Cien maneras de romperse y volverse a armar. Poemario

Poema extra. Estoy triste y voy a llorar hasta extinguirme

Estoy triste y mis ojos han llorado durante horas,
están rojos, parecen dos hojas marchitas,
esta vez; la poesía no me salva, las palabras, las letras, los versos, hoy son nada.

Estoy triste y contemplo la vida,
y en el cielo, en la lluvia y en la calle,
solo hay silencio que abruma, solo hay frío que duele.

Estoy triste y hoy no quiero saber de nadie,
no quiero besos ni amores, no quiero amigos ni amantes.
¿Cómo tener espacio para eso si la tristeza me ocupa hasta los suspiros?

Estoy triste y recuerdo mi infancia,
sentada en el regazo de mi abuela,
consolándome en su pecho lleno de flores,
sonriéndole a mis demonios, haciéndolos desvanecerse.

Estoy triste y tengo miedo,
las tardes son grises y las madrugadas saben a muerte,
y lo peor es que creo que la muerte ya no me espanta.

Estoy triste y cansada,
me siento tan pequeña, tan deshecha, tan sin nada,
la poesía hoy me ama con tristeza,
me recuerda que soy tan vulnerable.

Estoy triste y el universo colapsa,
el sol no ha hecho fiestas, la tierra agoniza,
el mundo me cae encima quebrándome el alma.

Estoy triste y mi vida se va,
mi vida que hoy no siento mía; se va, se aleja y corre,
me deja conmigo misma; perdida, sin horizonte.
Le pregunto ¿a dónde vas? Y riendo no responde.

Estoy triste y soy egoísta,
solo me importa la tristeza que me envuelve,
no hay agradecimientos, no contemplo lo bueno de la vida,
hoy aquí, la tristeza me sumerge.

Estoy triste y no es por nadie,
es por todo, es por nada; porque a veces todo se va al carajo,
y medito, medito y respiro, y sonrío
pero nada sirve; las lágrimas parecen cascadas interminables.

Estoy triste y hoy, al menos hoy,
voy a llorar hasta extinguirme.