Nuestra Frágil Luna

8

Aria:

Estoy en una sala de hospital, o al menos eso parece. Andrew duerme en un sillón demasiado pequeño para él a mi lado y su largo cabello castaño oscuro cubre su rostro .

Intento sentarme y un gemido sale de mi boca. Andrew abre los ojos en ese mismo instante.

-¿Qué me sucedió? -Pregunto con una voz seca y rasposa, Andrew me acerca un vaso de agua y acaricia mi cabeza.

-Eso mismo me pregunto yo pequeña- se sienta en frente, en la cama y toma mi mano. la suya se siente caliente contra mi piel, me gusta que tome mi mano.
-¿Qué te hicieron en aquél lugar dónde estuviste estos últimos años Aria?

Me remuevo incomoda en la camilla. ¿A qué venía esa pregunta? ¿Algo qué me hicieron en el recinto provocó mi desmayo?

-Estoy bien.

-Eso no fue lo que pregunté -me mira tan profundamente que tengo que cerrar los ojos ante la intrusión.

-¿Por qué me desmayé?

-Tuviste un aborto espontaneo Aria.

¡¿Qué?! Me dan arcadas. Andrew rápidamente pone un balde frente a mi en el cual vomito bilis.

Estuve embarazada, tuve un bebé dentro mío que ahora está muerto. Miro a Andrew en un estado de shock pidiendo ayuda. Su cara es una mezcla de expresiones, rabia, pena, decepción.

-Un bebé, mi bebé, yo...

-Un feto Aria, inviable por tú estado de salud. Nuestro hijo será tu bebé, sano, fuerte, próximo Alfa de Bantry -dice en un tono fuerte. Quiero vomitar de nuevo por lo que sostengo el balde frente de mí.

-Buenos días Luna -Entra Callum a la fría habitación con un delantal blanco -Te daré algo para las molestias. -dejo el balde a un lado.

-Estoy bien.

Callum es un hombre de unos veintiocho años, no muy alto, tiene los ojos azules y el pelo muy corto. No tiene para nada pinta de doctor, pero parece saber lo que hace.
Cuando lo vi por primera vez se le notaba mas compuesto, pero ahora una mirada de preocupación domina sus facciones.

-Aria -gruñe Andrew ante mi respuesta.

-Estoy bien. No quiero ningún medicamento- miro a Callum -También me gustaría un teléfono para llamar a mis padres y poder volver a los Estados Unidos. Mi hogar -remarco la ultima parte. Andrew golpea la pared tan fuerte que el yeso cede y queda un agujero.

Me asusta. Sus reacciones violentas y su modo autoritario de hablar, igual que los hombres que entraban a mi celda.
Lloro al recordar las dolorosas imágenes y me abrazo las rodillas para protegerme de los golpes.

Levanto la cabeza y veo a Andrew atónito, supongo ante mi reacción, y Callum se encuentra parado en el mismo lugar sin decir una palabra.

-Lo lamento princesa -se acerca a la cama y extendie su brazo lleno de polvillo por el yeso, me encojo aun más al respaldo alejándome de su persona. -Aria...

-¡No te me acerques! -grito llorando -¡Vete! ¡Yo solo quiero ir donde mis padres! ¡he esperado cinco años para ver a mis padres!.

-Aria respira -dice Callum con su voz calmada -Necesito que respires ¿Esta bien? -lo miro y asiento, estoy hiperventilando - Inhala conmigo, vamos -sigo sus instrucciones -Ahora exhala. Bien, otra vez.

Cuando vuelvo a respirar con normalidad y me seco las lagrimas de los ojos veo a Andrew ido.

-Alfa -Callum mira a Andrew con esa preocupación latente.

-Lo sé -asiente, ¿De qué hablan? - Aria pequeña me tengo que ir, están traspasando nuestras fronteras y no he podido pensar con claridad contigo aquí -siento una puntada de remordimiento en mi pecho -No es tú culpa nena, lo lamento. Callum se quedará contigo

Sin decir más se va, dejándome preocupada y media aturdida por los últimos acontecimientos.