falda y unos zapatos blancos. Estaba en el baño peinándome escuchando música cuando recibí un mensaje de Sharon.
Anna, ¿cómo vas? ¿Te importa si voy un poco antes? Es que ya estoy y me aburro sola en casa.
Estoy acabando ya. Sí, tranquila, mi hermano se ha ido a casa de un amigo suyo y mis padres están trabajando, no hay nadie. Ahora nos vemos.
Seguí arreglándome tranquilamente. Me maquillé con un poco con rímel y gloss. Entonces picaron a la puerta. Bajé a abrir y ahí estaba Sharon.
- Hola de nuevo, siento haber venido a ocupar tu espacio personal pero es que ya no sabía qué hacer en mi casa - dijo muy rápido Sharon, casi ni la entendí.
- Ya te lo he dicho: ¡tranquila! Si no me importa, ven por aquí cuando quieras.
- Oh Dios me da mucha vergüenza pedirte esto pero tengo curiosidad: ¿puedo mirar tu armario? Por favor - y me eché a reír.
- Claro, ven, sube - y fuimos a mi habitación subiendo las escaleras - verás, tengo un tercio de la ropa en el armario y en los cajones pero tengo que cambiar la habitación, y no me cabía más ropa, así que el resto está en esas dos maletas de ahí.
- Tranquila, vendré por aquí más y ya podré verlo todo - dijo emocionada. Era muy graciosa. Lo mismo que te ha dicho el capullo de Jake. Agh.
- ¡Por mi encantada! Cuando tenga la habitación nueva os venís un día Claire y tú a dormir.
- Hecho - y me dio un abrazo. Aún no estaba acostumbrada a estas cosas. Se lo devolví torpemente.
Estuvimos un rato sentadas en la cama hablando.
- Anna tienes que ayudarme. Esta tarde vendrán los amigos del novio de Claire y hay uno que me gusta mucho y no sé qué hacer. Se llama Ian y es perfecto, te lo prometo. Me pongo muy nerviosa cuando está cerca. ¿Sabes qué puedo hacer? - me dijo preocupada. Me supo mal.
- Primero, Sharon tienes que estar tranquila. Los chicos no comen y eres una gran chica por lo que he podido ver hoy, que nada ni nadie te haga sentir menos. Segundo, que el miedo no te impida conseguir lo que quieres, no esperes a que llegue otra y se lo lleve. Espera, - y fui a mi joyero. De ahí saqué una pulsera - toma, es mi pulsera de la suerte, ya verás como con ella todo saldrá bien.
- Muchas gracias Anna, en serio. Creo que deberíamos ir yendo ya, mira la hora - y tenía razón, eran las seis menos cuarto. Asentí y seguidamente cogí mi bolso y puse dentro las llaves, el monedero y el móvil.
En el camino al bar o dónde fuera que íbamos estuvo explicándome su historia con Ian. Al fin llegamos al sitio y había un grupo en la puerta.
- Al fin llegáis - dijo Claire. Todo el mundo se giró automáticamente y mi cara se tornó roja. Pero el color se fue de golpe cuando vi el panorama.
- Hola rubita, sabía que vendrías - dijo Jake.
- Vaya, ni que alguien la hubiera invitado, ya te puedes ir por donde has venido fea - dijo Angie seguida por las carcajadas de Lauren y Kim. Cinco años sin verlos y ahora están por todos lados.
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Better than revenge
Teen Fiction"- Jake, es que es muy difícil esconder mis sentimientos... - dije con voz pastelosa acercándome aún más a él. Noté por el rabillo del ojo que todos nos miraban. Cuando estaba a pocos centímetros de su boca paré en seco y cambié la cara y el tono...