Get in the ring «Nirvana+GN'R»

Capítulo 71

El corazón del pelirrojo empezó a latir con fuerza, parecía que en cuestión de segundos iba a escaparse de su cuerpo, el cuál temblaba como una hoja ante la fuerte brisa. Quería levantarse de su lugar y acercarse a Kurt, agitarlo por sus hombros y exigirle una explicación al respecto, pero no podía moverse, se había quedado paralizado en el asiento aún sin poder asimilar las palabras que había escuchado.

—¿Q-qué quieres d-decir c-con es-so?—preguntó, apretando sus puños con fuerza y resistiendo el mar de lágrimas que estaba al borde de caer por sus ojos.

—Quiero decir que lo vi todo, Axl... Todo.—repitió el rubio, limpiando sus húmedas mejillas con las mangas de su camisa.—Cuando Slash llegó a tu hogar, cuando te desvistió, cuando te hizo todas esas cosas que tú no deseabas, todo. 

El cuerpo del cantante reaccionó y como un resorte se levanto de su lugar. El rubio retrocedió unos cuántos centímetros al notar el cambio que hubo en su amante en cuestión de segundos, se lo veía furioso, tomando su cabeza con ambas manos y apretando su mandíbula tan fuerte que parecía que sus dientes se iban a partir en cualquier momento. Jamás había visto a Axl de esta forma. Parecía que aquél chico débil, con magullones en su cuello y lágrimas en sus ojos que apareció en la puerta de su departamento cuando se fue de la banda había desaparecido, dejando a un hombre casi muerto y vacío por dentro de no ser por el dolor que todas las personas en las que él confiaba le habían causado. 

—¿Por qué...?—murmuró, moviendo su cabeza de un lado a otro sin poder asimilar lo que estaba sucediendo, que la persona que él tanto amaba le había mentido en su cara durante tanto tiempo.—¿Por q-qué no hiciste n-nada? 

Kurt no sabía qué decir, tenía las palabras en su cabeza pero no sabía cómo formular una oración coherente. Estaba seguro de que al abrir su boca sólo iba a lastimar aún más a Axl, pero de todas formas él merecía saber la verdad aunque el costo sea alejarse de él para siempre.

—No hice nada, porque sentí que no podía hacer nada.—soltó finalmente, mientras el pelirrojo lo miraba con sus ojos cristalizados y se abrazaba a sí mismo en un fallido intento de sentirse reconfortado al oír todo esto. Antes eran los brazos de Kurt a su alrededor de su cuerpo los que lo reconfortaban al sentirse mal, pero ahora estaba solo, al fin y al cabo siempre había estado solo.—Fueron segundos en los que mi cuerpo parecía no reaccionar...—el rubio siguió hablando, intentando resistir el llanto y el dolor que tenía en su interior.—Tenía miedo y no pude hacer nada para ayudarte, Axl. Y lo siento, lo siento más que nada en el mundo y sé que al decir eso no puedo reparar ni la mitad del daño que te han hecho... Que yo te he hecho.

Las lágrimas caían por las mejillas del pelirrojo sin parar, mientras este negaba con la cabeza una y otra vez al escuchar las palabras de Kurt. De todas las personas que le habían fallado, él era la única de la que jamás se lo habría esperado, era como un puñal clavado por la espalda.

—No quiero escucharte más.—susurró.—Ya no quiero escucharte, ya no, ya no...—repetía una y otra vez.

—¿Y no me quieres ver tampoco?—preguntó el rubio, que de todas formas conocía la posible respuesta que iba a obtener.

Axl negó con su cabeza y volvió a sentarse en el banco frente al piano, tomando su estómago con ambos brazos y con su cabeza gacha, ocultando su rostro húmedo por las lágrimas de aquella persona que tanto llegó a amar.

—No sé ni para qué viniste en primer en lugar.—contestó fríamente, sin levantar su vista.

—Ya no podía guardarme este secreto, no podía hacerlo sabiendo el dolor que era para ti, Axl.

El pelirrojo se levantó de su lugar nuevamente y con toda la fuerza contenida en su interior pateó el banquito, haciéndolo trizas cuando este voló y chocó contra la pared del estudio.

—¡¿Y CREÍSTE QUE ERA MEJOR VENIR Y ESCUPIRMELO EN LA MALDITA CARA, EH?!—se acercó a pocos centímetros de Kurt, para observarlo a los ojos una vez más antes de desaparecer de la vida de este para siempre.

—Era lo correcto, Axl.—contestó este con calma, sus ojos nuevamente estaban cristalizados.

—¿Lo correcto para quién, maldita sea? ¿Para ti? ¿Qué ganas tú con todo esto? ¿Acaso no fue suficiente verme cuando Slash me sacaba de mi maldita casa y me desnudaba como a una prostituta? Dime.—escupió Axl, dándole un pequeño empujón al rubio.—¿Lo disfrutaste?

El líder de Nirvana negó con su cabeza, dolido porque la relación entre ellos acabara de esta forma.

—Lo que yo disfruté fueron todos estos meses que estuvimos juntos, besándonos, recostados en mi cama y escuchando viejas canciones. Quiero que en unos años recuerdes que a pesar de todos los errores, las cosas malas que hiciste en tu vida y el infierno que has atravesado, hubo una persona que realmente te apreció y que vio todo lo bueno que tenías para dar.

—Si no hubieras mentido, tal vez estaríamos viviendo un cuento de hadas.—soltó Axl, riendo de mala gana, mientras limpiaba una solitaria lágrima que rodaba por su mejilla.—Sólo vete, Kurt. No quiero volver a verte.

—Me iré, si.—el rubio asintió.—Pero yo sólo quiero que sepas que todo esto que te dije ahora es para que entres en razón, Axl Rose. 

—¿A qué mierda te refieres?

—Yo quiero que recuerdes porqué no debes estar aquí con ellos, aunque me odies en el intento. Las giras, el dinero, nada de eso vale la pena. Toda la mierda en la que te convertiste fue en gran parte gracias a ellos, pero tú los defiendes y quieres volver a la banda a fingir que nada pasó.—a pesar de todo el amor que guardaba en su interior por el pelirrojo, Kurt de verdad sentía pena por él y por todo en lo que se había convertido, al punto de que ya no le importaba herirlo más con tal de que abra los ojos y vea la clase de personas que tenía a su alrededor.—Yo prefiero morir solo antes de rodearme con amigos como los tuyos. Esos ni siquiera son amigos, sólo se aprovechan de ti, Axl. 

El pelirrojo no dijo una palabra al respecto, sólo lloraba en silencio mientras veía a la única persona que de verdad amaba caminar a la salida y desaparecer para siempre de su vida.

Y cuando pensaba que todo este rato había estado solo junto a Kurt, sus compañeros de Guns N' Roses aparecieron en el medio del estudio, sin poder asimilar todo lo que habían oído.

voten y comenten si les gustó