Devuélveme el corazón

Capítulo 41

Por la mañana me levanté temprano y fui a clase. Tenía una hora libre antes del taller de fotografía así que decidí dar una vuelta por ahí para distraerme, iba camino a la cancha de futbol con Juli, cuando a lo lejos vimos que Marcia se acercaba, note como la expresión de Juli cambiaba, era obvio que no le agradaba y no sé por qué, la verdad es que mis esperanzas de que su relación cambiara habían terminado.

– Hola amor – Dijo ella depositando un beso en mis labios

– Hola, ¿qué tal tu día?

– Ahora mucho mejor – Volvió a besarme

Juli siguió su camino, me separe un poco para ver a dónde iba, y entonces me tense, apreté mi mandíbula y cerré mis puños, era Nina, pero no estaba sola, Alex la estaba abrazando, parecían muy felices, maldije para mis adentros ¿por qué estaba con ella? Habiendo más chicas a su alrededor ¿por qué justo ella?

Me despedí de Marcia diciendo que Juli me esperaba, para mi sorpresa ella no se molestó y solo se limitó a despedirse y seguir su camino, yo hice lo mismo. Vi como Juli llegaba y lograba arruinar su momento, Nina se separó de Alex y lo saludo, me alegra que los haya interrumpido. Camine más rápido hasta llegar a ellos

– Hola – Salude, mire a Alex serio

– Hola – Dijo Nina con una hermosa sonrisa

– ¿No se supone que tienes clase? – Dije dirigiéndome a ella

– No, en realidad tengo una hora libre antes del taller

– ¿Y tú? – Pregunto Juli dirigiéndose a Alex – ¿Tampoco tienes clase?

– No, no tengo clase – Juli alzo una ceja – Pero tengo algunos trabajos pendientes, será mejor ir a la biblioteca – Miro a Nina y le sonrió – Nos vemos – La abrazo y beso su mejilla, aparte la vista de ellos, odiaba a este tipo – Chau – Dijo despidiéndose de nosotros

Era obvio que Juli y yo no le agradábamos, y eso era algo bueno ya que él tampoco nos caía bien, es un idiota. Nina nos miró a ambos y sonrió

– ¿A dónde iban? – Nos pregunto

– A jugar un rato – Respondió Juli – Mientras comienzan los talleres

– Bien, los acompaño – Anuncio

– ¿Vas a jugar futbol con nosotros? – Pregunte sorprendido

– No – Dijo negando rotundamente – Sabes que lo mío no son los deportes. Yo solo los acompañare

– Bien – Dijo Juli – Vamos

Comenzamos a caminar y de repente nos intercepto Ramiro

– ¿Qué onda chicos? – Dijo saludándonos – ¿Qué hacen?

– Vamos a jugar futbol ¿vienes?

– Esta vez paso – Dijo rascándose la nuca

Esto era raro, él jamás se negaba a jugar un rato, parecía nervioso. Juli y yo intercambiamos una mirada rápida, sabíamos que algo le pasaba, el celular de Juli sonó y se alejó para responder la llamada

– Necesito de tu ayuda – Dijo dirigiéndose a Nina

– ¿Qué pasa?

– La cometa – Parecía desesperado, no sabía que le gustaba volar cometas – He estado buscando por todas partes, pero nadie tiene una, parece que no es temporada o algo así

– No puede ser – Dijo Nina preocupada – Debe haber una manera de solucionarlo

No entendía nada de lo que decían, ¿tanto alboroto por una cometa? Nina se comenzó a tronar los dedos, eso lo hacía cuando realmente estaba preocupada por algo, de repente paro de hacerlo, me miro y sonrió

– ¿Recuerdas la vez que fuimos a la batalla de cometas? – Asentí con la cabeza, ese día estuvimos a punto de ganar, sino me hubiera distraído viendo lo hermosa que se veía Nina tratando de aniquilar a nuestro oponente no nos abrían cortado el hilo de la cometa y hubiéramos ganado – Dijiste que tú habías hecho la cometa

Ahora Ramiro también me miraba con la misma sonrisa con la que lo hacía Nina, no entendía a dónde querían llegar

– Si, yo la hice

– ¿En serio? – Pregunto Ramiro emocionado – ¿Sabes hacer cometas?

– Si, no es tan difícil

– ¿Crees que me puedas ayudar a hacer una?

– Si, supongo

Ambos me abrazaron emocionados mientras yo seguía sin comprender como podían emocionarse tanto solo por una cometa, cualquiera podría hacer una

– Gracias Gastón – Dijo Ramiro después de abrazarme – Me has salvado la vida

– No entiendo – Confesé al fin – ¿Por qué tanto alboroto por una cometa?

– No es sólo una cometa – Dijo Nina – Es "La cometa" – Ramiro sonrió

– Ya que me vas a ayudar con la cometa, creo que te puedo contar para qué es – Lo escuche atento – Le voy a pedir a Yam que sea mi novia

Wow... creí que ya lo eran, ahora todo tiene un poco más de sentido, por eso estaba tan nervioso y preocupado por la cometa

– ¿Y qué tiene que ver la cometa?

– Nina me dio la idea

– Yam me conto que ama los cometas – Dijo Nina – Y que desde que era pequeña no ha volado uno, así que creí que sería lindo si Ramiro la llevaba a volar un cometa – Sonreí – Además harán un picnic después de volar el cometa

– Bien – Dije comprendiendo todo – Yo te ayudo

– Muchísimas gracias – Dijo Ramiro abrazándonos – Sabía que podía contar con ustedes

Juli volvió después de terminar su llamada y nos fuimos a jugar, quedamos en vernos después de clase para organizarnos. Nina y yo fuimos a el taller de fotografía donde nos encontramos con Jazmín, se veía radiante y no lo digo por su forma de vestir, había algo más, estaba feliz y emocionada y no creo que sea por el taller, nos sentamos juntos y el taller comenzó. Una de mis actividades favoritas es la fotografía, me gusta poder capturar y conservar un momento en una fotografía haciéndolo inolvidable, sino hubiera estudiado medicina lo más seguro es que me haya dedicado a la fotografía, pero tal y como lo había hecho Matteo con la música, preferí estudiar medicina y en mis tiempos libres dedicarme a la fotografía

El taller termino y nos dirigimos a música, ese taller lo compartíamos con todos los chicos, incluso Juli, el taller de música era muy divertido, el profesor nos ponía por semana un tema sobre el cual trabajábamos, todos participábamos con una canción referente al tema o incluso había semanas dedicadas a un solo artista, aquí podíamos cantar y tocar cualquier instrumento que quisiéramos

Al terminar el taller fuimos a comer con los chicos y después de despedirnos de todos, Nina, Ramiro y yo nos fuimos a planificar todo para la propuesta de Ramiro, me alegra que al fin se haya decidido a decirle lo que siente a Yam, después de todo al fin haría el sueño de Juli realidad, por fin serian novios y Yam ya no se molestaría cuando Juli se lo dijera. Comenzamos a hacer la cometa, Ramiro hacia una para Yam y yo hacía una para Ramiro mientras Nina nos ayudaba a ambos.