Mi nombre es Gerard Way, tengo 17 años y estoy cursando mi último año de preparatoria.
No sé como empezar a contar mi historia, hasta ahora no me había pasado algo interesante, ni mucho menos me había escapado por alguna aventura como para contarles que soy el más cool del vecindario. Sólo llevaba mi vida como cualquier persona hasta este punto, sencilla y sin complicaciones.
Así que decidí iniciar mi historia como cuando te hacen las típicas preguntas de presentación el primer día de clases en el colegio, ¿Supongo que voy bien?
Que ansiedad.
Este día había despertado por la luz de la ventana que me estaba quemando el rostro, mis cortinas las había lavado el día anterior así que mi habitación había quedado a la intemperie esta noche. No quería darle tantas vueltas al mismo tema porque me daba miedo, así que bostezando me refregué los ojos y se aclaró mi vista de a poquito. No sabía si me había levantado bien siquiera, pero me puse de pie rápidamente y agarré mi teléfono colocándolo en la cámara para enfocar el paisaje. Como si de ya una rutina se tratara. El sol se veía hermoso en ese ángulo, brillando con el cielo azul y casi no había rastros de nubes.
Click.
Me encanta tomar fotografías en cada ocasión que se me presentaba, pero mayormente tenía retratos del cielo en sus distintas facetas. Sonreí al ver la pantalla. En la tarde iría a imprimir la mitad de la galería.
Guardé mi teléfono en el bolsillo de mi pans y me dirigí hacia el baño a realizar lo de siempre, como orinar, por ejemplo. Hoy entraba un poco tarde a la escuela por lo cual tenía unos minutos extras para ducharme con tranquilidad, así que busqué mi toalla y las prendas que utilizaría durante el día. Me gustaba vestir cómodo, pero también tenía la afición por verme mejor cada día. Cuando terminé después de unos minutos salí, era el único que me encontraba en casa, mis padres se habían ido a trabajar y Mikey había acudido al horario normal. Yo soy mayor que él por un año pero no había gran diferencia, por eso agradecía tener a alguien que me entendiera de cierta forma en algunas ocasiones, aunque sí se notaba un peso de diferencia.
Me coloqué la mochila en la espalda bajando las escaleras y checando la hora salí corriendo de ahí a la parada de autobuses, una de las ventajas de entrar a ésta hora era que podía encontrar más lugar en el vehículo ya que no estaban tan llenos y podía mirar el trayecto sin doblar tanto la cabeza.
Al llegar a la institución entré mostrando mi credencial que confirmaba mi grado y grupo. El guardia nuevo me quedó viendo algo raro por mi cabello pero no me dijo nada que no fuese fuera de las reglas ya que no lo estaba. Entonces, caminé hasta la clase de filosofía que era la siguiente que me tocaba.
La escuela era algo que me gustaba, quitando el hecho de estudiar, era como un lugar seguro para mi. Me sentía más liviano, como si cada día pasara algo distinto y me gustaban los alrededores. Localicé con la mirada a Raymond, mi mejor amigo, y lo encontré en su lugar de siempre leyendo un libro que se veía algo grande. Me extrañó esa actitud pues él no acostumbraba leer, y mucho menos en la escuela.
—¿Estás bien? —pregunté sentándome a un lado.
Nuestro salón era uno típico, no me molestaría en describirlo por ahora, pero sí les diré que yo tenía una silla especial que había traído con ayuda de mi amigo de otro salón donde me sentaba todos los días, y me ayudaba incluso a no sentirme incómodo con la espalda como las demás.
—Olvidé que hoy tenemos examen de historia, así que déjame estudiar cabeza de limón.
Le saqué la lengua por su tonto apodo que me decía siempre y no recordé de qué examen en específico hablaba, pero no me interesó mucho. Afortunadamente era bueno recabando información durante clases y no necesitaba estudiar. Claro, no tenía una excelente memoria pero, era lógica más que nada.
ESTÁS LEYENDO
You're ugly too |Frerard|
FanfictionGerard es un chico optimista, amigable y alegre. Frank es lo contrario. Ambos llegan a un acuerdo porque Frank necesita tutorías de química, pero no creían que al final iban a coincidir tanto. Son polos opuestos, ¿Qué es lo peor que podría pasar?