Una parte.

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4 meses después...

Tony besa la espalda de Xandra mientras ella suspira, eran las 6 de la mañana. Él le dio la vuelta y ella sonrió.

-Esto es una buena forma de empezar el día-dijo él besando su hombro.

Ella rio.

-Hoy tengo cita con la ginecóloga, no sé si llegaré tarde.

-¿Quieres que te acompañe?-preguntó él dejando un camino de besos de su cuello a su pecho.

-Si quieres-dijo ella suspirando.

-Mmm-murmuró él bajando su mano su entrepierna-, por ahora quiero hacerte el amor de nuevo-ella sonrió.

A las 3 de la tarde fueron a la cita. Entraron de la mano y la doctora sonrió. Le hizo el examen de rutina y uno de sangre. La doctora volvió con las hojas y sonrió.

-Al parecer estás embarazada-dijo ella sonriendo.

-¿Embarazada?-preguntó Tony.

La doctora sonrió.

-Pues sí, el examen de sangre no falla-miró a Xandra- ¿Quieres que te haga un ultrasonido?

Ella asintió sin decir nada, Tony frunció el ceño al verla. Le ayudó a subirse a la camilla.

-¿Estás bien?-preguntó él, ella asintió- ¿No querías tener un bebé?

-No, no es eso...-susurró- Hace un año tuve un aborto no creí volver a quedar embarazada.

-¿Aborto?-preguntó él.

Pero ella no pudo contestar, la doctora le hizo el ultrasonido y Tony sonrió emocionado, Xandra agarró su mano. El latido del corazón sonaba fuerte y claro.

-Tienes aproximadamente 10 semanas-dijo ella.

Tony besó su cabeza sonriendo. Xandra no salía de su asombro, sería madre de nuevo. Salieron felices de aquel consultorio.

-Mi vida, gracias-murmuró él besando su cabeza.

-Siento que es mi primera vez-dijo ella.

-¿Si quieres tenerlo?

-Claro que sí ¿Qué pregunta es esa?

-Yo solo preguntó-dijo él.

Ella sonrió y lo besó.

-Quiero decirlo hasta que pasé las 20 semanas.

-Está bien amor-dijo él abriendo la puerta.

Llegaron a la casa y ella dejó el ultrasonido en la mesa de noche, en el marco de fotos en la que salían ellos sonriendo en la boda. Tony se acostó y la vio caminar tranquila por la habitación, la escuchó hablarle a Ringo y sonrió. Aquellos cuatro perros eran un caso, se hicieron amigos desde el primer momento. Miró el ultrasonido y no pudo evitar sonreír, amaba a esa mujer y ahora amaría esa semillita que crecía en su interior, que era una parte suya y otra de Xandra.

-¿Por qué sonreímos?-preguntó ella subiéndose a la cama.

Él la miró y sonrió.

-Porque tendremos un hijo-dijo- ¿Te imaginas que lindo será?

-De seguro saldrá a ti-dijo ella acariciando su cabello.

-O como tú-dijo él-, Beca era hermosa, por ti.

Ella sonrió al recordar a su pequeña, era verdad era hermosa.

-¿Te gustaría una niña o niño?

Parar el tiempo.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora