Universo lol / League Of Legends

Lulu El hada hechicera/ Campeones

''El mejor camino entre dos puntos es al revés, en medio, luego al revés de nuevo y de vuelta al principio''.

~ Lulu

Quizás más que cualquier otro yordle, Lulu marcha al ritmo de su propio tambor. Durante su juventud en la Ciudad de Bandle, pasó la mayor parte del tiempo deambulando sola por el bosque o perdida en sus fantasías. No es que fuera antisocial. El bullicio diario de la Ciudad de Bandle no podía competir con el emocionante mundo de su imaginación. Veía maravillas en lugares que la mayoría pasaban por alto. Así es como conoció a Pix, un espíritu hada, que pretendía estar atorado en una pajarera. La imaginación de Lulu llamó la atención de Pix, que aprovechó la ocasión para arrastrarla a su mundo. La llevo al Claro, la casa encantada del espíritu hada, que se encontraba en un campo del bosque. Allá, las rígidas propiedades del mundo exterior, como el tamaño y el color, cambiaban de manera tan frecuente y absurda como el viento. Lulu se sentía como en casa en el Claro. Por lo que se quedó ahí, con Pix, fascinada por este secreto lugar.

Perdió la noción del tiempo muy rápido. Su vida en el Claro era cómoda y natural. Pix y ella jugaban juegos de hadas, el tipo de juegos que otros habían dicho que eran pura fantasía... y en los que resultó ser sumamente buena. Un día, se sorprendió al ser consciente de que había dejado atrás su vida en la Ciudad de Bandle. En el Claro, cualquier cosa externa parecía distante y surrealista. Lulu decidió volver a su antiguo hogar para compartir algunas de las maravillas que había aprendido. Pero, cuando Pix y ella volvieron, el mundo había cambiado mucho. Descubrió que el tiempo era otra propiedad que se comportaba diferente en el Claro, y que habían pasado siglos mientras estuvo lejos. Lulu intentó volver a relacionarse con el mundo exterior, pero sus intentos fueron en vano. Llevó a todos los niños a jugar al escondite y los convirtió en flores y animales para animar los juegos, pero los padres no apreciaron su esfuerzo. Cuando los yordles insistieron que se fuera, acudió a un lugar en el que todos los que tenían algún don poco común no solo eran aceptados, sino que, además, eran adorados.