Perdona si te parezco cobarde, pero ya he sido demasiado valiente
y a veces la valentía también se cansa y quiere sentarse a descansar.
Te parecerá que últimamente aquí solo hay polvo,
pero déjame decirte que ahí donde tú ves polvo; estaba lleno de fuego,
tanto que me quemé.
Creerás que cuando más te acercas, yo más me alejo,
pero es que me es imposible abrirle la puerta a alguien más,
cuando aún hay restos de alguien que se sigue negando a irse.
Y tú tienes que saberlo: para llenarnos de amor,
primero hay que vaciarnos hasta quedar hechos polvo,
y yo me estoy vaciando hasta la mínima parte.
No es que no quiera querer;
es que en este momento solo hay polvo en mi ser
y he olvidado cómo hacerlo, he olvidado cómo querer.
Y siempre he creído que para querer bien,
primero debo quererme a mí y llenar de amor mi propia alma.
Y yo,
estoy dejando que el polvo me vacíe,
para después,
llenarme completamente de mí
y así, querer de nuevo querer.
ESTÁS LEYENDO
Cien maneras de romperse y volverse a armar. Poemario
PoetryLa vida nos rompe en más de cien maneras y cada uno tenemos que encontrar la forma de volvernos a armar, una y otra vez, todo el tiempo. Yo he encontrado la manera de hacerlo y es a través de las palabras. Porque escribir es la mejor manera de armar...