Capítulo 54

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A la mañana siguiente seguía sin poder creer lo que Nina me había dicho, así que me desperté temprano y antes de ir a clase fui a hablar con Marcia, no podía seguir con la duda, necesitaba preguntarle a ella si lo que Nina decía era verdad, realmente no creo que ella haya hecho algo como eso, ella siempre me ha dicho que me ama así que no tendría mucho sentido engañarme. Salí de la habitación y me dirigí a la biblioteca donde había quedado con Marcia para aclarar este tema

– Hola, amor – Dijo ella a penas me vio llegar recibiéndome con un beso

– Hola – Dije fingiendo que todo estaba bien – Necesitamos hablar

– Claro ¿qué pasa? – No tenía ni idea de cómo se lo podría tomar, pero necesitaba preguntárselo

– ¿Es verdad que me engañas? – Su expresión cambio totalmente, se puso algo pálida y miro al suelo, ¿acaso Nina tenía razón?

– ¿Quién te dijo eso?

– ¿Que importa? – Jamás diría que fue Nina – Respóndeme

– Fue Nina ¿no? – ¿Cómo lo sabía? – Claro, tenía que ser ella. Y tu como siempre prefieres creerle a ella que de la nada llega y se interpone entre nosotros – La mire confundido, ella no se estaba interponiendo – ¿No te das cuenta de lo que está haciendo? – Dijo molesta – Está intentando separarnos

– No, Marcia ella no...

– Basta Gastón – Dijo interrumpiéndome, realmente se veía molesta – Deja de defenderla, estoy cansada de que siempre la pongas a ella primero, yo soy tu novia y deberías creerme a mí, no a ella. Yo no sé qué tanto te haya dicho, pero te juro que es mentira – Se acercó a mí, tenía lágrimas en los ojos, me sentí como una basura por haberle preguntado si me engañaba – Te amo, y eso es lo único que debería importarte

Tenía razón, ella siempre había estado ahí para mí, así que yo debía estar ahí para ella, como buen novio. Sin decir nada más me acerque a ella y la bese, quería hacerla olvidar el mal rato que le hice pasar, y esa fue la única forma que se me ocurrió, ella me correspondió el beso

– Perdón por desconfiar de ti – Dije sinceramente

– Descuida – Dijo con una débil sonrisa – Está todo bien, pero realmente espero que antes de creer cualquier cosa que ella te diga me lo preguntes

– Lo haré – Dije abrazándola, ella amplio su sonrisa

Después de ese desastroso comienzo del día la invite a desayunar, pasamos un buen rato juntos, incluso logre que olvidara por un momento mi estúpida escena anterior, no sé qué es lo que Nina haya creído ver pero era más que obvio que solo había sido una confusión, a penas la viera le dejaría en claro que lo que me había dicho de Marcia era totalmente falso

Terminamos de desayunar y trate de relajarme, hoy teníamos una práctica en técnicas quirúrgicas así que me convenía tranquilizarme para no arruinarlo. Me puse mi bata blanca y tome mi mochila, cuando llegue al salón Juli ya estaba ahí, lo salude y tome asiento junto a él, siempre hacíamos equipo, sabía que podía confiar en él y él podía confiar en mí, cuando llego el profesor comenzamos con la práctica para terminar a tiempo, bloquee todos mis pensamientos relacionados con Marcia y Nina y me concentre en mi trabajo

El resto del día pasó casi igual, sin nada relevante para contar. Antes de salir de mi última clase del día recibí un mensaje de Matteo el cual decía que el taller de música se había unido al de baile y que por consecuencia tendríamos que ir el día de hoy al taller de baile/música, había escuchado algo al respecto pero no sabía que teníamos que ir los de música a baile y los de baile a música, en pocas palabras, la mayor parte de la semana. No sabía si ponerme triste o feliz, mi tiempo libre se reducía, pero podría ver más tiempo a Nina, no, tenía que ponerme triste, se supone

Juli y yo salimos de clase y nos dirigimos al taller, él estaba en baile así que de todas formas tenía que ir, al llegar el salón estaba repleto, aunque por un lado se encontraban los de baile y por otro los de música, yo obviamente me dirigí hacia los de música y creí que Juli haría lo mismo, Nina entro después de nosotros y fue ahí cuando note que Juli se había quedado parado junto a la puerta y a su lado estaba Nina y entonces lo entendí, ellos estaban en ambos talleres así que no sabían hacia qué lado debían ir

Por suerte no tardó mucho en llegar el profesor, el cual nos explicó que la maestra del taller de baile estaba de viaje y le había pedido de favor encargarse de su taller así que él opto por juntar ambos y hacer de esta semana una semana especial. Formaríamos algo así como un festival donde todos participaríamos en diferentes actividades durante toda la semana, así que teníamos que pensar en algo que nos gustaría presentar. Las chicas del taller de baile se pusieron de pie rápidamente y dijeron que ellas tenían algo preparado que les gustaría presentar, todos despejamos el área y tomamos asiento para ver el espectáculo. Juli al final decidió tomar asiento con nosotros mientras Nina fue con el resto de las chicas. Juli tenía una sonrisa tan grande que casi no cabía en su rostro, ellas se acomodaron en sus lugares y comenzó a sonar la música

– Esa canción –Dijo Juli a penas en un susurro – La elegí yo

Se veía realmente orgulloso de participar aunque sea con la elección del tema que las chicas estaban bailando. Jamás en mi vida creí que Nina bailara de esa forma, se veía tan relajada y tranquila mientras lo hacía que mis ojos no se podía apartar de ella, era como si solo ella estuviera bailando, debo admitir que el taller de baile le había sentado bien, jamás imagine que podría moverse de esa manera, ojala también yo me hubiera inscrito en ese taller, por suerte podré verla bailar en esta semana

Lamentablemente la música paro y la coreografía termino, ella se veía un poco agitada, pero feliz, sonreí. Juli se puso de pie y como un papá orgulloso de su hija comenzó a aplaudir y a silbar, Nina se sonrojo y miro al suelo, se veía hermosa, Luna, Yam, Jazmín, Ramiro, Matteo y yo imitamos la acción de Juli y nos unimos a su aplauso, sin duda alguna había sido un show épico, lo recordaría el resto de mi vida, Nina se veía diferente, tranquila, feliz y me gustaba que se sintiera así, espero que esa hermosa sonrisa en su rostro no se borre jamás

– ¡Excelente chicas! – Dijo el profesor aplaudiendo – Eso es lo que quiero que hagan

– ¿Bailar sexy? – Pregunto Juli

– No exactamente – Dijo el profesor con una sonrisa – Lo que quiero que hagan es organizarse entre ustedes y preparar un número musical o una coreografía para presentarla en la semana, todos deben participar, pueden hacerlo en más de una ocasión – Todos nos miramos mientras algunos comenzaban a armar sus equipos – Mañana comenzamos con las presentaciones, cualquier cosa que necesiten pueden decirme y si no lo tenemos lo conseguiremos. Suerte

Todos comenzamos a pensar e idear nuestras actuaciones para estar listos, yo no sé bailar así que lo mejor iba a ser que comenzara a pensar en un tema musical, Matteo y yo quedamos en cantar una canción juntos, además como era de esperarse también cantaríamos con Juli y Ramiro, las chicas también comenzaron a organizarse y más pronto de lo planeado ya estábamos pensando en temas que quedaran bien con nuestro estilo, sin duda alguna esta semana sería muy interesante, espero que Nina vuelva a participar bailando porque realmente lo hace bien


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