Las manos del hombre se movían por las caderas de Emma mientras ella daba pequeños saltos sobre el, el sudor la cubría y sentía que llegaría al orgasmo en cualquier momento pero no fue así, la imagen de Tony llegó a su mente y cuando estaba a punto de tocar el cielo un sentimiento de perdida lleno sus sentidos.
—¡Si! —el hombre gritó debajo de ella y Emma solo se levantó de aquella posición. Se acosto a lado del rubio que acariciaba su pecho. —Te puedes ir —dijo seca y autoritaria. —Vamos a repetirlo, cariño —sus manos acariciaron el abdomen de ella y Emma tomó la mano de él con fuerza.— Auch. —He dicho que te vayas, Ryan.
Ryan la vio con ira pero aun cuando quería decirle mucho solo se dedicó a tomar su ropa del suelo y prácticamente corrió fuera de aquel departamento.
Emma se quedó ahí en la cama, sintiendo que moría por dentro, sudando frío, las lágrimas recorrieron su rostro. Y no sabía por qué hacía eso, no sabía por qué dejaba que el alcohol tomara el mando y la hiciera pedazos, solo quería sentir los brazos de Tony alrededor de ella.
Estaba sola, completamente sola. Volvió a tomar un vaso lleno de whisky con hielo de la mesita de noche y de un solo sorbo el líquido se había esfumado, pasó por su garganta quemando un poco; tomó una botella de Jack Daniel's y comenzó a tomar de ella, insistente como si el líquido en aquella botella fuera la cura de su depresión, como si con ella pudiese recordar el amor que Tony le brindaba.
Después de terminarse 2 botellas y a punto de ir por la tercera cayó al suelo, quería levantarse pero simplemente no pudo, se quedó ahí, muriendo por dentro.
—¿Emma? —preguntó una voz suave y distante— despierta, por favor —era Steve. —Lo siento mucho —Steve sonrió triste, no era la primera vez que la veía así.— Ya no estoy sobria —Steve asintió con tristeza en su rostro. —Vas a estar bien, tranquila —las lágrimas ya recorrían el rostro de la castaña, abrazo a su amigo y él la dejó llorar.
[***]
Emma tenía puestos unos lentes oscuros, miraba con cautela a sus compañeros sentados en las sillas a lado de ella.
Cuando se despertó por la mañana pensó que ella no sería requerida en la misión debido a su reciente recaída pero Nat le llamó y ella no pudo decir que no así que se puso lo mas casual que encontró y los lentes eran para cubrir heridas recientes, heridas de la noche anterior, pero no podía cubrir las heridas internas, esas que te hacen pedazos por dentro.
Rascaba su nuca nerviosa pues todos la miraban, ella sabía que lucia fatal, recordó la noche anterior. Había tenido una riña con un tipo que quería tener sexo pero ella no quería, su labio estaba roto y un moretón posaba en su mejilla, en ese momento pensó que su idea de los lentes había sido obsoleta; el tipo había quedado peor pero había dado buena pelea pues debido al alcohol sus sentidos se adormecían haciendo que pelear y defenderse no fuera tan fácil.
—¿Estas bien? —preguntó Clint. —Sí, no te preocupes —le dio una pequeña sonrisa a Clint y aunque eso no alivió las preocupaciones del castaño sólo se alejó. —Vengadores.
Tony entró sonriendo, no había visto a Emma pero cuando finalmente lo hizo la angustia y el dolor se hicieron presentes en su rostro.
—Emma —susurró.
Emma levantó la mirada y se quitó los lentes, su ojo estaba morado, le sonrió con tristeza. Después de algunos incómodos segundos Natasha tomó el mando y se acercó al centro de la sala.
—Lamento que estemos aquí, pero una de nosotros necesita ayuda —Natasha miraba a Emma quien derramaba pequeñas lágrimas.
No sabía lo perdida que estaba, no sabía que su vieja yo estaba en pedazos hasta que vio la cara de sus amigos, angustia y preocupación.
—Lo siento, ya no estoy sobria. Steve lamento usar tu departamento y dejar las bebidas derramadas en el piso. Ya hemos pasado por esto antes, prometo que buscaré ayuda —Steve solo asintió con dolor pues ella era muy importante para el. —Nosotros te ayudaremos, Emma —Tony habló mientras se acercaba a ella.
Emma se levantó con trabajo pues sus músculos le dolían pero no podía dejar que él se acercara, estaba segura de que si lo hacía ella se rompería incluso más de lo que ya estaba.
—Lo sé. Solo necesito descansar, me siento exhausta —dijo mientras caminaba a la salida de aquella oficina.
Se dirigió a su antigua habitación, lamentaba mucho lo que estaba haciendo pero lo hacía porqué se sentía sola. Y agradecía que sus amigos estuvieran ahí para ella, aunque parecía que eso no era suficiente.
[ 3 días después ]
Tony se había encargado de tirar cada rastro de alcohol en la torre. Emma se paseaba nerviosa por la sala de estar, la abstinencia de aquel líquido había hecho estragos en su persona en los últimos días, su piel estaba más pálida de lo normal y las ojeras en su rostro mostraban el cansancio de un cuerpo que se había empezado a descomponer poco a poco. Tony caminó hacia ella.
—Te ayudaremos —Tony dijo.
Se acercó mas a ella y después de mucho tiempo la abrazo, la sostenía con fuerza. No podía evitar amarla, no podía evitar sentirse culpable. Emma solo lloraba.
—Lo siento, amor, por los hombres que han dejado mi cama por la noche, por hacer el amor de la manera en que guarde para ti dentro de mi cabeza —Tony negó. —Todo va a salir bien, Emma. Lo siento, princesa, no estás sola —Emma había empezado a llorar. —No me dejes, no de nuevo.
Tony no pudo evitar derramar algunas lagrimas debido a la petición de la castaña, él la había dejado por que pensaba que su vida y la de ella diferían mucho, sentía que la estaba amarrando a él, así que la había dejado ir, pero en el fondo esa decisión lo había desecho por dentro.
—Por favor, no me dejes.
Tony tomó sus mejillas entre sus manos y la beso con delicadeza. Como una promesa que no sería rota de nuevo.
—Nunca, Emma —le sonrió— Te amo.
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🌸🌸🌸🌸🌸🌸🌸🌸🌸🌸🌸🌸🌸🌸🌸 Uno corto pero espero que les guste. Hacia mucho que no escribía con Tony hermoso perfecto Stark💕
P.d: Este shot está basado en la canción Sober de la talentosa y hermosa Demi Lovato.
