Nos conocimos a destiempo,
pero nos enamoramos igual,
yo tenía 19,
tú algunos más,
yo no creía en el amor,
tú me hiciste creyente,
mi agnosticismo se esfumó.
Nos conocimos a destiempo,
nos encontramos
y era pronto para mí,
nos encontramos,
y era tarde para ti.
Yo tenía miedo de ti,
tú me enseñaste a creer,
yo tenía en la cabeza telarañas,
tú las deshiciste con tu piel.
Nos conocimos a destiempo,
y el reloj no ayudó,
el tuyo estaba atrasado,
el mío se adelantó.
Las circunstancias eran accidentes
accidentes sin parar,
las circunstancias no ayudaban,
eran como agujas en el mar.
Nos conocimos a destiempo,
y aún así, mis ojos alumbraron tu oscuridad,
y aún así, tus ojos se convirtieron en mi libertad.
Mi boca te inundaba,
tú boca me incendiaba,
y así duramos años, hasta hoy,
y sabemos que podríamos haber durado muchos más.
Yo yendo,
Tú viniendo,
tú dándome alas para volar,
yo dándote mis brazos para secar tu tempestad.
Nos conocimos a destiempo,
pero llevo tus palabras tatuadas en mí,
y tú llevas mi nombre grabado en ti,
llevamos el amor sin querer en cada paso,
y el amor sin querer nos lleva a contrapasos.
Nos conocimos a destiempo,
y entendí que aunque nuestro amor se desbordaba,
a veces el amor no es lo que falta,
a veces simplemente no es momento,
a veces no es un buen amigo el tiempo.
Nos conocimos a destiempo,
pero también dicen que todo tiene su lugar,
que todo pasa cuando tiene que pasar,
que todo pasa a tiempo,
y que así a destiempo,
era como tenía que pasar.
Y aunque a destiempo nos conocimos,
yo siempre te querré,
y aunque a destiempo nos conocimos,
sé que yo siempre te amaré.
ESTÁS LEYENDO
Cien maneras de romperse y volverse a armar. Poemario
PoetryLa vida nos rompe en más de cien maneras y cada uno tenemos que encontrar la forma de volvernos a armar, una y otra vez, todo el tiempo. Yo he encontrado la manera de hacerlo y es a través de las palabras. Porque escribir es la mejor manera de armar...