Capítulo 45: together again

5.4K 207 42
                                    

ANNA POV 

Llevábamos cinco días en aquel sitio conocido por mí como el paraíso. Todo el día bañándonos en la piscina (*multimedia*), bebiendo mojitos, tomando el sol... ¡Inculso me estaba poniendo morena! No quería irme de aquel lugar, pero sabía que quedaban dos días contados para volver de nuevo a la ciudad. 

Jake se comportaba de una manera extraña los últimos días. Lo veía mandando mensajes constantemente sonriendo y se iba a dar vueltas solo, llevándose el móvil. No quería pensar mal, pero había visto demasiadas películas. Esa inseguridad sólo aparecía cuando se iba o cuando no hablábamos porque me comía la cabeza demasiado. Confiaba en él, pero ¿realmente debía hacerlo?

- Rubita, voy a correr un rato, no puedo perder la forma - bromeó. Era sábado por la mañana, ya estaba vestido y yo me acababa de despertar. Asentí sonriendo desperezándome hasta que vi su teléfono móvil en la mano, no lo soltaba y cada vez que intentaba mirar qué escribía me lo apartaba.

- Ah, vale... Bueno, yo me pondré a tomar el sol en un rato.

- Ten cuidado no te vayas a poner gamba - siempre riéndose de mí... Le saqué, en un acto muy maduro, la lengua.

- Anda , vete a correr bolita - me dio un beso y se fue. Me quedé un rato más tumbada en la cama con los ojos cerrados intentando volver a dormir pero mi cabeza no se callaba. Finalmente suspiré y me levanté. Fui a la espaciosa cocina y me puse a hacerme el desayuno. Corté algunas frutas y las puse en un bol. Me senté en el sofá a ver la tele mientras comía. Cuando acabé, lo limpié todo y fui a cambiarme. 

Llevaba horas tomando el sol. Me iba quedando dormida a ratos y de vez en cuando me iba metiendo en el agua para paliar el calor. De pronto, el ruido de varios motores me sacó de mi ensimismamiento. No era normal tanta actividad en un pueblecito y mucho menos cerca de esa casa que estaba en la periferia. Me levanté y me asomé a ver qué pasaba. Dos grandes taxis de siete plazas se habían parado enfrente de la casa. No sabía que Jake esperaba visita, no me ha dicho nada y ni siquiera está aquí.

Inesperadamente, Jake apareció sonriente girando la esquina. No entendía nada. Las puertas de uno de los taxis se abrieron y de ahí salieron Mina, April, Sharon, Claire, Chad y Val. Abrí la boca sorprendida. Del otro coche salieron Liam, Ian, Zack y las parejas de Mina, April y Chad. Jake se acercó a mi riendo, me abrazó y me dio un beso en la mejilla. 

- No sabes lo que me ha costado que no te enteraras de nada, siempre mirándome el móvil - me sentí culpable por haber desconfiado de él. Me separé de él y me acerqué a saludar a todos nuestros amigos. 

- Qué bies os lo montáis eh- dijo Ian. 

- ¡Qué empiece la fiesta 24h! - gritó Sharon. Todos respondieron entusiasmados, incluidos Zack y Valerie aunque con más timidez, aún no conocían al grupo pero después de ese fin de semana se sentirían más que integrados en el grupo. Jake me cogió de la mano. No sabía cómo expresar la alegría que sentía. Por suerte, en esos últimos meses había limado asperezas con Zack y se habían convertido en buenos amigos. Muchos viernes salíamos a cenar y tomar algo los cuatro.

Los chicos empezaron a coger mesas y las colocaron fuera. Sacaron también diferentes botellas de alcohol y vasos. Jake vino con unos altavoces gigantes, que no sabía de dónde los había sacado, y los colocó en un lado lo suficientemente apartados de la piscina para que no se mojaran pero mínimamente cerca para escuchar mucho la música. Menos mal que no hay vecinos... 

- Señorita - llamó mi atención Jake detrás de la barra improvisada que habían hecho los chicos. 

- Hola barman - bromeé. 

Better than revengeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora