Marvel One Shots

Charles Xavier

Título: Run to you.
⚠️: Smut

La mansión por alguna razón se siente oscura y fría esta noche, estamos frente a frente con los ojos fijos en el otro.

—Charles —pronunció Mery con debilidad.
—Mery, yo...lo siento. Pero tengo que hablar con ella, vete, por favor —fue lo único que artículo el hombre antes de darle la espalda y cerrar la puerta en su cara.

Él se había ido, la había dejado, y se sentía tan estupida por haber creido que ella significaría algo para él, por creer que en esos meses ella lograría que se olvidara de esa mujer que hizo que no pensara con claridad, se sentía completamente desecha.

[Flashback]

—Apúrate. Tengo que ir con el grupo de estudio —Mery le decía a Charles mientras besaba su cuello.
—Está bien —abrió la puerta de su oficina.

Charles tomo a Mery de la cintura y la cargo, la pego contra la pared y ella envolvió sus piernas en su torso.

—Charles —gimoteó mientras el besaba su cuello y tocaba sus senos por encima de su suéter. Charles le quito ese suéter y por debajo de su playera tocaba su abdomen.
—Hola —escucharon por encima de sus agitadas respiraciones.

La puerta del baño de la oficina se cerró. Charles se detuvo y Mery bajo se su torso.

—Moira... —Charles dijo desconcertado. Mery recogió su suéter del suelo y se lo puso.
—¿Quien eres? —le preguntó Mery a la que hasta ese día era una desconocida.

Una cara completamente desconocida pero un nombre que sabía que estaba en la cabeza de él más de una vez durante en el día.

—Soy la novia y supongo que tú eres una de sus mejores estudiantes —pronunció con recelo y autosuficiencia.

[Fin Flashback]

Esa tarde todo había cambiado para ambos.
Mery esperaba que le dijera que ella era su novia, pero no fue así, en cambio la saco y dejo ir, como si no significará nada.

—Para ya de llorar —Erik le decía mientras pasaba una mano en su espalda.
—Como pudo ocultarme algo así —Mery estaba destrozada.
—No se habían visto en un año, supongo que pensó que todo había terminado.
—Pero me corrio de ahí, me saco de la oficina y me dijo "lo siento". Eso no cambia nada.
—Estoy seguro de que no quiso lastimarte. Tal vez solo están hablando...y ya sabes...terminando lo que para él termino hace mucho —Erik le dijo con voz comprensiva.
—No puedo. No puedo creerte. Si fuera así por qué me trataría como si no fuese nada. Estoy harta de ser la segunda opción de todos —Mery se levantó del sofá y salió.

Salió del departamento en busca de olvidarse de todo. De él. De lo que sentía.

[***]

El bar estaba a unos pocos kilómetros del departamento de Erik. Sus piernas le dolían y su cabeza también, sus poderes...ese "don" de poder escuchar los pensamientos de los demás y poder hacer que ellos hicieran lo que ella quisiera alguna veces parecía ser un salida nada común. Se acercó a un chico de tez blanca y ojos verdes, le sonrió, el hombre se paro y sin decir nada la tomo de la mano y la escoltó hasta el bar.

—Eres muy amable, pero ahora piérdete —el chico asintió y se perdió entre la multitud.

Mery entro y se sentó en la barra. Sentía como si su corazón estuviese en pedazos y el solo respirar le dolía. El bartender se acercó a ella.

—Un whisky, por favor —el hombre que era algo mayor asintió.

El fuerte líquido bajo por su garganta, un suspiro salió de su boca y las lágrimas amenazaron con salir. Sintió como se perdía en el abismo de su mente, sintió el dolor de cada recuerdo que ambos compartían, sintió como esos recuerdos hacían que su alma colapsara.

—Mery —susurraron a sus espaldas.

La voz era de él. Era él. Se giró.

—¿Que quieres? —dijo fría e indiferente.
—Podemos hablar, por favor —Mery sonrío.
—Ahora quieres hablar, eh. Porque no hablaste conmigo cuando ella estaba presente. Porque no le dijiste todo lo que me habías dicho a mi, por qué no me elegiste a mi —las lágrimas que no se había permitido derramar frente a el salieron, sus mejillas se mojaron.

Charles las limpio, se acercó a ella y la abrazo.
Mery no quería abrazarlo de vuelta pero su necesidad de él fue más intensa que su odio.

—Vamos afuera —Mery tomó el suéter que había dejado en la silla y ambos salieron del bar.

Charles la tenía tomada de la mano. Mery divisó el auto de Charles y ambos subieron a este.

—Lo siento. Lamento no haberte dado tu lugar, el lugar que te ganaste. Sé que fui un completo idiota. Pero tenía que aclarar todo.
—¡Aclarar! Ella no se merece explicaciones de lo qué haces o dejas de hacer. Porque según tu ya habían terminado —Mery estaba enojada, muy enojada.
—Porque para mí eso terminó hace mucho tiempo. Pero tenía que aclarar todo, Mery. No podía dejar que ella pensara mal de mí.
—Pero si dejaste que yo pensara mal de ti. Que ironía— Charles negó y se giró para tomar sus manos.
—No soy bueno en esto. Y es que tú me haces sentir muchas cosas al mismo tiempo. Eres la persona que llego a alegrar mis días, estoy seguro de que te amo. Estoy seguro de que quiero estar contigo...siempre.

Charles se acercó aún más y la beso, sus labios encajaban a la perfección. Mery sentía como todo lo que estaba mal en su vida se acomodaba y era todo gracias a él.

—Ahora déjame amarte, déjame demostrarte lo mucho que te amo.
—Sin importar lo que ha pasado, lo mucho que te odie por horas...aún correría hacia ti en cualquier situación —Mery susurró para volver a besar a Charles. Se separaron.

Charles le sonrió y saco las llaves de la bolsa de su pantalón y prendió el carro. Mientras la distancia entre el auto y la escuela se acortaba, ambos intercambiaron miradas, se sonreían. Se amaban.

Llegaron a la escuela y Charles se giró hacia ella.

—Te amo —pronunció con dulzura.

Mery le sonrió y cuando iba a contestar, Charles, la beso y la tomo de la cintura.

Las respiraciones de ambos se entrecortaron, Mery se quito su suéter, su playera también cayó en algún lado del vestíbulo. Charles la tomo entre sus brazos y la llevo a su oficina.

—Deberíamos terminar lo que empezamos —sonrió seductor y Mery lo beso con lujuria.

Entraron en la oficina, sus labios se unían por segundos mientras su ropa volaba en el aire y caía en algún lado de la habitación. Charles tiro las cosas que se encontraban en su escritorio y tomo a Mery de la cintura, la puso en este.

Sus labios recorrían el cuello de Mery, pronto se dirigió a sus senos, con sus pulgares recorría su espalda desnuda haciendo que ella se retorciera.

Charles entro en ella, mientras empujaba su miembro en las paredes de ella, el deseo se derramaba por su cuerpo, la intensidad pronto disminuyó y las caricias llenas de necesidad se hicieron presentes, sus labios se juntaban de vez en vez, sus manos recorrían el cuerpo del otro.

Y cuando por fin llegaron al climax, ambos susurraron el nombre del otro. Mientras se vestían de nuevo, Charles tomo a Mery del brazo, atrayéndola, sus brazos rodearon sus cintura, la abrazo y Mery podía sentir como cada una de las piezas de su corazón roto se ponían de nuevo juntas

—Te amo, Charles. Lamento haber reaccionado así, fue muy infantil, pero tengo miedo de perderte —Mery lloraba en su hombro.
—Jamás me perderás, soy tuyo —Charles se separo de ella y beso con dulzura sus labios.

Ese día había sido completamente fuera de lo normal, pero parecía que tenía razón de ser así, tenían que hacerse más unidos, tenían que saber que el otro los necesitaba, y así era. Ambos se necesitan y no planean dejar de hacerlo...nunca.

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Espero que este Shot te guste MeryWeasley .