Take Me To Busan | BTS

26.

Luego de esa noche tan extraña con Jimin y que, gracias a lo que había conversado con Mark, había terminado bien, decidí continuar e ignorar el tema. Pero por mucho que lo intentaba, me era difícil olvidar el rostro triste de Jimin y la forma en la que se había ido sin darme oportunidad de arreglar las cosas. 

El tiempo, que no espera a nadie, pasó. Mi relación con Jin no cambió, pero tampoco avanzó. La razón era que mi tiempo libre se había vuelto casi nulo; Hae Ra había tenido un accidente mientras grabábamos una escena en patineta y se había fracturado el brazo, así que habíamos tenido que cambiar algunas cosas en el guión y con ello, volver a grabar algunos capítulos. Pero, Hae Ra era una de los personajes principales, por lo que no podíamos avanzar mucho sin ella. Así que, luego de intentar de todo por un par de días, la producción decidió suspender las grabaciones una semana, para que nuestra compañera descansara un poco y se tomaran decisiones sobre su personaje. 

Era perfecto. Necesitaba tanto un descanso, a pesar de estar acostumbrada a la sobrecarga de trabajo, y estar encantada del ambiente y las personas con las que compartía escena. Debía admitir que una parte de mí deseaba unas horas libres para visitar a Mark y los chicos de Got7, o a Jin y los chicos de BTS. 

Los chicos de BTS. Jimin. 

Fuck. Siempre me desanimaba cuando lo recordaba. Jimin había cumplido al pie de la letra lo que había dicho. No había sabido nada de él desde aquella noche y ello me preocupaba.

- Americano para la señorita Ceño Fruncido. - bromeó Dae Hyun en cuanto se sentó frente a mí en la mesa. - Siempre tomas esto cuando no estás de buen humor o cuando verdaderamente, necesitas despertar. - asentí, era cierto. - ¿Sigues así por Jimin? - al instante, cubrí su boca y volteé a ver a todos lados para asegurarme que nadie en esa pequeña cafetería nos hubiese escuchado. 

- Dile Shorty, oppa, sí lo lamamos Hye Moon y yo. - Dae Hyun rió cuando le quité las manos de la boca.

- ¿Eso quiere decir que ustedes hablan mucho de él? - no supe qué responder. - ¿Estás segura que no te pasa nada con él? 

- Estás viendo muchos dramas, Dae Hyun oppa. - me excusé antes de darle un sorbo a mi café y, felizmente, antes de que él pudiese responder algo, una joven se nos acercó. 

- ¿Dae Hyun-ssi? - tanto mi amigo como yo, volteamos hacia la joven, y mientras Dae Hyun pareció reconocerla al instante, yo me quedé viéndola por un buen rato, intentando recordarla de algún lado. 

- Kyung Mi-ssi, que sorpresa encontrarte aquí. - le saludó Dae Hyun con una reverencia antes de señaladme y que la mirada de la joven recayera sobre mí. - Te presento a...

- Emma-ssi. - chilló emocionada, haciendo que de un saltito en mi sitio. Era la primera persona que me hablaba con tanta confianza, cuando a penas nos habíamos conocido. - La americana que causa revuelo en Seúl. - me volví hacia Dae Hyun, buscando respuestas, pero él solo se encogió de hombros. - Conozco a los chicos de BTS y vi tus fotos con Jimin. - explicó y entonces, todo pareció cobrar sentido.

- Ah, eso. - asentí. - No se debe confiar en todo lo que se ve en esas revistas. 

- ¿Como el hecho de que ustedes dos están saliendo? - me volví hacia Dae Hyun y ambos reímos. 

Desde que la compañía había revelado algunos nombres de los actores, la gente había comenzado a sacar conclusiones equivocadas de lo cercanos que nos habíamos vuelto Dae Hyun y yo. Era de esperarse, especialmente porque en la pantalla éramos pareja. 

- Yah, Kyung Mi-ssi, eres muy crédula. - le dijo Dae Hyun. 

- Dae Hyun oppa y yo somos tan unidos como lo soy con los oppas de GOT7 y de BTS.-  expliqué, aunque no tenía por qué hacerlo. Yo todavía mantenía una sonrisa en el rostro, pero Kyung Mi cambió su expresión por una neutral y se apoyó en la mesa para inclinarse un poco a mí. 

- No eres novia de alguno de ellos, ¿o sí? - preguntó usando un tono de voz que intentaba cubrir su preocupación, lo que pude confirmar al alejarme de ella para ver sus ojos. - No eres novia de Jimin-ssi, ¿verdad?

Ella escondía algo. No era solo una amiga de BTS intentando proteger a sus amigos, ella , probablemente, ni siquiera era amiga de ellos. 

- ¿Por qué no se lo preguntas directamente a Jimin oppa? - repliqué, remarcando excesivamente el honorífico que demostraba la confianza que tenía con el joven, antes de ponerme de pie. La joven solo atinó a retroceder, sorprendida por mi acción. - Dae Hyun oppa, necesito ir a hacer esa cosa de la que te hablé. ¿Me acompañas? 

- Sí, claro, esa cosa. - se unió a mi mentira al instante. - Lo lamento, Kyung Mi-ssi, te veré en algún otro momento. 

La conversación con Kyung Min me había dejado una sensación extraña y aunque Dae Hyun me dijo que lo olvidara, no podía. Aún luego de que mi co protagonista me dejara en mi edificio, no podía sacar el recuerdo de mi mente. 

Presioné el botón de mi piso para que el ascensor me llevara y me recargué en la fría pared de metal mientras esperaba. Aproveché en sacar mis llaves del bolso y cuando las puertas se abrieron, iba tan distraída buscando mi celular en mi bolso que no me di cuenta que había alguien en el pasillo. Pero esa persona sí se dio cuenta y me sostuvo por los brazos para evitar que chocáramos. En cuanto sentí su tacto, levanté la mirada para ver de quién se trataba y juro que si no fuese porque él me sostenía, hubiese caído al suelo. 

- ¿Ji... Ji...? - balbuceé. 

- Hola, Emma-ssi.