Marvel One Shots

Loki Odinson

Título: You're mine
⚠️: 🔥

La tarde caía sobre Asgard, el cielo era mágico y yo estaba a su lado sintiéndome la chica más afortunada de los 9 mundos pero la tristeza y angustia volvieron a reclamar territorio en mi mente.

Accid era un chica castaña, ojos cafés como ella supone son en su tierra de origen; ella estaba ahí gracias a Odín que la salvo de la banda que la había secuestrando para ser ayudante del coleccionista, Tivan. Se sentía eternamente agradecida pues sin él padre de todo ahora estaría en la miseria pura pero en cambio se encontraba en Asgard el mundo más hermoso de la mano del hombre que más amaba, Loki Odinson.

—Odín, está dispuesto a no encerrarte si... —Loki me interrumpió.
—¿Me estas pidiendo que me humille? —negué— No estoy dispuesto a hacer semejante acto, no me arrepiento de nada.
—No seas estupido, Odinson —Loki me miro con desprecio haciéndome sentir pequeña.
—¡Laufeyson!, no tengo nada que ver con ese hombre ni su estupido hijo, nada —evité  llorar pues nunca me había hablado de esa manera.
—Él te quiere, ambos. Y yo te amo —los ojos de él se posaron en algún punto del cielo.
—De ti lo creo, reina mía...pero de ellos nunca —bajé  la cabeza.

Los guardias se acercaron a nosotros. Loki tomó entre sus manos mis mejillas, me beso con necesidad y cariño.

—También te amo. Jamás lo olvides.

Le pusieron cadenas y se lo llevaron. Mientras Loki era casi arrastrado por los guardias intenté entrar en su mente, gracias a Odín podía leer y controlar mentes pero la de Loki era especialmente difícil en especial cuando estaba enojado, Loki me miro desde el final de pasillo y de alguna forma me pidió que parara, así lo hice.

[***]

Accid se encontraba en el suelo, la sangre había manchado su vestido y una tristeza se esparcía por su cuerpo. Frigga yacía en sus brazos.

—Mi niña, todo estará bien —Frigga habló con serenidad.

Odín le pidió a Accid que se apartara de la Reina. Rápidamente Thor tomó a su mejor amiga entre sus brazos y la apretó fuerte, las lágrimas también caían libres por el rostro del rubio.

—Déjame decirle —Accid se había apartado de Thor y miraba a Odín.
—Ahora no, Accid —ella asintió.

La noche llegó y ella se dirigía a las celdas. Camino por el largo pasillo hasta estar frente a la celda de Loki, este la miraba con el ceño fruncido.

—¿Qué quieres? —la frialdad de la frase la tomó por sorpresa.
—No tienes que fingir, no conmigo —su tono de voz era bajo.

La ilusión creada por Loki desapareció dejando ver a un Loki en el suelo sumamente lastimado, emocional y físicamente. El corazón de Accid se achicó a verlo así pues jamás lo había visto tan débil.

Entro a su mente para percatarse que esta vez la barrera usual no se encontraba, los recuerdos de Loki pasaban en su mente y la hicieron llorar, el dolor que él tenía en esos momentos era palpable.

—Vete —le pidió el azabache.
—No te dejaré —unos pasos se aproximaron a ellos. Thor.
—Y necesitamos tu ayuda, hermano.

[***]

El plan era loco, suicida. Loki estaba dispuesto a ayudar, no podía dejar de pensar que tenía un plan personal. Yo me encargué de cuidar a Jane que estaba muy delicada y débil.