—Eres muy hermosa —Charles dijo recorriendo tu figura. Gemiste ante el tacto cálido de sus manos en tu cuerpo semidesnudo. —Hazlo ya —pediste en tu mente y el sonrió. —Como órdenes, princesa —beso cortante tus labios.
Llegaron al orgasmo juntos, sus respiraciones se regularizaron y el se acosto a tu lado.
—Te amo, t/n —dijo mientras sonreía y dejaba su cabeza en tu pecho. —Te amo más, Charles —acariciaste su nuca.