Aguja e hilo.

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Daniel buscó hasta por debajo de las piedras a Daiana, pero no la encontró es como si hubiera muerto. No quería ir en busca de su hermana, así que volvió a Madrid, necesitaba un consejo y la única que podía aconsejarlo en ese momento era Iliana, tocó el timbre de la casa de Iliana, ella abrió sonriendo.

-Daniel hola-dijo besando sus mejillas.

-¿Cómo estás?

-Bien ¿Qué te trae por aquí? Pablo sigue en Londres ¿no?

-Sí, solo que necesitaba hablar contigo.

Ella lo invitó a una taza de café, se sentó en frente de ella. Iliana lo miró.

-¿Qué sucede?

-Por favor, no quiero que te escandalices, ni que empieces a buscar entre la basura-ella no entendió de que hablaba- ¿Recuerdas cuando te dije que te fui infiel?

Ella resopló y acomodando su flequillo.

-Menuda noche-dijo recordando, él asintió.

-Te mentí.

-¿De qué hablas?-pregunta.

-Sí te fui infiel, pero eso no es todo-ella miro su taza de café, hablar de eso hacía que heridas que se cosieron hace mucho tiempo se abrieran de nuevo-, Daiana no solo fue una aventura de una noche, ella... quedó embarazada...

Iliana lo miró.

-¿Qué?-susurró.

Daniel se levantó y caminó hacia el ventanal de esa gran casa que él le había comprado luego del divorcio para que viviera como siempre había vivido, nunca dejó de enviarle dinero de sobra para ella y para el niño.

-Ella llegó cuatro meses después de aquella noche, diciendo que yo era el padre de ese niño, pero yo no sabía que hacer, tu me perdonaste, no podía fallarte de nuevo y menos de esa forma, así que le di dinero para que se fuera, no quería saber nada de ella, y tampoco quería saber si ese niño era mío, solo quería seguir con mi matrimonio contigo y con Pablo pero...

-Detente-dijo ella, él la miró- ¿Le diste dinero y la echaste como un perro?

-Joder Iliana que si lo pones así suena horrible-murmuró él.

-¡Pero si es así Daniel!-dijo aquella mujer tocándose la frente- Solamente la echaste como si fuera un perro, embarazada, ¿Y si en verdad era tu hijo?

-A eso es lo que voy-dijo él-, Demarco lleva planeando casar a Pablo con Xandra, eso ya lo sabes. El problema es que ese chico tiene enamorada a Xandra, y Demarco mandó a investigar a Tony-ella lo miraba sin entender nada-, el punto es que él no sabe quiénes son sus padre, fue dejado en la puerta de la casa de su tía materna dos días después de nacer y adivina de quién es hermana la tía de ese muchacho...

-Esto no puede estar pasando-dijo Iliana negando con la cabeza- ¡¿Me estás diciendo que mi hijo está peleando con su hermano por una misma chica?!

-No estoy seguro que sea mi hijo, pero es algo que creo.

-Daniel ¡La has cagado!-él sonrío, ella siempre decía eso cuando estaba nerviosa.

Aún la quería, no había duda de ello, pero ella no quiso intentarlo de nuevo.

-¡No sonrías!-dijo ella riendo.

Él se acercó a ella y acaricio su mejilla.

-Por favor, perdóname por ser un estúpido.

Ella agarró su mano y besó la palma de esta. Ese gesto lo hizo sonreír.

-Daniel yo te perdoné hace muchos años, pero ahora quién te tiene que perdonar son esos dos muchachos, si es lo que tu crees que es, estás en una gran bola de nieve.

Parar el tiempo.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora