La humanidad es amenazada por una guerra, una en la que el vencedor tendrá en sus manos el destino de la raza humana.
Un enfrentamiento entre los que son capaces de controlar los elementos, y los que son inmunes a ellos. Controlley contra Cazadoras...
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Sigo sin sentir la complejidad de mis nuevas emociones y sentimientos. Puedo sentir sólo lo menos conveniente. ¿Es mera coincidencia para complicarme más la vida o alguien en algún otro lado decide qué es lo que me pasa?
Soy el faro de las desgracias, y no evitaría que los barcos un día decidieran dejar de venir o que los pocos que han decidido hacer una parada en mí, cierta fecha se fueran para no regresar ni aunque los amenacen.
Amo a Mike demasiado como para ser capaz de dejarlo fuera de todo esto; también a James e incluso no dudo en aislarme de Alex. Pero sé que hay alguien a quien no hubiera sido capaz de abandonar por mi propia voluntad, y esa persona indudablemente es Tyler, pero disfuncionalmente fue él quien se bloqueó a todo contacto agradable conmigo.
Hasta hoy me cuestiono... si habitara la posibilidad de cambiar algo en el pasado, en mi pasado, definitivamente lo haría. Me habría evitado el enfrentamiento con dos poderosos cazadores, porque convertirme en los cuatro elementos es la lija que más me ha manoseado furiosamente. Porque mayor que perderle a él, fue perderme a mí.
Desde ayer he estado pensando en que tal vez mi principal error fue actuar para mí y no para los demás; buscar el amor con más potencia que la que le puse a la salvación de toda mi raza y la de los humanos.
La gente común tiene el derecho y la obligación de velar por su propio bienestar; yo no, no soy común, nunca lo he sido ni lo seré. Me gustan mis habilidades, pero ellas son el tráiler que carga una caja llena de escombros y no es como que yo tenga súper fuerza.
Estuve tanto tiempo tratando de hallar armas que superaran el poder de los cazadores, pero dudo de la productividad de mis intentos, puesto que nunca encontré nada y es Víctor el que siempre estuvo al mando de esa tarea, no yo.
¿Cuál es mi papel en esta guerra? ¿Ser líder? Estoy completamente segura que no soy indispensable para Víctor, él perfectamente podría dirigir el ejército que él creó, yo sólo soy como la bandera, con nulo aporte. ¿Cuál pinche líder? Soy una adolescente con complejo de acostarme con cuantos chicos desee, un pesado problema de amor propio, y he perdido mi propósito, mis anhelos, mis aficiones.
Miguel ofreció la posibilidad de yo hacerme a un lado para no tener preocupaciones de nada, una clara muestra de lo indispensable que soy.
Mi vida es tan complicada en este momento. Mike, Victor y Miguel creen que debería aprender a valorarme, incluso el imbécil de Tyler lo creía. ¿Quién está mal aquí? ¿Ellos por creer? ¿O yo por no creer? Hacerme una preocupación más en este combate es absurdo, simplemente no hay razones lo suficientemente fuertes para sostener mi falsa importancia.
¡No hay por qué darme más preocupaciones que a los demás! No aporto más que preocupaciones, no entiendo sus ideales.
