Ambas estaban en el sofá, viendo una película y disfrutando de la compañía de la otra.
—Nat, tenemos que hablar —Floren tomó el control y pausó la película.
Miraba a su novia y la pelirroja intentaba no entrar en pánico.
—Está vez yo no hice nada —Floren negó. —Si, lo hiciste. Ahora Tony ni siquiera me mira, Nat —ella puso sus ojos en blanco y se volvió a centrar en su novia.— Es mi amigo y ahora ni siquiera me mira. —Siempre está coqueteando contigo.
Natasha se levantó enojada del sofá y aunque Floren le llamó más de una vez, decidió ignorar su petición y fue directo a su cuarto.
Mientras tanto Floren se quedó en el sofá, mirando la tele, tratando de poner su mente en orden.
Floren le daba vueltas al asunto, una y otra vez, sin respuesta alguna y sin ganas de seguir con las peleas.
—¿Floren? —Tony le dijo, estaba frente a ella y movía su mano frente a sus ojos. —Tony...creí que jamás me hablarías de nuevo —dijo con tristeza. —Lo siento, Nat da mucho miedo cuando está enojada —rió. —Lo sé, pero eres mi mejor amigo, no quiero que te alejes de mi —le sonrió y él hizo lo mismo.
Tony se sentó a su lado y comenzó a hablar con ella, eran amigos, muy buenos amigos, prácticamente confidentes, y eso era algo que Natasha no podía entender.
La pelirroja estaba a unos metros de la sala, escuchando su conversación, sus puños estaban cerrados y sus nudillos blancos debido a la presión. Se volvió a asomar, sentía hervir su sangre y decidió enfrentar lo que estaba pasando.
—¡Aléjate de ella! —gritó con rabia.
Tony y Floren la miraron, estaba roja y llena de ira, se acercó peligrosamente a Stark, levantó su puño y antes de darle el puñetazo, Floren la detuvo.
—¡Basta!, él es mi amigo, no puedes actuar así con todas las personas cercanas a mi —su mente se concentraba en detener el puño de su novia. —¡Estoy harta de esto! —gritó para después bajar su puño y salir de la sala.
Floren se quedó ahí con Tony, sus ojos se llenaron de lágrimas y el castaño la abrazó.
Las horas habían pasado y ninguna había hablado con la otra en toda la tarde.
Floren entró a la habitación, Nat estaba acostada jugando con su celular.
—Nat —Natasha la miro por algunos segundos y volvió a concentrarse en su celular. —¿Por qué no te vas con tu amigo? —dijo fría, Floren la miró y movió su cabeza de lado a lado. —Porqué te quiero a ti, él es solo un amigo, ¿cuándo vas a entender eso? —soltó con tristeza.
Floren miraba a Nat, sus ojos se habían cristalizado una vez más, suspiro con tristeza para después salir de la habitación.
El aire erizo la piel de Floren, recorría las calles aledañas a la torre en busca de un poco de paz, estaba devastada, amaba a Natasha, pero no podía dejar de tener amigos solo por que ella era demasiado celosa. —en una relación se necesita confianza, si no...no funciona— pensó.
Miro a su alrededor, todo estaba casi desierto, el sol ya se había escondido y la oscuridad reinaba la ciudad, el viento frió la hizo temblar, se dio la vuelta y caminaba de regreso a la torre, miraba sus pies.
No se percató de la presencia de ella, Natasha la miraba desde la esquina de la calle en donde estaba caminando, la mujer sintió como su corazón se achicaba al ver que su novia estaba llorando y limpiaba las lágrimas con ira, bajo la cabeza, analizando su comportamiento de los últimos días.
Con paso decidido se acercaba a Floren, quién debido al ruido de sus pisadas contra las hojas secas que se encontraban en el suelo, se percató de su presencia; se detuvo frente a ella y Floren sintió sus manos sudar y su corazón palpitar más fuerte.
—Lo siento, fui muy estúpida. Se que me quieres a mi, es solo que he perdido tantas cosas en la vida no creo que podría soportar perderte a ti —la tristeza en su voz había echo a Floren llorar incluso más. —Amor, no llores. —Natasha, te amo —dijo con cariño y acercándose a ella.
Sus brazos rodearon su cuello y luego la beso, sus carnosos labios la hacían volverse loca, sus lenguas se entrelazaban en un beso lleno de deseo y amor.
—Aún estaré celosa de cualquiera que se te acerque pero me controlaré más —aseguró divertida para después seguir besando a Floren. —Vamos a la torre —susurró en sus labios.
>>>
Ambas llegaron, subieron en el elevador y volvieron a besarse, sus manos recorrían el cuerpo de la otra por encima de la ropa.
Caminaron torpemente a su habitación, Natasha abrió la puerta y cerró con seguro.
—Eres hermosa —Floren le dijo antes de quitarle su chaqueta.
Sus manos se movían ágilmente al momento de quitarle la ropa a la pelirroja y por primera vez, Natasha ansió que Floren tomara el control.
Sus labios se volvían a juntar, ahora Nat quitaba la ropa de Floren, en segundos estaban desnudas frente a la otra, la lujuria iluminó sus ojos y el calor se sentía en toda la habitación.
Floren empujó a Natasha sobre la cama, se inclinó para besarla, sus labios se posaron sobre su cuello, su mano bajo hasta su sexo y comenzó a hacer círculos con sus dedos, sus labios recorrieron la clavícula de Nat, un gemido se escapó de su boca.
—No te detengas —Floren sonrió.
Metió uno de los pechos de Natasha en su boca, succionó un poco y después recorrió el pezón con su lengua. Dos dedos se introdujeron en Natasha y ella se aferró a las sábanas, Floren bajo e hizo que su novia separara más sus piernas, su lengua recorrió su clitoris mientras sus dedos entraban y salían de Nat. Movió su lengua más rápido y sus dedos también, sintió como las piernas de Nat se tensaron y en cuestión de segundos había llegado al orgasmo.
Espero a que su respiración se regularizará.
—Tu turno —dijo la pelirroja.
Atrajo a Floren a ella y comenzó a besarla, la puso debajo de ella y comenzó a recorrer su cuerpo con sus labios, de vez en vez la mordía y eso hacía que Floren se excitara aún más, la pelirroja hizo que los muslos de Floren quedaran en sus hombros y comenzó a besar su sexo.
Floren se retorcía de placer, sus manos estaban en la cabeza de Nat haciendo que se pegara más a ella, la lengua de Nat se introdujo un poco en ella y con sus dedos estimulaba su clitoris. Floren estrujo con sus manos la sábana de la cama, su novia le causaba un placer casi mortal, su respiración se hizo más fuerte, una capa de sudor cubría su cuerpo, poco a poco perdía la noción de si misma, sus piernas se tensaron, su sexo se contrajo y ella estalló en un ruidoso orgasmo.
Natasha se incorporó y la miró, la beso para después acostarse a su lado.
—Eres mía. —Soy tuya —aseguró, recargó su cabeza en el pecho de Nat— Te amo —acarició su abdomen y luego el espacio entre sus senos, sus dedos subieron hasta los carnosos labios de la mujer que amaba. —Te amo mucho más, Floren.— sonrió y sus ojos verdes se posaron en ella, sus labios se acercaron con lentitud, la beso, sellando esas palabras con un infinito cariño.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
🌠🌠🌠🌠🌠🌠🌠🌠🌠🌠🌠🌠🌠🌠🌠 Dedicado a: Floren_1811 espero que te guste. Gracias por leer, a todos 💓
