08.

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- Está bien. - accedí a la petición de Jin y él, con una sonrisa, se acercó hasta quedar a unos centímetros de mi rostro. Sentí una corriente de electricidad recorrer mi columna por su cercanía y él se dio cuenta al instante, porque, en lugar de hacer lo que temía que hiciese, se dirigió a mi mejilla y depositó un beso suave y largo allí.

- Que te vaya bien, Em. - dijo al regresar a su asiento. - Te llamaré cuando termine de cenar con Jimin para ver si ya acabó tu reunión, ¿bien?

- Bien. - respondí imitando la sonrisa de Jin.


Él bajó del auto, lo rodeó y luego, abrió mi puerta. Me extendió una mano para que se la tomase y me ayude a bajar del vehículo, y cuando estuve de pie junto a él, volvió a besar mi mejilla.


- Te veo luego, bonita. - susurró en mi oído antes de subirse a su auto, de nuevo. Desde el asiento del piloto, se despidió con la mano y luego, se alejó calle abajo.


Suspiré cuando perdí de vista el vehículo de Jin, apreté el asa de mi bolso y me dirigí al edificio de PJE, la compañía que producía la serie de la que sería protagonista. Me identifiqué en la entrada y la recepcionista me indicó en qué piso se realizaría la reunión. Agradecí, me acerqué al ascensor y cuando estuve dentro, me recargué en la pared de este.

No podía dejar de pensar en Jin.

Las puertas se abrieron en el octavo piso y bajé del ascensor para comenzar a caminar por el lugar en busca de la sala de reuniones. Habían varias personas allí, yendo de un lado a otro, y aunque intentaba saludar a todos, eran demasiados.


- ¿Señorita Beckett? - me llamó una voz femenina desde la puerta de la que supuse era la sala de reuniones. Yo sentí y me acerqué a ella. - Perfecto. Soy Hye Moon, hemos estado hablando por mensajes de texto, ¿recuerda?

- Sí, claro. - respondí. Ella me había dado los datos de mi apartamento y mi agenda para esa semana. Era algo así como mi asistente.

- Annyeong haseyo. - saludó con una reverencia y acomodó sus lentes. Era muy tierna y no parecía haber una gran diferencia de edad entre ambas. - La reunión es aquí, sígame. - añadió mientras abría la puerta para mí. - Ya llegó Dae Hyun, el protagonista masculino, y algunos de los actores secundarios. Sería bueno que se presentara con ellos y conversaran para que se conozcan mejor.

- Claro, claro. - respondí, intentando seguirle el paso y concentrarme en todo lo que decía.

- Si necesita algo, no dude en escribirme. Me han asignado exclusivamente a usted para que le ayude a acostumbrarse a Seúl y le acompañe a todos lados. - asentí con una sonrisa, a pesar de que me sentía un tanto extraña por la formalidad con la que me hablaba.

- Gracias. - dije con una pequeña reverencia. - Oh, y si vamos a trabajar juntas, no necesitas usar tanto formalismo. Además, creo que tenemos la misma edad. - Hye rió.

- Soy del 96.

- Yo del 98. - dije. - Así que creo que la que debería usar honoríficos soy yo.

- Unnie, dime Unnie y estará bien. - ofreció ella, antes de que se nos acercara uno de los actores. - Dae Hyun-ssi, ella es Emma Beckett, su co-protagonista. - me volví hacia el joven y me limité a saludar con una reverencia. No había hecho tantas reverencias en años.

- Es un placer. - dijo el joven de camiseta blanca y saco azul oscuro. Dae Hyun era un joven extremadamente apuesto, típico de un actor de dramas coreanos, con una sonrisa encantadora, mirada profunda y misteriosa, y que te hacía sentir como una pequeña niña. - Al fin conozco a mi Seo Yeon. - añadió, refiriéndose a mi nombre en la serie, y al instante, tomó mi mano para besarla.


Ese chico era muy coqueto. Demasiado para mis nervios.


- Y yo al fin conozco a mi Chae Woon. - repliqué, intentando que mi voz no sonara temblorosa, pero se me hacía difícil con la mirada de Dae Hyun fija en mí.

- Déjame presentarte con el resto del reparto. - ofreció al extender su brazo para que lo tomara. Pero fue entonces cuando desperté y me di cuenta de la situación. Yo no quería ir por ese camino, no quería que Dae Hyun interpretara mal las cosas, menos cuando horas antes había estado tomando la mano de Jin y paseando de su brazo. Así que solo le dediqué una sonrisa, palmeé su brazo un par de veces y comencé a caminar hacia el grupo de actores que conversaban a unos metros de nosotros. Lo único que escuché de parte de Dae Hyun fue su risa detrás de mí, antes de alcanzarme y caminar a mi costado.

- Oh, ya llegó nuestra protagonista extranjera. - dijo una de las jóvenes actrices del grupo en cuanto me vio. - Emma Beckett, ¿verdad? - asentí. - ¿Sabes que eres nuestra maknae?

- No lo sabía. - respondí sorprendida. Eso quería decir que yo era la menor del grupo y la más propensa a las bromas de los mayores. - Espero que cuiden bien de mí y me enseñen mucho.

- Tenlo por seguro. - respondió Dae Hyun y me guió un ojo.


Ese iba a ser un año largo.

Take Me To Busan | BTSDonde viven las historias. Descúbrelo ahora