S2. 18.

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Cerré los ojos con fuerza, temiendo lo peor. Ni Mark, ni Hye Moon, ni Yoongi, habían logrado llegar a tiempo.

Jimin. En esa fracción de segundo, pensé en lo devastado que estaría si se enterase lo que Kyung Mi quería hacer conmigo. Y también, pensé en todo lo que me hubiese gustado hacer en el futuro con él.

De verdad, ¿era ese el final? ¿De esa forma terminaría mi vida?


- Despídete, Emma. - escuché a Kyung Mi y al instante, sentí la punta de su navaja cortar parte de mi piel. - Jimin es mío. - añadió y, por alguna razón, abrí los ojos. Vi como alejaba la navaja de mí y aproveché para intentar alejarme, pero era inútil, detrás de mi estaba el tocador y Kyung Mi se había posicionado de tal forma que no me dejaba escapatoria.


Ese no podía ser el final. Me negaba a que fuese así.


- Kyung Mi. - balbuceé con la respiración acelerada y agarré con fuerza su brazo. - ¡No hagas esto, Kyung Mi! - grité con todas mis fuerzas, esperando que alguien me escuchara, y entonces, ambas comenzamos a forcejear por el control de la navaja.


Kyung Mi me empujaba contra el tocador, haciendo que mi espalda se golpeara fuertemente, pero a pesar del dolor que eso me causaba, no me rendía. Con ambas manos empujaba su brazo lejos de mi cuerpo y ella, con su brazo libre, tiraba de mi cabello para que la soltara.


- ¡Kyung Mi-ah, ya basta! - grité una vez más, con tal fuerza que mi garganta dolió.

- ¡Déjame! - vociferó, completamente descontrolada. - ¡Esto no va a acabar hasta que tú desaparezcas! - añadió antes de tirar de mi cabello con tal fuerza que hizo que me golpeara contra el espejo del tocador.


Aquello me hizo ceder y caí al suelo, sujetando mi cabeza adolorida. Kyung Mi se arrodilló frente a mí y apuntó su navaja hacia mi, una vez más. Quería hacer algo, quería seguir luchando, pero mi cabeza dolía demasiado y el golpe me había dejado mareada.

Vi a Kyung Mi sonreír complacida y quise borrársela de una cachetada.


- Ahora sí, despídete. - dijo ella con un tono frío, casi inhumano.


Levanté la mirada hacia ella, quité el cabello de mi rostro y levanté el mentón. No me iba a humillar frente a ella, no frente a la persona más vil del planeta.


- Púdrete. - repliqué.


Kyung Mi rió y acercó su navaja una vez más, pero en esa ocasión, no llegué a sentir el frío de esta, porque Kyung Mi salió disparada hacia atrás.

Parpadeé un par de veces para asegurarme que no fuese una ilusión y efectivamente, la vi en el suelo, con ambas manos en su cabeza, y a su costado, mis salvadores: Mark y Yoongi.

Yoongi se encargó de quitarle la navaja a Kyung Mi y de sostenerla fuertemente para que no pudiese escapar. Mark fue quien se acercó a mí para revisar que no tuviese mayor daño. Vi sus ojos aterrorizados recorrer mi rostro, mi cuello y el resto de mi cuerpo en busca de heridas. Cuando notó el corte en mi cuello, alcanzó un pañuelo del tocador y se apresuró a hacer presión para que no continuara sangrando.


- Hye Moon ya viene con un doctor. - me dijo, sin soltar mi cuello. - Em, no sabes lo asustado que estaba. Pensé que no te encontraría a salvo aquí. - añadió y por su tono de voz, supe que tenía ganas de llorar.

- Estoy bien. - le aseguré, aunque mi cuerpo gritaba de dolor. - No pudo completar su plan.

- Está loca. - replicó Mark, lo suficientemente fuerte para que Kyung Mi escuchara y comenzar a darle batalla a Yoongi.

- ¡Yah, quédate quieta! - vociferó el miembro de BTS. - ¡Si sigues así, voy a olvidarme que eres mujer! - añadió enojado, antes de dirigir la mirada a mí. - ¿Estás bien? - me preguntó y solo asentí a modo de respuesta.

- Avisaré que se cancela su presentación para que...

- No. - interrumpí a Mark, quien se quedó viéndome con los ojos abiertos de par en par.

- Te acaban de atacar, Em, no vas a...

- Eso es lo que ella quiere. - expliqué con asco. - Yo no voy a permitírselo, Mark, no voy a dejar que arruine este día, ni para mí, ni para Jackson, ni para Yoongi.

- Em, hazle caso a Mark-ssi, yo también creo que deberías descansar. - insistió Yoongi, pero yo negué con la cabeza.

- Que un doctor cure mi herida y la vende, que alguien de vestuario me de algo para cubrirla y luego, saldremos a dar esa presentación. - pedí decidida y a pesar de que Mark quería evitarlo, me puse en pie. - Esta presentación no la vamos a perder.


Se hizo tal y como pedí. Hye Moon llegó con un doctor que me limpió y vendó el corte en el cuello, una chica de vestuario cambio mi blusa con abertura por una de cuello alto y le añadió accesorios para hacerlo ver mejor, y aunque con muchos minutos de retraso, Yoongi, Jackson y yo nos posicionamos a un costado del escenario para esperar nuestra señal.


- ¿Estás segura de esto? - preguntó Jackson. - No tienes que hacerlo, Em, habrán otras oportunidades.

- Lo voy a hacer. - respondí decidida y apreté su mano con la mía. - Pero antes de salir, quiero darles las gracias por haber confiado en mí desde el inicio.

- Tienes talento, Em. - dijo Yoongi. - Solo necesitabas que alguien te diese un empujón.

- Aún así, no podría estar parada aquí sin ustedes. - repliqué. - Gracias, oppas. - logré añadir antes de que una joven del staff se nos acercara para decirnos que entráramos al escenario y tomáramos nuestras posiciones.


Los tres entramos a paso decidido y nos colocamos tal y como habíamos ensayado por semanas. Vi los lighsticks verdes y blancos de las fans de GOT7 y de BTS, iluminando la oscuridad del auditorio, y cuando los reflectores se encendieron para iluminarnos, escuché perfectamente los gritos de todos los presentes.

La música comenzó, lenta al inicio y escalando poco a poco hasta llegar a ser una explosión total. Yoongi, Jackson y yo bailábamos la coreografía que Jimin nos había ayudado a armar y cantábamos cada verso que habíamos escrito durante esas largas sesiones en el estudio.

En ese momento, el dolor por la pelea con Kyung Mi pareció esfumarse y solo me concentré en la presentación. Las fans adoraban la canción y lo demostraban al corear ciertos versos y al gritar nuestros nombres en determinados momentos. Esa era una sensación diferente a todo lo que podía haber sentido como actriz y aunque no estaba segura si me dedicaría a la música, decidí disfrutar de cada pequeño detalle.

Take Me To Busan | BTSDonde viven las historias. Descúbrelo ahora