Devuélveme el corazón

Capítulo 43

Las clases pasaron súper rápido, después comenzaron los talleres y finalmente salimos del campus en mi auto para organizar todo para el picnic, Ramiro se veía realmente nervioso, quería que todo saliera perfecto, estaba histérico. Nina se encargó de preparar el lugar y yo de cocinar, debo decir que no cocino tan mal, el tiempo se pasó volando, cuando terminamos de arreglar todo Ramiro fue a buscar a Yam al campus, Nina y yo nos quedamos cuidando las cosas mientras ellos llegaban, estaba algo callada

– ¿Estas bien?

– Sí – Sonrió – Solo estoy algo nerviosa por lo de Yam y Ramiro

– Tranquila – Dije mientras la abrazaba – Se nota de lejos lo mucho que se quieren

– A veces eso no es suficiente

– ¿Por qué lo dices? – La mire confundido

– Por nada, olvídalo – Iba a insistir, pero escuchamos que alguien se acercaba – Creo que es hora de escondernos

Nos alejamos del lugar y caminamos hacia mi auto, lo había dejado escondido entre los árboles para que Yam no lo notara, íbamos a esperarlos hasta que su cita se terminara para poder volver todos juntos, realmente espero que Yam acepte ser su novia, sino el viaje de regreso será realmente incómodo.

– ¿Y qué quieres hacer? – Dije una vez que llegamos al auto – Tenemos un aproximado de tres o cuatro horas de espera

– No lo sé – Sonaba triste

– ¿Segura que estás bien? – Ella se quedó callada por un momento, meditando su respuesta

– ¿Te puedo preguntar algo?

– Sí, claro. ¿Qué pasa?

– ¿Qué sientes por Marcia?

Su pregunta me tomo por sorpresa, aparte la vista y pensé la respuesta, mentiría si dijera que la amo, porque realmente no lo hago, la quiero... pero no sé si de la forma que ella quisiera, la verdad es que la considero como una amiga, la única persona que amo es a ella, pero ¿cómo decírselo?

– Sé que la quieres – Dijo ella rompiendo el silencio – O sea, son novios – Sonrió levemente – Sería raro que no lo hicieras

– Si, supongo...

Volvió a sonreír y bajo la mirada, yo solo me quede ahí, contemplándola como un idiota, ¿por qué tenía que ser tan linda? Tomé su mano y comencé a trazar círculos en ella, había una pregunta rondando en mi mente desde hacía mucho tiempo y creo que este es el momento de hacerla

– ¿Y tú? – Alzó la vista sin comprender – ¿Qué onda con Alex?

– ¿A qué te refieres?

– ¿Te gusta? – Dije conteniendo el aliento en espera de su respuesta

– ¿Alex? – Pregunto con una sonrisa, asentí en silencio – No

Dejé escapar el aire que estaba conteniendo, sonreí

– Pues creo que deberías aclarárselo, porque parece muy interesado en ti

– Solo somos amigos – Dijo con el ceño fruncido

– Bien – Alce mis manos en forma rendición, no iba a insistir más en el tema – ¿Te gustaría ver una película?

– Claro

Por suerte había traído mi computadora cargada para ver una película, no es que lo haya planeado con anticipación ni nada... solo pensé que estaría bueno tener a la mano una buena película por si se daba el momento para verla. Nos acomodamos en la parte trasera del auto y comenzamos a ver la película, durante todo ese tiempo mi atención se dividía entre la pantalla y la hermosa chica a mi lado, la amo y siempre lo haré