Capítulo 73

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Con los chicos nos reunimos para despedirnos de Jazmín y Juli que partían a la semana de la moda, espero que lo disfruten, los voy a extrañar, ¿qué voy a hacer sin sus chistes y consejos?

– Espero que disfrutes el viaje – Dije abrazando a Jazmín

– Por supuesto que lo haré – Sonrió – Y les traeré recuerdos a todos – Dijo dirigiéndose a todos – Gracias por ayudarme con esto – Susurro para que solo yo la oyera – Sin ti este viaje no habría sido posible – La abrace de nuevo, ella se merecía todo esto y mucho más

– Te voy a extrañar – Dije ahora dirigiéndome a Juli

– Y yo igual – Dijo él abrazándome – ¿Aún puedo arrepentirme? – Dijo en vos baja, yo solo le golpee el hombro – Oye – Dijo sobándose – Era broma, siempre fue mi sueño ir a la semana de la moda – Dijo con sarcasmo

– Juli...

– Ok, ok... – Dijo sonriendo – Te voy a extrañar – Lo abrace, en este tiempo había aprendido a quererlo mucho – Prométeme que te vas a cuidar de Alex

– Lo prometo – Dije alzando el dedo meñique, él sonrió y cruzo su meñique con el mío cerrando así nuestra promesa

Pronto se llegó la hora de partir, así que tomaron sus maletas y emprendieron su viaje, hoy era fin de semana, así que estaba algo desocupada, el taller de innovación sólo era de lunes a viernes, por lo cual cuando los chicos me invitaron a comer acepte, había estado evitando a Gastón durante toda la semana, para mi buena suerte él desapareció en cuanto Jazmín y Juli se marcharon. Fuimos a la cafetería y comimos todos juntos, para mi sorpresa no me sentí tan excluida al estar en la mesa con ellos, creí que sería incomodo ya que Luna esta con Matteo y Yam con Ramiro

Cuando terminamos de comer Luna y Matteo salieron, dijeron que no volverían hasta mañana temprano, así que el día de hoy dormiría sola, por suerte tenía a Dutty. Me despedí de Yam y Ramiro y fui a mi habitación, era raro tener una tarde libre, hace mucho que no la tenía, así que aproveche y me puse a ordenar la habitación

Últimamente estaba siendo muy descuidada y dejaba mis cosas en cualquier lado, mi escritorio estaba lleno de libros míos y de la biblioteca que aún no había devuelto, así que decidí comenzar por ahí, sino quería ser acreedora de una multa debía devolverlos a tiempo. Comencé a ordenar mis libros y ahí, en medio de ese caos encontré "La otra cara de Saturno" sonreí para mis adentros, este libro es uno de mis favoritos, gracias a él comenzó mi historia con Gastón, acaricie la tapa dejando que miles de recuerdos invadieran mi mente, lo extrañaba

Mi celular comenzó a sonar sacándome de mis pensamientos, mire la pantalla y vi el nombre de mi madre, sin pensarlo dos veces atendí la llamada

Llamada telefónica

– Hola – Salude – ¿Está todo bien? – Pregunte con miedo

– Hola hija, ¿cómo estás?

– Bien, ¿Y ustedes? – Se quedó en silencio – ¿Cómo está el abuelo?

– Nina yo... – Se escuchaba nerviosa – No sé cómo decirte esto

– ¿Qué pasa?

– Tuvimos que internar al abuelo

– ¿Cómo?

– Ayer por la noche se comenzó a sentir mal – Tome asiento en la cama – Papá y yo lo llevamos al centro oncológico y ahí nos dijeron que su caso se está complicando.

– Pero debe haber algo que podamos hacer para ayudarlo

– Los especialistas están estudiando su caso, pero no nos dan mucha esperanza – Sentí como el alma se me caía a los pies, no podía ser verdad – ¿Estas bien?

Devuélveme el corazónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora