34.

201 23 1
                                    

Volteé hacia la puerta de la terraza muy lento, mientras le rogaba al cielo que no fuese Jin el que nos hubiese descubierto. Sentí el alma volver a mi cuerpo cuando fue el rostro de Taehyung el que vi. 


- TaeTae, por favor, no vayas a decir nada. - pidió Jimin. - No queremos que nadie lo sepa todavía.

- Eso quiere decir que ustedes dos... - Taehyung empezó a subir y bajar las cejas y tuve que desviar la mirada para no comenzar a reír. 

- Yah, Taehyung, ¿quieres morir? - amenazó Jimin, cuando me dejó ir, y nuestro amigo levantó los puños para intentar defenderse. 

- Entonces, no era coincidencia que los dos desapareciesen al mismo tiempo. - añadió antes de salir corriendo. 

- Tranquila, yo voy a hablar con él. - me dijo Jimin, mucho más tranquilo, y se acercó para besar el dorso de mi mano. 


Durante la cena, todos comimos juntos en la sala, a excepción de Jin, quien dijo sentirse mal y se quedó en su habitación. Fuera de eso, la pasamos bien y aunque me preocupaba el aplazar la inminente conversación con Jin, intenté concentrarme en el momento. 

La primera semana desde nuestro regreso a Busan transcurrió. Yo me vi inmersa en las grabaciones, una vez más, y Jimin tenía ensayos todos los días para preparar su siguiente comeback. Pero, de alguna forma, hacíamos que funcionara. Él iba a la compañía a recogerme cuando terminaba de grabar o yo lo encontraba en algún restaurante para comer algo antes de que terminara el día. 

Aún nadie sabía de nosotros, a excepción de Hye Moon, Dae Hyun y Taehyung, así que debíamos ser cautelosos cada vez que nos veíamos. Pero eso no me desanimaba, yo todavía seguía sintiéndome como una jovencita ilusionada con el chico que le gustaba. 

Cuando la semana acabó, BTS tenía una presentación programada a la que estaba invitada, por supuesto. Pero como no podíamos levantar sospechas, tenía que buscar un acompañante. El problema era que Hye Moon, mi única amiga cercana en Seúl, tenía una reunión en la compañía, y Mark estaba fuera del país, cumpliendo con su agenda de GOT7, así que solo había una última opción: Dae Hyun. 


- ¿Todos los americanos hacen cosas extrañas como esta? - preguntó Dae Hyun, mientras caminábamos por un pasillo largo dentro de auditorio en el que se haría la presentación. 

- Jimin oppa es coreano. - le recordé. 

- Yo creo que deberían ser sinceros y decírselo a Jin, Little Beckett. - dijo en un tono más serio y noté que se detuvo de imprevisto. Giré para poder verlo y noté que su rostro no mostraba otra cosa más que preocupación. - Mientras más tiempo pase y las cosas se tornen más serias entre ustedes, más le dolerá a Jin entenderlo y aceptarlo.

- Es solo que no quiero hacer sentir mal a Jin. - me excusé, aunque en el fondo sabía que era simple miedo a que las cosas, que parecían ir tan bien, tomasen otro rumbo. - Las cosas con él no fueron mal, pero no avanzaban. Tuvimos dos malentendidos fuertes porque pensó que yo estaba engañándolo y creo que eso no hizo más que...

- Desilusionarte. - completó mi oración, comprendiendo a lo que me refería, y me hizo una seña para que continuáramos avanzando. - Sabes que te tengo mucho aprecio, Little Beckett, y que en este tiempo que hemos estado trabajando juntos, he intentando aconsejarte y guiarte por un buen camino. Me agradaba que te sientas tan bien y que Jimin sepa como hacerte feliz día a día, pero también me preocupa Jin y lo que pasará cuando se entere. 


Medité en silencio en las cosas que dijo Dae Hyun. Sabía que él tenía razón con respecto a Jin, pero el miedo me impedía hacer algo. Jimin había logrado despertar en mí emociones que no creí que existiesen y me había hecho sentir la persona más bella y valiosa del mundo. No quería perderlo, no quería perder lo que teníamos, y en mi mente, el único resultado de hablar con Jin era caos. 

Todavía hecha un nudo, Dae Hyun y yo nos acomodamos en nuestros lugares. El staff de BTS nos había reservado espacios cerca del escenario, pero que estaban separados por barreras metálicas de las fans. 


- Es por protección. - dijo Dae Hyun mientras yo saludaba con la mano a unas chicas que, según me dijeron, eran también fans de GOT7 y me reconocían por las fotos con ellos. 


La mayoría de luces se apagó de un momento a otro y el grito de las fans hizo vibrar el estadio, las luces de los lightsticks blancos se podía ver por todo el lugar y en las pantallas del escenario se podían apreciar imágenes de las siluetas de los chicos. 


- Allí están. - me gritó al oído Dae Hyun y señaló el centro del escenario, donde una plataforma hacía aparecer a los 7 miembros de BTS. - ¿Ya reconociste a Shorty? - preguntó, intentando fastidiarme al usar el nombre en clave que Hye Moon y yo le habíamos puesto a Jimin, pero en ese momento, mis ojos y mi mente estaban completamente concentrados en el escenario. 


El intro de Not Today comenzó a escucharse por todo el lugar y vi a las fans comenzar a bailar al ritmo de la canción mientras movían animadas sus lightsticks. Al principio, Dae Hyun y yo manteníamos la compostura y el plan "soy famoso", pero al cabo de un rato, y en especial cuando cantaron Mic Drop, nos unimos al resto de fans para bailar con ellas y cantar. 

No había ido a muchos conciertos de K-Pop, pero ese había sido uno de mis favoritos, definitivamente. Los chicos cantaron muchas de mis canciones favoritas, mostraron coreografías impecables, hicieron bromas en el escenario e, incluso, luego de que Taehyung me viese, se acercaron lo más que pudieron a nosotros y nos saludaron. 


- Bien, no te lo voy a negar, sí me divertí. - comentó Dae Hyun mientras una joven del staff nos guiaba por los pasillos del auditorio. - ¿A dónde estamos yendo? 

- Creo que a los camerinos. - repliqué y me acerqué a la joven del staff para confirmarlo. 

- ¿Crees poder manejar la situación sola? 

- ¿Te vas? 

- Estoy un poco cansado, Little Beckett. - replicó y restregó sus ojos, quitando un poco el maquillaje que llevaba y dejando que viese parte de los círculos negros bajo ellos. - Me he estado sintiendo un poco mal últimamente y no puedo darme el lujo de enfermarme con los photoshoots y la etapa de promoción tan cerca. - asentí, lo entendía perfectamente. 

- Descansa, yo estaré bien. 

- Gracias, Little Beckett. - se acercó a darme un abrazo de despedida, sonrió y luego, lo vi alejarse en dirección contrario, rumbo a la salida. Mientras todavía observaba la silueta de mi amigo, escuché unos pasos venir detrás de mí a toda velocidad y segundos después, alguien tomó mi muñeca.

- ¡Tienes que venir conmigo, ahora! - giré hacia la persona que gritaba y vi el rostro de Taehyung. Pensé en saludarlo, como siempre lo hacía, pero al ver la preocupación en su rostro y la prisa que llevaba, supe que no era momento para eso.

- ¿Qué pasó? 

- Jimin hyung y Jin hyung están peleando en el camerino. 



Take Me To Busan | BTSDonde viven las historias. Descúbrelo ahora