Hubo un día que me enamoré,
me enamoré tanto que me desconocí,
ya no era yo,
yo ya era alas y amor.Me enamoré,
me conocí realmente a mí,
me descubrí y me acepté,
y aquella vez fue la primera que volé.Me enamoré,
en sus brazos me sentí como un pájaro,
libre, volátil, frágil y real,
y a partir de ahí, no he querido dejarla de sentir,
porque sé que sin ella, yo no podría vivir.Me enamoré,
desde aquella vez nunca he dejado de estar enamorada,
ella me acompaña todo el tiempo,
no la puedo dejar,
es como una adicción,
la única adicción que no daña.Me enamoré,
y llevo su nombre grabado en mí,
la veo en las noches antes de dormir,
me sonríe, me canta y me arrulla,
y yo sé que ella siempre estará ahí.Me enamoré,
y es un amor un poco celoso,
a veces no se lleva bien con otros amores,
porque a veces no la entienden,
porque a veces la hacen sentir como si estuviera en una cárcel.Me enamoré,
como no lo he hecho nunca más,
supe lo que es tenerla
y sé que ya no podría perderla,
me enamoré tanto,
y ella está siempre,
aun sin pretender estar.Yo me enamoré de ti:
mi libertad.
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Cien maneras de romperse y volverse a armar. Poemario
PoetryLa vida nos rompe en más de cien maneras y cada uno tenemos que encontrar la forma de volvernos a armar, una y otra vez, todo el tiempo. Yo he encontrado la manera de hacerlo y es a través de las palabras. Porque escribir es la mejor manera de armar...