La charla entre Krist y Dave era fluida como de costumbre. Podían hablar de cualquier cosa y se entendían en todo, pero para el baterista era cada vez más incómodo por el hecho de que sus sentimientos eran un lío. Le agradaba tener la compañía de Krist y estaba agradecido de tener un amigo como él, pero no sabía si lo quería como a un amigo o como algo más. Dave quería sacarse la duda, así que en un momento de silencio tomó valor para hablar sobre el tema:
—Krist, ¿tú saldrías con un hombre?—el volumen de su voz fue bajando a medida que largaba la pregunta. El alto pensó su respuesta durante unos segundos, lo que ponía más y más nervioso al baterista que jugaba con sus dedos mientras tanto.
—Depende.—soltó y Dave arqueó una ceja.
—¿Depende de qué?
—Y de quién sea el hombre.—aclaró Krist con una sonrisa.—Por ejemplo, si Brad Pitt dice que le parezco atractivo, apenas lo dejo terminar la oración que ya lo tengo en mi cama.—bromeó pero Dave se quedó serio.
—Y si fueras gay...—pensó unos segundos la pregunta, analizando palabra por palabra.—¿Tendrías el valor de decirlo?—el bajista entrecerró sus ojos y miró dudoso a Dave. No comprendía a qué quería llegar con todo esto.
—No lo sé, ¿por qué preguntas?—el alto se cruzó de brazos y eso intimidó un poco a su amigo que se encogió de hombros, como si fuera una tortuga intentando esconderse del peligro en su caparazón.
—Quiero saberlo y ya.—susurró y volvió a mirar a Krist.—¿Lo dirías?—volvió a preguntar y el bajista esta vez se dignó a responder.
—Pues...—el alto fue interrumpido cuando Courtney apareció en el salón, despeinada debido a la siesta que se había tomado.
—Esa cama si que es cómoda.—dijo sonriente sentándose en el sofá a un lado de Dave.
—Se nota, dormiste un buen rato.—bromeó éste provocando una pequeña risa de parte de sus dos compañeros.
—Estaba cansada, perdón.—la rubia bebió un trago de la cerveza de la que Kurt había estado bebiendo minutos atrás, causando unas miradas de disgusto en Krist y Dave.
—Courtney...—el bajista frunció el ceño y pensó en una forma gentil de preguntarle.—Si estás embarazada, ¿no se supone que no debes beber alcohol?—la rubia largó una risa y llevó su dedo índice a sus labios, haciendo seña de que guardara silencio.
—Shh, esto queda entre nosotros.—soltó despreocupada, volviendo a tomar un trago de cerveza. Krist y Dave sólo intercambiaron miradas y guardaron silencio.—Por cierto, ¿dónde está mi novio ahora?
—Fue a tomar aire fresco.—respondieron al unísono los dos miembros de Nirvana.
*****
—Imbécil, ¿qué mierda haces? Sueltame ya.—ordenaba el rubio mientras intentaba zafarse de Axl, que aún mantenía sus manos en el borde de la camisa y lo acorralaba contra la pared del ascensor.
—Estoy harto de tu actitud, Cobain. Ya no soporto que andes diciendo estupideces sobre mí, ni que andes ensuciando a mi banda.
—No son estupideces, es la verdad.—respondió Kurt tranquilamente y el pelirrojo soltó su agarre. El ojiazul en forma de burla limpió su camisa, como si hubiera sido ensuciada por el simple roce de Axl Rose.—Y por cierto, tu banda es una mierda.
—Eres un idiota. Mira lo que me hiciste...—señaló su nariz que hoy mismo había sido golpeada por Kurt. Aún seguía un poco hinchada.—Duele muchísimo aunque no lo creas.
—Deja de quejarte por una vez en tu vida.—el rubio rodó sus ojos, cansado por la actitud infantil que Axl tenía.—Si quieres estar a mano, golpeame ahora. Aún nos faltan varios pisos para llegar abajo.—el pelirrojo apretó su puño y lentamente lo levantó hasta quedar a la altura de su rostro, pero lo aflojó al cabo de unos segundos, causando sorpresa en el ojiazul.—¿Qué haces? Golpeame.
Para Kurt era sencillo decirlo, porque un golpe no iba a cambiar en nada el pensamiento que tenía, además de que ya había soportado dolores peores como los de su estómago, por ejemplo. Pero Axl no quería golpearlo, porque respetaba al rubio, aunque su relación fuera difícil. Él creía que tenían oportunidad de arreglar sus asuntos y ser amigos en el futuro, o tal vez algo más como Axl deseaba.
—No lo haré.
—¿Por qué no?
—No quiero lastimarte.—soltó en voz casi inaudible el pelirrojo, retrocediendo unos pasos, avergonzado por la situación.
—Me han golpeado otras veces, no te creas especial, Rose.—bromeó Kurt pero volvió a un semblante serio al notar que Axl sólo lo observaba triste.—¿Qué mierda te sucede?
<<Me gustas, eso sucede.>> pensaba Axl para sus adentros. Ojalá fuera sencillo expresar sus sentimientos, pero fue lastimado muchas veces. Había perdido demasiado en su vida y ya no confiaba demasiado en la gente. Ocultaba sus sentimientos porque para él esa era la única forma de no resultar herido.
—No me pasa nada.—respondió serio mirando a los ojos azules de Kurt, que cada vez que los veía más hermosos le parecían. El rubio iba a responderle, pero las puertas del ascensor se abrieron y Axl se apresuró a salir de éste, siendo detenido en el intento por la mano de Kurt en su muñeca.—Déjame ir.
—Dime qué te sucede. No eres el Axl Rose que yo conozco.—preguntó el ojiazul con su mano aún haciendo contacto en la piel del pelirrojo.
—Tal vez porque tú no sabes cómo es el verdadero Axl Rose.—se zafó del agarre bruscamente y le dedicó una mirada llena tristeza al rubio. Esto le dolía más que nada a Axl: ser juzgado por algo que no era.—Si de verdad me conocieras, si conocieras mi historia, tal vez tendrías otra imagen de mí. Aunque tal vez eso es mi culpa, ¿sabes? Porque nunca quise mostrarme como realmente era, me asustaba hacerlo y ahora me arrepiento de eso.
—¿Crees que si te conociera lo suficiente podrías caerme bien?—preguntó Kurt elevando ambas cejas incrédulo.
—Así es.
—¿Entonces por qué no me muestras quién eres realmente?
—Te daría vergüenza y asco saber quién soy.
Axl se sentía sucio por dentro, usado y maltratado. Su infancia era una etapa oscura de su vida, marcada por los abusos que recibía por parte de su padrastro. Se daba asco a sí mismo cuando se veía en el espejo porque no entendía cómo podía permitir que eso lo siguiera atormentando, pero era algo que no podía olvidar y que lo perseguía a toda hora. Incluso cuando su novia Stephanie lo dejó, volvió a sentir la misma angustia que cuando era joven porque, otra vez, había sido utilizado y arrojado a la basura como si de un pañuelo descartable se tratara.
—¿Por qué piensas eso?—ahora Kurt miraba al pelirrojo atento, esperando a escuchar su explicación, pero éste sin ninguna expresión en rostro, comenzó a caminar en dirección contraria al rubio.—¿A dónde vas?—preguntó caminando detrás de él a través del recibidor del hotel, pero se frenó en seco cuando lo vió salir por la puerta sin responder a su duda: ¿quién era Axl Rose?
voten y comenten si les gustó
ESTÁS LEYENDO
Get in the ring «Nirvana+GN'R»
Lãng mạn¿La fama y el orgullo son más importantes que revelar la verdad detrás de esta gran rivalidad? «Las mentiras impresas comienzan la controversia.» ✨#1 en Kurt Cobain (26/05/2018). ✨#1 en Nirvana (31/05/2018). ✨#1 en Dave Grohl (21/05/2020). ✨#1 en Kr...